José Mujica: “Pinto desde que tengo uso de razón”
El heredero de José Santos Mujica Miér es uno de los exponentes de la nueva pintura tarijeña.
Cuando era niño, José Mujica Balderrama le ayudaba a su padre a modelar en arcilla, y poco a poco fue adquiriendo conocimientos y técnicas para su propia expresión. “Pinto desde que tengo uso de razón”, comentó a Pura Cepa el coorganizador del Concurso y Encuentro Internacional de Pintura “Guadalquivir”, recordando los momentos en el taller de su padre.
José Mujica también es arquitecto y profesor. Los alumnos de Arquitectura y Diseño Gráfico de la Universidad Católica Boliviana reciben, quizá muchos sin saberlo, la enseñanza que José tuvo de aquel orureño que hiciera de Tarija su trono, y la cuna del hijo que comparte su nombre, a quien enseñó el arte de observar y amar su tierra.
En “Encuentro”, una de las obras más conocidas de José, se reúnen seis de los personajes tarijeños más ilustres: Nilo Soruco, Óscar Alfaro, Octavio Campero Echazú, Roberto Echazú, Eduardo Farfán y Luis Aldana. Algunos de ellos se encontraron en vida, otros no, quizá algunos ni se habrían hablado, pero todos ellos tienen en común la estrella y el sentir profundo con el que dieron forma a lo tarijeño, a la mística de su territorio, al humor sin pirca, y a la fuerza con que se busca vida y justicia para todos y no unos cuantos.
Y aunque el tarijeño es arraigado a su tierra, en el arte José Mujica va y viene entre figuración y abstracción, dándole una mirada fresca a la tradición, y aferrándose cada vez más a la misión de romper las fronteras que mantienen a las artes en un costumbrismo monotemático. “Cualquier pintor que comienza, puede copiar. Pero si no hay algo propio, una percepción, una forma distinta de pintar, la gente no verá nada nuevo”, señaló Mujica.
“La gente se va educando con la observación”
El artista encuentra una paradoja a la que hay que prestar atención: si el movimiento artístico se queda en reproducir continuamente los temas y símbolos de lo tradicional, lo folclórico y lo costumbrista, no habrá invención. “Sólo robar y copiar es hacer artesanía, y nada más, con la pérdida de esencia e identidad que eso conlleva”.
Por ello, Mujica aboga por incrementar la observación y el conocimiento de nuevas técnicas y estilos para salir de lo tradicional, “robar ideas, pero hacerlas tuyas, como decía Picasso”, y así transformar el rumbo de las artes y la educación artística en Tarija.
Por esto, para Mujica es importante traer obras de otros artistas, hacer exposiciones rupturistas, y desafiarse a lograr una identidad propia, pues esto hará que el público tarijeño salga de la costumbre de ver “lo de siempre. Si vemos siempre lo mismo, te encierras en un círculo y no sales más. La gente se va educando con la observación”.