"Desde Nosotros", para nosotros

Tres payasos lo dicen todo sin siquiera abrir la boca, nos relatan nuestro tiempo reciente, la paranoia sanitaria que aún queda después de la pandemia, la dependencia abrumadora a los dispositivos móviles y la lógica de popularidad de las redes sociales, las formas de torcer la ley y de volver a enderezarla, entre tantas ironías y afectos de la vida en esta ciudad de llantos y sonrisas.

“Desde Nosotros” es la obra teatral más reciente de la compañía Itaú Teatro, un drama tragicómico que sucede en una banca de una plaza cualquiera, que detrás tiene un arbusto frondoso. Esta escena es posible porque se relata en clave de “clown”, ese legendario personaje del teatro y el circo que nos permite, con su pequeñísima máscara de “nariz roja”, desnudar la compleja humanidad e imaginar en serio.

El trío de payasos está formado por Estefanía Moya, Sadid Arancibia y Ronald Millares, quien dirige la compañía, pero en esta ocasión deja el puesto de director para sumergirse en una creación colectiva con sus compañeros, decisión acertada que a la vez cobra en ritmo y prolijidad a la puesta en escena al ausentarse la mirada constante del primer espectador de toda obra, que es siempre quien la dirige.

Eso pasa a segundo plano cuando lo relatado es tan cierto para el público que ríe siempre en complicidad con Moya, capaz de ternura y severidad, Arancibia, de etérea picardía, y Millares, preciso y refinado en sus movimientos. Ellos traen la experiencia de la calle al escenario, la cual se percibe en su manera de transitar por el tablado, en los juegos y la relación que establecen con el público (un poco tímida para su estreno dado el día 27 en el XXXII Festival Abril en Tarija), y en los subtextos y metatextos sociales, bien situados en las escenas preparadas y en los elementos utilizados para afirmarlas.

Demos un ejemplo de hasta dónde va el discurso. En la escena donde la gendarme Moya cuida una banca pública con un fusil, se acerca el lector Millares buscando asiento. El estado de cosas es tal, que incluso leer parece estar prohibido. La gendarme aprovecha su poder para hacerse con el libro de Millares, que resulta ser “Impulsando la Vía Urbana en el Alba de los Pueblos por su Liberación”, editado por la Secretaría Latinoamericana de la Vivienda y el Hábitat Popular.

Leyendo, entiende que es servil a un sistema injusto en el que lo público produce riqueza para unos cuantos.

Es posible que a la mayoría del público se le escape ese dato, pero si se logra capturar, se entiende que esa gendarme vive el despertar de su conciencia. Leyendo, entiende que es servil a un sistema injusto en el que lo público produce riqueza para unos cuantos, que su ejercicio de ciudadanía es un ejercicio de violencia, y que hay personas a nuestro lado que pueden estar sufriendo por falta de vivienda y hábitat dignos. Estas revelaciones le despiertan llantos y sonrisas, brotan enormes sentimientos de su pecho, y el público está ahí, reflejando en sus rostros esta transformación tan necesaria.