Necesidades básicas del aprendizaje

Básico es lo fundamental, lo más importante a tener o hacer para que algo exista como la vida, por ejemplo, para la que es necesario la alimentación, el agua y el aire; elementos sin los cuales, cualquier ser vivo dejaría de vivir.

Para alimentarse se requiere el agua, para respirar que es el signo de vida, ya que quien aún respira vive (“respirar es vivir”), se requiere el aire puro y para conservar el agua y el aire puros se requiere el conocimiento y la mano del hombre dado que: “es el hombre el que hace al mundo y no el mundo el que hace al hombre” (Celso Charuri).

El saber y el conocimiento lo obtiene el hombre mediante la información, el razonamiento lógico o estudio, la experimentación, el descubrimiento, la invención; que en suma viene a ser la formación humana o educación.

Según Maslow son cinco las necesidades básicas del ser humano: 1.- Necesidades fisiológicas. 2.- Necesidad de Seguridad.3.- Necesidad de afiliación. 4.- Necesidad de reconocimiento. 5.- Necesidad de autorrealización.

Yo me atrevería a considerar que estas cinco necesidades resultan básicas para que el estudiante responda con éxito en su tarea educativa y deben ser los padres, maestros y la sociedad entera que deben conocerlas y aplicarlas a pie juntillas.

De manera especial me quiero referir dentro de las necesidades biológicas a la alimentación, misma que muy fácilmente versa que debe ser completa y variada, lo que no es igual a llenar el estómago con algo; sino, servirse diariamente: Carbohidratos, (energía: gasolina para que funcione el motor humano), proteínas (para la formación o reparación de los músculos, huesos u otros tejidos), frutas y hortalizas (como los alimentos que más agua proporcionan al cuerpo y ayudan al crecimiento) y la leche y sus derivados (como un alimento completo). 

Con una alimentación completa y variada tendríamos niños fuertes y sanos física, psicológica y mentalmente para que puedan responder ventajosamente en su proceso de aprendizaje/educación. Recordemos que el niño requiere alimentarse para reponer las energías que consume su cuerpo en las actividades que realiza habitualmente y, además, para su crecimiento y desarrollo.

Permítanme una anécdota: Todavía se enseñaba con el método silábico, cuando en el aula de clases la profesora generalizaba con las vocales la sílaba la (la, le, li, lo, lu), pregunta a un estudiante - ¿Cómo suena la “l” con la “o” ?, el alumno responde - ¡mote!, pues claro, este niño en ese momento sentía hambre, su estómago crujía y tenía su mente puesta en la falta que le hacía algo para comer.

Esta anécdota grafica plenamente que tan importante es tener en clases el estómago satisfecho, pues, como dice el dicho popular, “barriga llena y corazón contento no crea mal pensamiento”. Es que, para cumplir sus actividades normales, el niño deberá jugar, ayudar en la casa en las diferentes tareas que sean necesarias y además tendrá que estudiar; y para cumplir óptimamente con todas estas tareas, éste requiere estar bien alimentado. 

Es muy, muy importante que los niños se alimenten, se nutran con los diferentes grupos básicos de alimentos (alimentación completa) como ser: granos, verduras frutas, productos lácteos y proteínas diariamente pero también, diariamente varíen el o los platos a comer a gusto y elección (alimentación variada). Que se hagan ver las mamás con su experticia culinaria, pero siempre utilizando los diferentes grupos alimenticios. Es necesario evitar consumir muchas golosinas, mismas que pueden hacer daño a la salud en enfermedades como la caries dental, la obesidad u otros.

En Bolivia, en las escuelas mineras, ferroviarias e industriales se estableció el desayuno escolar desde el año 1951 con el Decreto Supremo No 2896. En las escuelas rurales desde los años 60, bajo el programa Alianza Para el Progreso, se proporcionó queso, leche para la distribución del desayuno escolar. En Tarija coadyuvamos a un grupo de damas llamadas” Las Juanas”, haciendo valer las necesidades básicas para el aprendizaje, con la que el alcalde Oscar Montes en su I Gestión dispuso dotar del desayuno escolar, hasta ahora existente.

Ahora es necesario que los directivos de los padres de familia junto a la administración de las instituciones educativas velen porque lo que se les dé a los estudiantes buenos alimentos y no cualquier cosa por desayuno; de manera que este cumpla la función de nutrición, que es la razón de ser del desayuno escolar para el logro de un mejor rendimiento educativo y que vele por la salud de los estudiantes, más aún con la situación de pobreza que se vive.

Una buena alimentación es fundamental para el desarrollo físico y mental de la persona (“mente sana en cuerpo sano”). Una mente y cuerpo sano mantendrá a la persona en mejor equilibrio emocional; la hará más predispuesta al estudio, con mejores resultados de aprendizaje y será más competente. Educación y alimentación van inseparablemente juntas de manera recíproca.


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