Pueblos indígenas solicitan atención para prevenir Covid
Los pueblos indígenas del departamento de Tarija –Tapiete, Weenhayek y Guaraní- solicitaron mayor atención en la prevención de contagios por coronavirus porque se consideran una zona vulnerable sin acceso a centros de salud. Los pueblos indígenas viven en aislamiento mucho antes de la...
Los pueblos indígenas del departamento de Tarija –Tapiete, Weenhayek y Guaraní- solicitaron mayor atención en la prevención de contagios por coronavirus porque se consideran una zona vulnerable sin acceso a centros de salud.
Los pueblos indígenas viven en aislamiento mucho antes de la presencia del coronavirus en el territorio departamental. La falta de acceso a centros de salud, la falta de educación sexual y reproductiva en los jóvenes, las anuales crecidas del río Pilcomayo que afecta a las viviendas de una zona y por ende las declaratorias de emergencia para ayudar a estas familias, y otras características no ayudaron a mejorar las condiciones de vida de los indígenas, pese a las sustanciosas inversiones como el Fondo Indígena que se realizaron en los últimos años.
El Gobierno nacional mencionó que se deberá prestar especial atención en los pueblos indígenas por la vulnerabilidad al virus. Para el dirigente de los pueblos indígenas del departamento de Tarija, Andrés Segundo, los pobladores guaraníes, tapiete y weenhayek no cuentan con la información necesaria y desconocen los protocolos que deben realizarse en caso alguno de ellos se contagie. El apoyo de la Gobernación a 7.000 familias con canastones de alimentos básicos ayudó a amortiguar la falta de insumos que sufre esta población. El gobernador, Adrián Oliva, asumió que los pueblos indígenas se encuentran en una situación desventajosa y a partir del 15 de abril inició la entrega de alimentos.
Segundo explicó que si bien el aislamiento es parte de la cotidianeidad de los pueblos indígenas la visita de personas externas podría llegar a ser un problema. Por otro lado, señaló que la mayoría de los habitantes de estas comunidades desconocen las características específicas del virus y no están preparados.
“Nosotros les hemos explicado que en caso de ver que alguno de los integrantes de las comunidades se sienta mal de salud, este enfermo, con tos seca debe inmediatamente llamar al 106 para que el personal médico se traslade hasta estos lugares que no son de fácil acceso. Les hemos recomendado que no estén ocultando si hay casos. A ellos les conviene en estos momentos estar así de aislados para que no se contagien de ninguna persona que puede llegar de afuera, pero nunca se sabe. También hay preocupación porque no hay centros de salud como en la ciudad”, dijo.
Por otro lado, resaltó que el uso de barbijos y alcohol en gel no son utilizados en sus quehaceres. Dentro de una vivienda pueden vivir varias familias de generaciones distintas entre los abuelos, las madres, los hijos, los adolescentes y demás por lo que el contacto directo con varias familias es cotidiano.
“Cuando fuimos a verlos les indicamos que no se acerquen a las personas externas que puedan llegar por cualquier motivo. Fuimos a las comunidades que están ubicadas en Villa Montes. Como pueblos indígenas nos gustaría que los municipios que tienen población indígena se encargue de sus necesidades básicas en este momento. No nos olvidemos que ellos solo viven de la pesca una vez al año”, expresó.
Organizaciones Internacionales piden seguridad para los indígenas
Varias organizaciones de lucha por los derechos por las comunidades indígenas, entre ellas el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional -Center for Justice and International Law en inglés- (CJDIL), han desarrollado un manifiesto en medio de la pandemia por el coronavirus para que los Estados puedan implementar.
Entre las solicitudes están; incluir a los pueblos indígenas en la formulación de mecanismos y medidas para la implementación de respuestas a la pandemia COVID-19, a fin de adoptar medidas culturalmente adecuadas para cada pueblo. Garantizar que todas las acciones y medidas tomadas sean realizadas en completa coordinación con las autoridades de las comunidades indígenas, con irrestricto respeto a los derechos de consulta y consentimiento previo. Generar información apropiada sobre la magnitud y los riesgos de la crisis sanitaria, los métodos de prevención y atención las medidas a implementar.
