Entel vuelve a contratar a empresa que debe a serenos
La Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel) volvió a contratar a la empresa de seguridad SSTEL, que en el año 2014, 2015 y 2016 infringió derechos laborales de quienes cuidan las antenas repetidoras en los cerros. Además, cuando acabó su contrato se fue adeudándoles a los...



La Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel) volvió a contratar a la empresa de seguridad SSTEL, que en el año 2014, 2015 y 2016 infringió derechos laborales de quienes cuidan las antenas repetidoras en los cerros. Además, cuando acabó su contrato se fue adeudándoles a los trabajadores. La estatal boliviana, por segunda vez, omite dar respuesta al respecto. Mientras que la Central Obrera Departamental (COD) decidió llevar este caso a instancias nacionales. Pues en Tarija ni la acción del Ministerio de Trabajo fue suficiente para que los empleados no sean engañados.
El caso es que Entel terciariza el servicio del cuidado de sus bienes, las tres últimas empresas GIPS, SARIAS y SSTEL tienen antecedentes de infringir los derechos laborales. Según el relato de los trabajadores, cuidar el patrimonio de la empresa nacionalizada significa trabajar 24 horas, los siete días a la semana, sin feriados ni vacaciones, sin agua ni ropa de trabajo. Todo, por un salario mínimo de 2.060 bolivianos al mes. A quienes se animaron a denunciar esta situación no los volvieron a contratar, ni siquiera se tomó en cuenta que tenían más 15 años de antigüedad.
La situación no es desconocida por autoridades legislativas, pues un acta de compromiso del 2016, firmada en el mini hemiciclo de la Cámara de Diputados, indica que el responsable de SSTEL, Martín Chávez, se comprometió a entregar agua, ropa de trabajo, pagar horas dominicales y feriados adeudados del año 2014, 2015 y 2016, no solo de los serenos de Tarija, sino también de Beni, Santa Cruz y Cochabamba. Además de una liquidación conforme a normativa laboral.
Don Ángel Mamani, que en la actualidad no fue contratado por ser uno de los denunciantes de este caso, revela que ese acuerdo no fue cumplido. Como prueba mostró las conminatorias que hizo el Ministerio de Trabajo a la empresa infractora a finales del año 2016.
Luego de ello vino la empresa GIPS, que a la fecha le adeuda dos meses de salario y sus beneficios sociales. La preocupación es que la misma SSTEL, que operó hasta 2016, de nuevo fue contratada por Entel y por invitación directa. Por lo cual, Mamani sostiene que la estatal de los bolivianos premia a las empresas que tiene a los trabajadores en condiciones de semiesclavitud y vulneran derechos.
Fabiola Mamani también trabajaba cuidando las antenas de Entel en el municipio de El Puente, pero el supervisor de SSTEL, Oscar Mamani Ali, le dio un memorándum de despido, que ella considera que es injustificado porque nunca faltó a su fuente laboral. Además, dijo que fue víctima de agresiones verbales.
El ejecutivo de la COD, Walter Aguilera, sostuvo que su institución envió una comisión a Entel Tarija, donde le respondieron que los contratos lo hacen directamente desde La Paz, pero las subcontratadas que se fueron debiéndoles a los trabajadores no tienen ni un representante legal en esta jurisdicción.
“Lo que nosotros hemos reclamado en la Central Obrera Boliviana (COB) es que no es justo que una empresa que ya incumplió con todo y que engañó a los trabajadores de nuevo sea contratada -comentó el dirigente- lo peor de todo es que se vayan incumpliendo y nadie les haga nada. De aquí a un año la SSTEL puede volver a engañar a los trabajadores y nadie podrá hacer nada”.
En ese sentido, Aguilera manifestó que su ente matriz junto al Ministerio de Trabajo nacional trata de ubicar a las empresas que ya fueron infractoras. Sin embargo, la idea es que Entel sea la que haga la retención económica para que los trabajadores no se queden impagos.
MOLESTIA POR CONTRATAR A EMPRESA INFRACTORA
Ángel Mamani
La preocupación es que la misma SSTEL de nuevo fue contratada por Entel y por invitación directa. El temor es que nos vuelva a engañar. Además, pensamos que la estatal de los bolivianos premia a las empresas que tiene a los trabajadores en condiciones de semiesclavitud.
