Pugnas internas dividen al MAS y juventudes busca reestructuración
Los conflictos del Movimiento Al Socialismo (MAS) en Tarija no son diferentes a los que se presentaron en otros departamentos de Bolivia. El proyecto del MAS inició hace más de 14 años y Evo Morales fue la punta de la flecha, su propuesta era un plan de nacionalización, industrialización, un...



Los conflictos del Movimiento Al Socialismo (MAS) en Tarija no son diferentes a los que se presentaron en otros departamentos de Bolivia. El proyecto del MAS inició hace más de 14 años y Evo Morales fue la punta de la flecha, su propuesta era un plan de nacionalización, industrialización, un cambio estructural que apostaba a la inclusión social y defendía al trabajador.
Sin embargo, en 14 años el interior del MAS cambió. Muchos militantes en Tarija, entre los más antiguos, Nelson Aguilar, indicó que una de las jugadas desfavorables que tuvo el instrumento político fue tener invitados de otros partidos. Una de las estrategias para incluir no solo a los movimientos sociales del país, a los campesinos y a los obreros de todos los rubros fue dar paso a profesionales que dijeron estar de acuerdo con las bases ideológicas del MAS.
“Hubo gente que perteneció a la derecha durante toda su labor política y después se dio la vuelta diciendo que formaba parte del MAS, pero las bases ideológicas siempre fueron de derecha”, explicó Aguilar. El tema de los invitados molestó a los intelectuales del MAS y no terminó de convencer a las bases sociales, pero Morales avanzó implacable con su decisión.
Muy pronto los puestos de representatividad del departamento en la esfera nacional se llenaron de ex adenistas, movimientistas, miristas u otros partidos, entre ellos: Milcíades Peñaloza, Álvaro Ruiz y otros. Pero las bases también pelearon. Los dirigentes se separaron y poco a poco cada organización tuvo dos dirigencias, esto pasó en el Chaco con los indígenas guaraníes, weenhayek y las Bartolinas. Aunque esta situación se negó una y otra vez, en lugar de encararla y aplicar estrategias de unificación.
Después del conflicto nacional que se desató tras la denuncia del fraude electoral en octubre pasado y la renuncia del ex presidente Evo Morales, su salida del país y la búsqueda de todos los militantes del MAS por un nuevo líder que intente ocupar el vacío que dejó su máximo líder, emergió Andrónico Rodríguez.
Andrónico es el vicepresidente de la Coordinadora de las Seis Federaciones de Cocaleros del Trópico de Cochabamba y ahora es la nueva imagen del MAS. Un Evo mucho más joven y renovado es lo que se dice detrás del escenario.
En la última visita que realizó al departamento de Tarija en la Federación Sindical de Comunidades Campesinas de Tarija (Fsucct) mencionó algo clave para los nuevos votantes. “Si bien esta nueva generación de ciudadanos y ciudadanas de Bolivia, que se denominada millennials, no atravesó experimentalmente las dictaduras militares ni vivió las épocas más difíciles en la economía de Bolivia, los padres y madres de los mismos si, por eso no es indiferente la necesidad de una lucha de clases sociales y ahora feminista”.
El ex candidato a diputado por el MAS Tarija, Ariel Camacho, explicó que se deben tomar en cuenta varias premisas para reestructurar el partido, como ser el respeto orgánico por los movimientos sociales, tiene que haber una índole de absoluta solidaridad de clase, los principios y valores dentro del proceso de cambio y la despatriarcalización. “Hay que hablar sobre la disputa de la conciencia por una alienación por parte de una sociedad señorial, capitalista. Somos una generación que ha vivido la última crisis general nacional el 2000-2003, cuando éramos muy pequeños, muy jóvenes. Hemos vivido los 14 años del proceso de cambio, somos una generación que ha palpado la conciencia, de estos cuadros”, argumentó.
Sin embargo, en 14 años el interior del MAS cambió. Muchos militantes en Tarija, entre los más antiguos, Nelson Aguilar, indicó que una de las jugadas desfavorables que tuvo el instrumento político fue tener invitados de otros partidos. Una de las estrategias para incluir no solo a los movimientos sociales del país, a los campesinos y a los obreros de todos los rubros fue dar paso a profesionales que dijeron estar de acuerdo con las bases ideológicas del MAS.
“Hubo gente que perteneció a la derecha durante toda su labor política y después se dio la vuelta diciendo que formaba parte del MAS, pero las bases ideológicas siempre fueron de derecha”, explicó Aguilar. El tema de los invitados molestó a los intelectuales del MAS y no terminó de convencer a las bases sociales, pero Morales avanzó implacable con su decisión.
Muy pronto los puestos de representatividad del departamento en la esfera nacional se llenaron de ex adenistas, movimientistas, miristas u otros partidos, entre ellos: Milcíades Peñaloza, Álvaro Ruiz y otros. Pero las bases también pelearon. Los dirigentes se separaron y poco a poco cada organización tuvo dos dirigencias, esto pasó en el Chaco con los indígenas guaraníes, weenhayek y las Bartolinas. Aunque esta situación se negó una y otra vez, en lugar de encararla y aplicar estrategias de unificación.
Después del conflicto nacional que se desató tras la denuncia del fraude electoral en octubre pasado y la renuncia del ex presidente Evo Morales, su salida del país y la búsqueda de todos los militantes del MAS por un nuevo líder que intente ocupar el vacío que dejó su máximo líder, emergió Andrónico Rodríguez.
Andrónico es el vicepresidente de la Coordinadora de las Seis Federaciones de Cocaleros del Trópico de Cochabamba y ahora es la nueva imagen del MAS. Un Evo mucho más joven y renovado es lo que se dice detrás del escenario.
En la última visita que realizó al departamento de Tarija en la Federación Sindical de Comunidades Campesinas de Tarija (Fsucct) mencionó algo clave para los nuevos votantes. “Si bien esta nueva generación de ciudadanos y ciudadanas de Bolivia, que se denominada millennials, no atravesó experimentalmente las dictaduras militares ni vivió las épocas más difíciles en la economía de Bolivia, los padres y madres de los mismos si, por eso no es indiferente la necesidad de una lucha de clases sociales y ahora feminista”.
El ex candidato a diputado por el MAS Tarija, Ariel Camacho, explicó que se deben tomar en cuenta varias premisas para reestructurar el partido, como ser el respeto orgánico por los movimientos sociales, tiene que haber una índole de absoluta solidaridad de clase, los principios y valores dentro del proceso de cambio y la despatriarcalización. “Hay que hablar sobre la disputa de la conciencia por una alienación por parte de una sociedad señorial, capitalista. Somos una generación que ha vivido la última crisis general nacional el 2000-2003, cuando éramos muy pequeños, muy jóvenes. Hemos vivido los 14 años del proceso de cambio, somos una generación que ha palpado la conciencia, de estos cuadros”, argumentó.