Sampietro propondrá el primer canon de la literatura tarijeña
3600, una de las editoriales de mayor prestigio en Bolivia, publicó la nueva obra de Franco Sampietro, escritor argentino radicado en Tarija.



Sampietro lee mucho, tanto que hace tiempo notó la falta de un canon literario tarijeño –ni en la Casa del Escritor de Tarija han querido ocuparse de la misión–, y enseguida se puso discernir entre lo que es y lo muy vanagloriado de la literatura de esta tierra para acabar con una veintena de autores y obras que considera imprescindibles para sentir, pensar y vivir la complejidad y gloria de Tarija desde las letras.
Por lo tanto, Sampietro es el autor del primer ensayo general sobre literatura tarijeña, tomando en cuenta que Tarija era, hasta hoy, el único departamento sin canon literario alguno, o cosa que, seriamente, se le parezca. El esfuerzo fue publicado por la editorial paceña 3600, y se presentará este jueves 28 de septiembre a las 19 horas en Casa Creart (Av. Domingo Paz 517, esquina Campero).
Hay cosas muy conocidas que no valen absolutamente nada y que se han consagrado porque sirven a lo que la rosca quiere que se diga de Tarija
Sin duda será una obra imprescindible que promete ser precisa y polémica por motivos que Sampietro expone en esta breve entrevista exclusiva de Pura Cepa.
Pura Cepa (PC). ¿Qué es un canon literario?
Franco Sampietro (FS). Una clasificación y orden sobre la literatura que se ha escrito en un lugar, cuáles son los libros que se consideran los mejores y por qué, y cómo han tenido influencia en la posteridad. El “Canon Occidental” de Harold Bloom, por ejemplo, incluye obras y autores como El Quijote, La Odisea, Shakespeare y Borges. Hay autores que han ganado el Nobel y no figuran en su canon, y hay gente con capacidad tremenda, como Borges, que no le han dado el Nobel porque en la época que llegaban exiliados de América Latina a Suecia el tipo decía que los militares eran caballeros y Pinochet había salvado a América Latina del comunismo.
PC. ¿Cuál fue tu premisa para acabar con veinte autores y obras?
FS. Lo que trato de hacer es separar lo que vale de lo que no vale. El criterio ha sido el valor estético de las obras, sean conocidas o no, o la importancia histórica que han tenido. Hay libros que me parecen muy malos, pero han tenido una importancia muy grande, como “Subdesarrollo y Felicidad”, entonces no lo puedo obviar y comento por qué ha llegado a donde está. Hay cosas muy conocidas que no valen absolutamente nada y que se han consagrado porque sirven a lo que la rosca quiere que se diga de Tarija, al lado de otros libros sorprendentemente buenos que ni siquiera se conocen. “Memorias de Villa Rosa”, de María Virginia Estenssoro, es un libro de cuentos escrito hace más de 80 años donde ves Tarija desde los ojos de una mujer inteligente. Lo publicaron sus hijos y se ha hecho todo lo posible por ocultarlo, porque no les gusta lo que dice de Tarija. Otro más, “El castellano popular en Tarija”, de Víctor Varas Reyes, demuestra el origen en parte andino de los tarijeños por su manera de hablar el castellano.
PC. ¿Cuáles son los rasgos fundamentales de la literatura tarijeña?
FS. El tema que más predomina, de modo obsesivo, es el origen étnico de sus habitantes. Tarija ha sido siempre manejada económica, política y culturalmente por un pequeño grupo de familias para quienes los tarijeños son de pura raza española. En la última elección para gobernador, Óscar Montes desempolvó este discurso españolista para que la gente votara contra los “enemigos de Tarija”. Óscar Alfaro tuvo que irse por enfrentar a la rosca y acusarles de explotadores terratenientes, porque es el primero que dice de modo frontal que el campesino tarijeño es de origen indígena. Eso nunca se lo perdonaron. Luego, básicamente se ha escrito poesía lírica y narrativa documental, es decir, libros que tratan de entender la realidad y explicarla no desde la ficción, pero tampoco de un modo académico formal, como “Las tejas de mi techo” y “Las crónicas de Tarija”. Pero lo que más llama la atención es que está todo mezclado, la gente valiosa está con otros que no aportan nada nuevo y se han consagrado sin haber leído, y se nota en la falta de estilo, profundidad, todo. Y esa mezcolanza es una característica de Tarija, no sólo de la literatura tarijeña. Cualquiera en Tarija puede ser cualquier cosa, estrella de rock, modelito top, escritor consagrado, hasta candidato a presidente, como el caso de Virginio Lema. Viven en un mundo tan irreal, que creen que el poder que tienen acá lo pueden tener en otro lado. Y hace daño, porque fuera de Tarija no nos toman en serio. Al lado de eso, es impresionante el nivel de creatividad que ha habido. Para un pueblo chico de 200 años, hay una literatura secreta de un nivel muy alto y creativo.
PC. ¿Qué implica este canon para los nuevos escritores tarijeños de este siglo?
FS. Es una manera de aprendizaje, van a conocer mejor la literatura de la que parten. Se habla mucho del concepto de tradición y lo que aporta a la literatura para tener un valor estético. No solamente la belleza, sino la novedad. Decir algo nuevo y de un modo nuevo.