Además, implementar medidas que garanticen la seguridad alimentaria adecuada, el acceso en cantidades necesarias al agua potable y a los servicios de salud apropiados para las necesidades de los pueblos indígenas, incluyendo protocolos especiales.
Los pueblos indígenas viven en aislamiento mucho antes de la presencia del coronavirus en el territorio departamental. La falta de acceso a centros de salud, la falta de educación sexual y reproductiva en los jóvenes, las anuales crecidas del río Pilcomayo que afecta a las viviendas de una zona y por ende las declaratorias de emergencia para ayudar a estas familias, y otras características no ayudaron a mejorar las condiciones de vida de los indígenas, pese a las sustanciosas inversiones como el Fondo Indígena que se realizaron en los últimos años.
El Gobierno nacional mencionó que se deberá prestar especial atención en los pueblos indígenas por la vulnerabilidad al virus. Para el dirigente de los pueblos indígenas del departamento de Tarija, Andrés Segundo, los pobladores guaraníes, tapiete y weenhayek no cuentan con la información necesaria y desconocen los protocolos que deben realizarse en caso alguno de ellos se contagie. El apoyo de la Gobernación a 7.000 familias con canastones de alimentos básicos ayudó a amortiguar la falta de insumos que sufre esta población. El gobernador, Adrián Oliva, asumió que los pueblos indígenas se encuentran en una situación desventajosa y a partir del 15 de abril inició la entrega de alimentos.
Segundo explicó que si bien el aislamiento es parte de la cotidianeidad de los pueblos indígenas la visita de personas externas podría llegar a ser un problema. Por otro lado, señaló que la mayoría de los habitantes de estas comunidades desconocen las características específicas del virus y no están preparados.
“Nosotros les hemos explicado que en caso de ver que alguno de los integrantes de las comunidades se sienta mal de salud, este enfermo, con tos seca debe inmediatamente llamar al 106 para que el personal médico se traslade hasta estos lugares que no son de fácil acceso. Les hemos recomendado que no estén ocultando si hay casos. A ellos les conviene en estos momentos estar así de aislados para que no se contagien de ninguna persona que puede llegar de afuera, pero nunca se sabe. También hay preocupación porque no hay centros de salud como en la ciudad”, dijo.
Por otro lado, resaltó que el uso de barbijos y alcohol en gel no son utilizados en sus quehaceres. Dentro de una vivienda pueden vivir varias familias de generaciones distintas entre los abuelos, las madres, los hijos, los adolescentes y demás por lo que el contacto directo con varias familias es cotidiano.
“Cuando fuimos a verlos les indicamos que no se acerquen a las personas externas que puedan llegar por cualquier motivo. Fuimos a las comunidades que están ubicadas en Villa Montes. Como pueblos indígenas nos gustaría que los municipios que tienen población indígena se encargue de sus necesidades básicas en este momento. No nos olvidemos que ellos solo viven de la pesca una vez al año”, expresó.
Organizaciones Internacionales piden seguridad para los indígenas
Varias organizaciones de lucha por los derechos por las comunidades indígenas, entre ellas el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional -Center for Justice and International Law en inglés- (CJDIL), han desarrollado un manifiesto en medio de la pandemia por el coronavirus para que los Estados puedan implementar.
Entre las solicitudes están; incluir a los pueblos indígenas en la formulación de mecanismos y medidas para la implementación de respuestas a la pandemia COVID-19, a fin de adoptar medidas culturalmente adecuadas para cada pueblo. Garantizar que todas las acciones y medidas tomadas sean realizadas en completa coordinación con las autoridades de las comunidades indígenas, con irrestricto respeto a los derechos de consulta y consentimiento previo. Generar información apropiada sobre la magnitud y los riesgos de la crisis sanitaria, los métodos de prevención y atención las medidas a implementar.
Además, implementar medidas que garanticen la seguridad alimentaria adecuada, el acceso en cantidades necesarias al agua potable y a los servicios de salud apropiados para las necesidades de los pueblos indígenas, incluyendo protocolos especiales.