Leonor Ávila y el don innato de curar
En el Centro de Sanación y Medicina Alternativa “Jaguar de Fuego”, ofrecen medicina natural y gemoterapia, entre otras sanaciones. Más información al 78222830.
Desde que tiene conciencia, el amor por la medicina, las plantas y las curaciones es algo natural en Leonor Jesús Ávila García. “Este amor que siento lo tenía desde que era chiquitita, le hacía brebajes a mi abuela e infusiones a la gente para curarlas. Yo sabía qué darles para que se sientan mejor. Es un algo innato de mi ser. Y agradezco mucho que lo siga teniendo, porque puedo ayudar a las personas a curarse de ciertas enfermedades”.
Leonor ha viajado por muchos lugares para aprender diferentes medicinas. “Conozco toda Bolivia, Perú y el Brasil. Fui al altiplano, los kallawayas me enseñaron los poderes de las plantas y algunos rituales. Bolivia tiene las personas más bondadosas que he conocido. Somos personas muy buenas. Cuando tenemos algo, lo damos de corazón, sin esperar nada porque nos nace”.
“Hago medicina de estas plantas para concientizar a la gente que tienen muchos más beneficios que ser buena leña para una parrillada”
Luego de un camino de aprendizajes, Leonor volvió a Tarija para vivir la tranquilidad y la paz de su tierra. Trajo conocimientos de medicina natural y prepara cremas, ungüentos, jarabes y tinturas que están a disposición en “Jaguar de Fuego”, su Centro de Sanación y Medicina Alternativa.
“Tenemos gemoterapia, flores de Bach, hidroterapia. Trabajamos con biodecodificación para curar el alma y así sanar el cuerpo. Hay terapias con cantos chamánicos. Se usan lindas medicinas que nos traen de los llanos, los valles, el altiplano, la selva. También están las medicinas naturales que hago a base de plantas autóctonas de Tarija. Uso la flor de churqui y de molle, y otras plantas como la flor de pascua, para hacer medicina”.
Mientras la vegetación natural desaparece de la ciudad, merced de la expansión urbana indiscriminada y los proyectos improvisados, en universidades de Perú se estudia la medicina que puede extraerse de plantas como el churqui y el molle. De este último, por ejemplo, se obtiene una pimienta codiciada en Europa, y es la fuente del principio activo de la aspirina.
“Le tengo un especial afecto al churqui y al molle, son árboles muy hermosos. Hago medicina de estas plantas para concientizar a la gente que tienen muchos más beneficios que ser buena leña para una parrillada”. La sanadora explica que la crema de flor de churqui sirve para tratar la artritis, artrosis, dolores musculares, picaduras, quemaduras, hinchazones, infecciones, acné, y sus antioxidantes rejuvenecen la piel del rostro; el molle ayuda en contusiones e hinchazones, y con eucalipto es bueno para el sistema respiratorio.
Para Leonor, la medicina natural no calma síntomas, sino que cura enfermedades. “Un ejemplo es el asma. En farmacias tienen cosas para aplacarla, pero existen plantas que te pueden curar. Ya no tienes más síntomas. Es muy hermoso”.