La Inteligencia artificial y la educación

Chatbot como ChatGPT, Google Assistant, y otros están siendo utilizados a diferentes niveles y para diferentes usos. En la educación también se los utiliza de diferentes maneras, como para buscar información, mejorar modelos matemáticos, redactar documentos, y hasta realizar exámenes. La tecnología se ha desarrollado tan pronto que nuevas posibilidades se abren y generalmente están siendo descubiertas por los estudiantes que están a la vanguardia de la tecnología. El gran desafío radica en saber como utilizar esta tecnología en la educación de manera que no se pierda la oportunidad de aprender habilidades, conocimiento y pensamiento critico.

Este gran desafío se descompone en varios elementos. El primero es que muchos estudiantes están enganchados con Tik-tok o games en los teléfonos. El tiempo dedicado al teléfono es tiempo que no dedicaran a la lectura y preparación de sus materias. Al mismo tiempo, este hábito ha logrado acortar el tiempo de concentración y es muy difícil que el estudiante promedio quiera dedicar mas de 1 hora a revisar sus materias. El segundo elemento es que los estudiantes están protegidos por los papás bajo ideas como “si no te gusta algo, no lo hagas” o evitar el sufrimiento o respetar sus decisiones, aunque estas sean estratégicas para su futuro. Por estas razones, las opciones para los estudiantes para utilizar la IA son claras, utilizar las soluciones rápidas como hacer las tareas y hasta exámenes.

Existen muchas consecuencias si la población estudiantil no logra adquirir habilidades, conocimiento y pensamiento critico. El conocimiento básico sirve de base para generar mayor conocimiento. Las tareas ayudan a que el conocimiento se internalice y se vuelva parte del uso cotidiano. El impacto de la práctica del conocimiento se puede observar en el trabajo laboral. Con un conocimiento sólido, la productividad de una nación también se incrementa. Si los estudiantes utilizan el IA para librarse de la practica y el aprendizaje, no solo estarán reduciendo sus posibilidades de educarse y ganar habilidades, sino que también estarán empujando a las empresas a buscar alternativas tecnológicas a la carencia de una población que pueda suministrar éstas.

La tecnología debería estar al servicio de las personas pero no para eliminar la capacidad para educarse. Las maneras de cómo evaluar para observar si un estudiante está adquiriendo los conocimientos y habilidades esperadas está en la prioridad de las escuelas y universidades.