Lanzan campaña para “liberación” de exautoridades del MAS que se encuentran en embajada mexicana



Este miércoles 17 se lanzará en Buenos Aires una campaña internacional para lograr que siete exautoridades del MAS que están refugiados en la residencia de la embajada de México en Bolivia puedan obtener salvoconductos para salir del país, según reporta Brujula Digital. En estas actividades participarán activistas de izquierda como el politólogo Atilio Borón y Raúl Zaffaroni, abogado de Evo Morales. También harán uso de la palabra en la rueda de prensa Isabel Rauber, Patricia Moldiz, Gustavo Tissera y Lyllan Luque.
Actualmente la Embajada de México otorga asilo a los exministros de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; de Defensa, Javier Zavaleta; de Gobierno, Hugo Moldiz; de Justicia, Héctor Arce; de Culturas, Wilma Alanoca y al exgobernador de Oruro, Víctor Hugo Vásquez y al exdirector de AGETIC, Nicolás Laguna.
El gobierno boliviano rechazó entregarles salvoconductos que les permitan salir del país debido a que sobre los asilados pesan diversas acusaciones, desde la fabricación de cientos de bombas Molotov, a ser usadas durante las protestas antigubernamentales y que fueron halladas en el Ministerio de Cultura, hasta interferencia electoral, como el caso de AGETIC.
Quintana es acusado por los delitos de sedición, instigación a delinquir y terrorismo por los hechos de violencia generados por adherentes del MAS antes y después de la caída del régimen de Morales. El expresidente renunció el 10 de noviembre y luego viajó al exterior tras 21 días de protestas ante irregularidades electorales que la OEA consideró como parte de un fraude.
Después de esa fuga, dos decenas de exautoridades se asilaron en la residencia de México, pero luego, ante la ausencia de acusaciones, algunos salieron del recinto. Varios de ellos se fueron al exterior porque no había en su contra una ordenes de aprehensión. Finalmente quedaron nueve, pero en febrero pasado el exministro de Minería, César Navarro, y el exgobernador de Oruro, Pedro Dorado, se convirtieron en los dos únicos en obtener salvoconductos para abandonar el territorio boliviano. Los que quedan tienen órdenes de aprehensión.