Conociendo nuestros huesos
Elías Vidaurre Médico El esqueleto, formado por 206 piezas óseas y médula, representa el 14% del peso total de una persona, del cual el calcio supone un total de hasta 1,5 kilos. Pero gozar de una buena salud ósea va más allá de prevenir dolencias, en el día a día los huesos...



Elías Vidaurre Médico
El esqueleto, formado por 206 piezas óseas y médula, representa el 14% del peso total de una persona, del cual el calcio supone un total de hasta 1,5 kilos. Pero gozar de una buena salud ósea va más allá de prevenir dolencias, en el día a día los huesos intervienen en actividades cotidianas que se realizan casi sin pensar.
Conociendo más
Un fragmento de hueso podría soportar más peso que el cemento, con una capacidad de aguantar hasta 9 toneladas sin fracturarse. Esto se debe a la dureza de la composición mineral de la que están formados. Esta combinación mineral no sólo es útil para brindar resistencia a la estructura sino también como reserva de calcio.
Pero para que el calcio pueda fijarse en los huesos necesita vitamina D. Una de las principales fuentes de esta vitamina procede de la exposición al sol, aunque también la podemos encontrar en alimentos como el pescado azul, la mantequilla o los huevos. Esta inversión en salud ósea es fundamental para prevenir futuras complicaciones, como la osteoporosis, un trastorno que afecta aproximadamente a 1 de cada 3 mujeres y a 1 de cada 5 hombres.
La salud ósea de los más pequeños es especialmente relevante, puesto que existen estudios que señalan que los niños de entre 6 y 8 años transportan en sus mochilas el 7% más del peso recomendado, lo que da lugar a molestias en la espalda y articulaciones. El deporte y la actividad física de forma regular también son pilares imprescindibles para gozar de un esqueleto saludable.
Hacer ejercicio provoca un efecto positivo en el aumento de la masa muscular y de la fortaleza ósea. Las actividades más beneficiosas son los ejercicios de resistencia con saltos e impacto vertical como el atletismo, la gimnasia o la danza, en las que se ha de soportar el peso propio del cuerpo.
El ejercicio mejora la salud de los huesos y ayuda al aumento de la fuerza muscular
El ejercicio físico permite el aumento de la densidad ósea, por ello procura siempre estar activo
La vitamina D es importante. Una de sus principales fuentes es la exposición al sol
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El esqueleto, formado por 206 piezas óseas y médula, representa el 14% del peso total de una persona, del cual el calcio supone un total de hasta 1,5 kilos. Pero gozar de una buena salud ósea va más allá de prevenir dolencias, en el día a día los huesos intervienen en actividades cotidianas que se realizan casi sin pensar.
Conociendo más
Un fragmento de hueso podría soportar más peso que el cemento, con una capacidad de aguantar hasta 9 toneladas sin fracturarse. Esto se debe a la dureza de la composición mineral de la que están formados. Esta combinación mineral no sólo es útil para brindar resistencia a la estructura sino también como reserva de calcio.
Pero para que el calcio pueda fijarse en los huesos necesita vitamina D. Una de las principales fuentes de esta vitamina procede de la exposición al sol, aunque también la podemos encontrar en alimentos como el pescado azul, la mantequilla o los huevos. Esta inversión en salud ósea es fundamental para prevenir futuras complicaciones, como la osteoporosis, un trastorno que afecta aproximadamente a 1 de cada 3 mujeres y a 1 de cada 5 hombres.
La salud ósea de los más pequeños es especialmente relevante, puesto que existen estudios que señalan que los niños de entre 6 y 8 años transportan en sus mochilas el 7% más del peso recomendado, lo que da lugar a molestias en la espalda y articulaciones. El deporte y la actividad física de forma regular también son pilares imprescindibles para gozar de un esqueleto saludable.
Hacer ejercicio provoca un efecto positivo en el aumento de la masa muscular y de la fortaleza ósea. Las actividades más beneficiosas son los ejercicios de resistencia con saltos e impacto vertical como el atletismo, la gimnasia o la danza, en las que se ha de soportar el peso propio del cuerpo.
El ejercicio mejora la salud de los huesos y ayuda al aumento de la fuerza muscular
El ejercicio físico permite el aumento de la densidad ósea, por ello procura siempre estar activo
La vitamina D es importante. Una de sus principales fuentes es la exposición al sol
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