Walter Aguilera
Lo que nosotros hemos reclamado en la COB es que no es justo que una empresa que incumplió y que engañó a los trabajadores de nuevo sea contratada. Que se vayan incumpliendo y nadie les haga nada. De aquí a un año la SSTEL puede volver a engañar a los trabajadores.
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El caso es que Entel terciariza el servicio del cuidado de sus bienes, las tres últimas empresas GIPS, SARIAS y SSTEL tienen antecedentes de infringir los derechos laborales. Según el relato de los trabajadores, cuidar el patrimonio de la empresa nacionalizada significa trabajar 24 horas, los siete días a la semana, sin feriados ni vacaciones, sin agua ni ropa de trabajo. Todo, por un salario mínimo de 2.060 bolivianos al mes. A quienes se animaron a denunciar esta situación no los volvieron a contratar, ni siquiera se tomó en cuenta que tenían más 15 años de antigüedad.
La situación no es desconocida por autoridades legislativas, pues un acta de compromiso del 2016, firmada en el mini hemiciclo de la Cámara de Diputados, indica que el responsable de SSTEL, Martín Chávez, se comprometió a entregar agua, ropa de trabajo, pagar horas dominicales y feriados adeudados del año 2014, 2015 y 2016, no solo de los serenos de Tarija, sino también de Beni, Santa Cruz y Cochabamba. Además de una liquidación conforme a normativa laboral.
Don Ángel Mamani, que en la actualidad no fue contratado por ser uno de los denunciantes de este caso, revela que ese acuerdo no fue cumplido. Como prueba mostró las conminatorias que hizo el Ministerio de Trabajo a la empresa infractora a finales del año 2016.
Luego de ello vino la empresa GIPS, que a la fecha le adeuda dos meses de salario y sus beneficios sociales. La preocupación es que la misma SSTEL, que operó hasta 2016, de nuevo fue contratada por Entel y por invitación directa. Por lo cual, Mamani sostiene que la estatal de los bolivianos premia a las empresas que tiene a los trabajadores en condiciones de semiesclavitud y vulneran derechos.
Fabiola Mamani también trabajaba cuidando las antenas de Entel en el municipio de El Puente, pero el supervisor de SSTEL, Oscar Mamani Ali, le dio un memorándum de despido, que ella considera que es injustificado porque nunca faltó a su fuente laboral. Además, dijo que fue víctima de agresiones verbales.
El ejecutivo de la COD, Walter Aguilera, sostuvo que su institución envió una comisión a Entel Tarija, donde le respondieron que los contratos lo hacen directamente desde La Paz, pero las subcontratadas que se fueron debiéndoles a los trabajadores no tienen ni un representante legal en esta jurisdicción.
“Lo que nosotros hemos reclamado en la Central Obrera Boliviana (COB) es que no es justo que una empresa que ya incumplió con todo y que engañó a los trabajadores de nuevo sea contratada -comentó el dirigente- lo peor de todo es que se vayan incumpliendo y nadie les haga nada. De aquí a un año la SSTEL puede volver a engañar a los trabajadores y nadie podrá hacer nada”.
En ese sentido, Aguilera manifestó que su ente matriz junto al Ministerio de Trabajo nacional trata de ubicar a las empresas que ya fueron infractoras. Sin embargo, la idea es que Entel sea la que haga la retención económica para que los trabajadores no se queden impagos.
MOLESTIA POR CONTRATAR A EMPRESA INFRACTORA
Ángel Mamani
La preocupación es que la misma SSTEL de nuevo fue contratada por Entel y por invitación directa. El temor es que nos vuelva a engañar. Además, pensamos que la estatal de los bolivianos premia a las empresas que tiene a los trabajadores en condiciones de semiesclavitud.
Walter Aguilera
Lo que nosotros hemos reclamado en la COB es que no es justo que una empresa que incumplió y que engañó a los trabajadores de nuevo sea contratada. Que se vayan incumpliendo y nadie les haga nada. De aquí a un año la SSTEL puede volver a engañar a los trabajadores.
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