Sonreír mejora nuestro humor
Sonreír mejora nuestro ánimo cuando estamos tristes, aumentando los pensamientos positivos. La liberación de una hormona llamada serotonina ayuda a levantar el ánimo y a alejar los pensamientos negativos que pueden favorecer la depresión. ¿Cuántas veces te ha pasado que tienes un mal día...
Sonreír mejora nuestro ánimo cuando estamos tristes, aumentando los pensamientos positivos. La liberación de una hormona llamada serotonina ayuda a levantar el ánimo y a alejar los pensamientos negativos que pueden favorecer la depresión. ¿Cuántas veces te ha pasado que tienes un mal día y algo con lo que te cruzas te hace sonreír y olvidar ese mal trago?
A tomar en cuenta
Cuando una persona sonríe resulta más agradable para el resto de las personas. Este gesto facilita la construcción de relaciones sociales y de vínculos más fuertes y saludables. Mantener y establecer relaciones sociales es un beneficio para tu salud mental, además de ayudarte a mejorar tu autoestima.
Sonreír en situaciones de mucha presión ayuda a mantener la frecuencia cardiaca baja, según un estudio publicado en la revista Psychological Science. Además, la sonrisa favorece la liberación de neuropéptidos que son unos neurotransmisores que ayudan a que las neuronas funcionan mejor y podamos pensar de manera más clara.
Cuando una persona sonríe, su frecuencia cardiaca aumenta inicialmente, pasando después a un período de relajación muscular, disminución de la frecuencia cardiaca y de la presión arterial ayudando a reducir la probabilidad de padecer enfermedades coronarias.
La sonrisa favorece la liberación de moléculas para mejorar nuestro sistema inmunológico. Sin embargo, los pensamientos negativos disminuyen la capacidad del cuerpo para responder a las enfermedades. Sonreír también nos ayuda a combatir el dolor de dos formas: por un lado, libera unas hormonas que actúan como analgésicos, y por otro, aumenta nuestro umbral del dolor creando una mayor tolerancia al mismo.
A tomar en cuenta
Cuando una persona sonríe resulta más agradable para el resto de las personas. Este gesto facilita la construcción de relaciones sociales y de vínculos más fuertes y saludables. Mantener y establecer relaciones sociales es un beneficio para tu salud mental, además de ayudarte a mejorar tu autoestima.
Sonreír en situaciones de mucha presión ayuda a mantener la frecuencia cardiaca baja, según un estudio publicado en la revista Psychological Science. Además, la sonrisa favorece la liberación de neuropéptidos que son unos neurotransmisores que ayudan a que las neuronas funcionan mejor y podamos pensar de manera más clara.
Cuando una persona sonríe, su frecuencia cardiaca aumenta inicialmente, pasando después a un período de relajación muscular, disminución de la frecuencia cardiaca y de la presión arterial ayudando a reducir la probabilidad de padecer enfermedades coronarias.
La sonrisa favorece la liberación de moléculas para mejorar nuestro sistema inmunológico. Sin embargo, los pensamientos negativos disminuyen la capacidad del cuerpo para responder a las enfermedades. Sonreír también nos ayuda a combatir el dolor de dos formas: por un lado, libera unas hormonas que actúan como analgésicos, y por otro, aumenta nuestro umbral del dolor creando una mayor tolerancia al mismo.