Secuestró a dos chicas y cortó a una con un hacha
Dos chicas de 18 y 20 años fueron capturadas por un hombre que las interceptó a la salida de un boliche de la ciudad de Río Grande, Tierra del Fuego, atacó e hirió a una de ellas con un hacha en la cabeza y se las llevó en un auto, hasta que las víctimas lograron defenderse y huir, por lo...



Dos chicas de 18 y 20 años fueron capturadas por un hombre que las interceptó a la salida de un boliche de la ciudad de Río Grande, Tierra del Fuego, atacó e hirió a una de ellas con un hacha en la cabeza y se las llevó en un auto, hasta que las víctimas lograron defenderse y huir, por lo que ahora el agresor es intensamente buscado.
Fuentes policiales informaron que el episodio ocurrió el último domingo a la madrugada cuando las dos jóvenes salieron del boliche “La Barra”, situado en el centro de esa ciudad fueguina.
Según su relato, un hombre golpeó a una de ellas con un hacha y obligó a las dos a subir a la parte trasera de un vehículo marca Toyota de color azul oscuro, que de inmediato se dirigió a toda velocidad hacia la zona de Cabo Domingo, en las afueras del ejido urbano.
Las mujeres contaron que al intuir que se trataba de un secuestro, le manifestaron al hombre que sus padres podían pagar un rescate, pero el hombre se mostraba “muy violento” y repetía que iba a matarlas, mientras balbuceaba consignas sobre el Día Internacional de la Mujer.
Durante el trayecto, las víctimas del hecho lograron apoderarse del matafuegos del auto y golpearon al captor y lograron que las liberara en proximidades de Estancia Las Violetas, en las afueras de Río Grande.
Después, el agresor regresó hacia el centro de la ciudad, donde protagonizó un accidente y dejó abandonado el vehículo, explicaron las fuentes.
Las autoridades registraron el auto y hallaron en su interior el hacha que fue usada para agredir a una de las chicas, quien sufrió una herida cortante en la cabeza y recibió siete puntos de sutura.
La policía analiza las cámaras de seguridad en edificios cercanos al boliche y la titularidad del automóvil para intentar dar con el agresor, quien todavía permanece prófugo y es intensamente buscado.
Quiso irrumpir en refugio
de víctimas de violencia
En el Día de la Mujer, un hombre denunciado por abuso sexual intentó el domingo ingresar por la fuerza al refugio para víctimas de violencia de género donde se alojan su ex pareja y dos hijos, en la localidad bonaerense de Burzaco, de acuerdo con una denuncia.
El agresor embistió con su automóvil el portón de ingreso y golpeó a tres efectivas de la policía local que quisieron detenerlo, dijo la asociación Atravesados por el Femicidio y el municipio de Almirante Brown.
El sujeto, que tenía una restricción de acercamiento, no pudo cumplir su objetivo y fue detenido y puesto a disposición de la UFI N° 2 a cargo de la fiscal Fabiola Juanatei, imputado por “desobediencia”, un delito excarcelable, según explicó el abogado de la institución, Matías Bernal.
“Si dejan en libertad a este potencial femicida esta chica tiene los días contados y quien le conceda la libertad tendrá que hacerse cargo”, afirmó. Todo ocurrió en el refugio Uguet Mondaca de Burzaco (partido bonaerense de Almirante Brown) una organización de la sociedad civil que trabaja desde hace 17 años brindando alojamiento y protección a las víctimas de violencia de género y sus hijos, donde al momento de la agresión había ocho mujeres y unos 16 niños y niñas.
“El ataque se produjo cerca de las 20, cuando el sujeto intentó derribar con su vehículo la puerta de ingreso al Refugio reclamando por ‘su esposa e hijos’”, contó Marcela Morera, referente de la organización Atravesados por el Femicidio y madrina de la entidad junto a Jimena Ardúriz, madre de Ángeles Rawson.
Según el relato de la organización, inicialmente “efectivos policiales mujeres que se encontraban circulando por la zona intentaron contener la situación”, pero “fueron ferozmente atacadas” por el atacante que produjo “múltiples heridas”.
Morera contó que el agresor “tenía dos armas de fuego adentro del auto” y que “insultó a los gritos a las mujeres y niños que se encontraban en el interior, quienes corrieron a esconderse en la habitación del fondo”, atemorizados por la situación.