Tarija 2023:  Réquiem para la Rosca

Transcurrimos la mitad del año, y en Tarija lo vivimos con desesperanza, el colapso del modelo autonomista es parte del diario vivir, la política en contracorriente a radicalizarse como mandan los momentos de crisis, más bien tiende a atenuarse,  ejemplo de esto, es que abril marcó el aparente “fin de la guerra fría tarijeña” haciendo referencia a la transición de la delegación del poder de Poma  a Ferrufino donde la marcada polarización y confrontación mediática entre la gobernación y el primero va a diluirse rápidamente con el inicio del mando del segundo, marcando un antes y un después en la agenda de oposición departamental, al menos en el valle central, es la “Glasnost” una serie de reformas morales de Gorbachov, aplaudidas por occidente y cuestionadas en la URSS.

El fin de la “guerra fría”,  marca otro escenario de disputa donde se acentúan las contradicciones internas de los grupos dominantes la denominada “rosca” (forma de ejercicio del poder pseudo aristocrático, profundamente jerarquizado en Tarija por una estirpe ilusoria, además de ser un resabio colonial), un ejemplo, es lo ocurrido con la fexpo Tarija y la lucha por el control del campo ferial de San Jacinto entre empresarios y gobernación ambos miembros de la rosca, pues desde el 2015 existían razones aparentemente ideológicas que sustentaban la entrega, estas razones defendían el desarrollo a partir de afirmar al sector privado con la fexpo Tarija, la ley de alianzas público privadas o la implementación de un campo industrial, propuestas que a 8 años son inexistentes, que demuestra que cualquier boceto para el desarrollo de los grupos dominantes son espejismos en el desierto.

Igualmente, las promesas del progreso de la modernidad que deriva en las creencias sobre la producción infinita, el hedonismo radical o el individualismo, caen en saco roto ante la imposición del conservadurismo social y una economía endogámica estatal. Por este motivo es importante preguntarnos ¿Qué ocurrirá en el futuro para el departamento?

Hoy, Tarija tiene escenarios políticos importantes estos son: el fin de la “guerra fría tarijeña” ya expuesto, la rebeldía de asambleístas de Unidos contra el ultrista Mauricio Lea Plaza, (principal ideólogo de la alianza Unidos) que derivo en la pérdida del control de la asamblea departamental por la gobernación, la pelea cada vez más visible entre la estructura de Jhonny Torres y la de Oscar Montes, otra muestra de la fractura entre las cúpulas, el control del rectorado por parte de Eduardo Cortez que tiene una tendencia favorable al gobierno nacional y la inquebrantable unidad azul del Chaco.

Bajo este difícil contexto, decía K. Marx que la historia se repite dos veces, la primera como tragedia y la segunda como burla, asimismo, un escenario político similar se vivió en el departamento en el periodo 2008 – 2010, donde la distribución de fuerzas como se mencionó en el párrafo anterior era semejante, aquella vez el empate catastrófico, devino en una continuación de varias crisis que irresueltas resultaron en el colapso del modelo autonomista, acelerado por la reducción de los ingresos del gas.

La repetición del contexto, hoy se da con una sociedad mayoritariamente fatigada por la economía, donde vive en absoluta desesperanza y hartazgo político, hechos que hoy por hoy ninguno de los actores sabe comprender, además, el ciclo económico del gas llego a su fin para Tarija, por lo que el futuro está en superar con cambios revolucionarios y populares este ciclo económico, aunque es verdad que nos encontramos en un momento histórico, donde las nuevas ideas no terminan de nacer y lo viejo no termina de morir, deberemos empezar por romper mitos que nos condenan al subdesarrollo, como el  acérrimo regionalismo, que no es más que el justificativo de los errores de los que siempre gobernaron Tarija, estos serán los mayores desafíos para los próximos años para salir adelante.


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