Los privilegios del Chapare

De las quince empresas estatales creadas en el gobierno de Evo Morales, siete están asentadas en esa región. La explicación que dio el gobierno a esta anomalía es que el Chapare necesita, además de contar con un aeropuerto que no tienen algunas capitales de departamento, muchos...

De las quince empresas estatales creadas en el gobierno de Evo Morales, siete están asentadas en esa región.

La explicación que dio el gobierno a esta anomalía es que el Chapare necesita, además de contar con un aeropuerto que no tienen algunas capitales de departamento, muchos incentivos.

Ojalá el propósito fuera lograr que los chapareños se vayan liberando de la dependencia que tienen de la coca y sus derivados.

Pero el gobierno ha decidido, además de todo eso, construir una carretera más para conectar el Chapare con la amazonía. Un proyecto de carretera que ha sido motivo de alusiones políticas en Brasil, donde el candidato José Serra ha dicho que se trata de una “rodovía de la droga”. Serra dijo que esa carretera que llevará más droga boliviana a Brasil, es financiada, paradójicamente, con un préstamo brasileño, aprobado por el gobierno de Lula da Silva.

Contra el proyecto están no solamente los brasileños de oposición, sino también los pueblos originarios del parque Isiboro Sécure.

Y ahora –paradoja de paradojas- se les han sumado el viceministro de Medio Ambiente, Juan Pablo Ramos, y el director de medio ambiente, Yuri Beltrán.

Ambos renunciaron a sus cargos con una denuncia: se les estaba presionando para que aprueben la licencia ambiental de la carretera en el tramo que pasa por el parque contra todo lo que dicen las normas.

Las organizaciones de protección del medio ambiente están en campaña contra la carretera, pero hasta ahora no se había dado el caso de funcionarios del gobierno que rechacen el proyecto.

La sospecha es que con la carretera se busca habilitar nuevas áreas, las del parque, para el cultivo de la coca.

Lo que ha hecho el gobierno hasta ahora es acusar a los pueblos originarios de ser sirvientes del imperialismo, o empleados de USAID, y ha descalificado y perseguido a los miembros del Foro Boliviano del Medio Ambiente y el Desarrollo (FOBOMADE).

Son temas que están saliendo de la racionalidad, pero que tienen la ventaja de gozar de un sistema de información gubernamental que comprende cada vez a más medios.

 


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