Escriba 100 veces:
No debo sostener procesos ajenos.
No debo sostener emociones ajenas.
No más allá de lo imaginable.
Hay algo más grande que usted y que yo sosteniendo todo cuanto sucede.
Confíe.
Confíe en que cada cual sabrá atender sus propios nudos a su propio tiempo.
Ocúpese de los suyos.
Quizá el otro se los esté mostrando.
Mientras tanto repita conmigo...
No es mi circo, no son mis monos.
Del otoño aprendí a soltar.
Del otoño aprendí que, aunque barras, habrá más.
Del otoño aprendí que ir hacia adentro no puede ser tan malo mientras haya una taza caliente y lana.
Del otoño aprendí a usar pieles prestadas mientras me desnudo.
Del otoño aprendí que manzana no es la palabra que la nombra.
Lo mismo que yo.
Lo mismo que tú.