Laura Aliaga: “Las toallitas desechables son un motivo del daño ambiental”
Laura produce y comercializa toallas femeninas amigables con el medio ambiente.
Laura Aliaga Valverde es una emprendedora paceña de 31 años que tiene un negocio de toallas femeninas ecológicas llamado Inda toallas ecológicas. Previo a esta actividad, Laura se dedicaba a la confección de tejidos y bikinis a crochet en la cuidad de Cochabamba.
Se desempeñó con los bikinis hasta que realizó un viaje a Colombia como mochilera, cuenta que al regresar se encontraba en una situación económica muy mala, pues los bikinis ya no eran rentables. Hablando con una amiga, confesó que ya no tenía dinero ni para sus toallas higiénicas, esta le respondió con la anécdota de que una vez había comprado toallas artesanles en una feria.
Eso inspiró a Laura a crear sus propias toallas femeninas. Lo hizo con una máquina de coser y un tutorial en YouTube. Entre risas cuenta que logró “el descubrimiento de su vida”, así que empezó a contarle a su entorno más cercano. Más tarde, en junio de 2019, vio la posibilidad de crear un emprendimiento centrado en las toallas, abrió páginas en redes sociales y empezó a asistir a ferias artesanales para ofrecer su producto.
“Las toallitas femeninas reutilizables combaten el daño ambiental”.
Pura Cepa (PC): ¿Qué te hizo ver que las toallas ecológicas eran una buena idea para emprender?
Laura Aliaga (LA): “Tienen muchas cosas buenas. Lo principal es que son amigables con el medio ambiente, no son desechables ni hechas con materiales dañinos para el ambiente. Lo segundo es su duración, cada toalla dura un promedio de 3 años, las clientes compran en promedio 10 y ya no tienen que volver a hacerlo en ese tiempo, por lo que también es un solo gasto cada mucho tiempo”.
(PC): ¿Cómo fue el recibimiento de las clientes?
(LA): “Al principio eran un poco reacias. Lo principal por lo que dudan es el lavado. Estamos acostumbradas a las toallas desechables, por lo que se ha vuelto un tabú el contacto con la sangre, pero realmente no tiene nada de malo. Se les explica un proceso de lavado y eso es todo, lo demás son solo prejuicios”.
(PC): ¿Cómo creció el emprendimiento?
(LA): “Al inicio tenía muy pocas clientes, ganaba solo lo justo para sobrevivir. El emprendimiento en realidad arrancó durante la cuarentena. Creo que mucha gente se dio cuenta del daño ambiental que causamos, y las toallitas son una gran razón. Ahora tengo puntos de venta en La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija, pero empecé de a poquito”.