ONU pide a Bolivia abrir fronteras a connacionales varados en el extranjero
En respuesta a un impasse de varias semanas ocurrido en la frontera entre Chile y Bolivia, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, instó el miércoles a los países de América Latina y de otros lugares del mundo a abrir las fronteras a sus...



En respuesta a un impasse de varias semanas ocurrido en la frontera entre Chile y Bolivia, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, instó el miércoles a los países de América Latina y de otros lugares del mundo a abrir las fronteras a sus propios ciudadanos que se encuentran varados en el extranjero, muchos de los cuales carecen de acceso a la atención sanitaria y otros servicios básicos.
Aunque Bolivia logró establecer un campamento en Pisiga, este no ha sido suficiente para albergar a los connacionales que tras la pandemia decidieron retornar desde Chile al país. Mientras 470 bolivianos esperan terminar el aislamiento de 14 días en el campamento Tata Santiago, otro grupo de bolivianos espera en Iquique poder ocupar su lugar a partir del lunes próximo.
“En virtud del derecho internacional, toda persona tiene derecho a regresar a su país de origen, incluso durante una pandemia. Cuando los migrantes desean regresar voluntariamente a sus hogares, los gobiernos tienen la obligación de recibirlos y de velar por que tengan acceso a la atención sanitaria y a otros derechos”, indicó Bachellet en una nota de prensa del sitio web de este organismo.
Lee el comunicado? https://t.co/n9c46a8NG9. pic.twitter.com/OgZnA1A64g
— OACNUDH Bolivia (@Oacnudh_BO) April 15, 2020
Si bien Bachelet, elogió la cooperación y las medidas adoptadas por Chile y Bolivia para solucionar el impasse de los ciudadanos varados en la frontera, dijo que “eso no tenía por qué haber ocurrido”.
Según la Alta Comisionada, unos 1.300 bolivianos incluyendo ancianos, niños y mujeres embarazadas quedaron varados, de los cuales cientos tuvieron que dormir a la intemperie, con poca agua y comida, y con temperaturas inferiores a cero grados centígrados.
Aunque Bolivia logró establecer un campamento en Pisiga, este no ha sido suficiente para albergar a los connacionales que tras la pandemia decidieron retornar desde Chile al país. Mientras 470 bolivianos esperan terminar el aislamiento de 14 días en el campamento Tata Santiago, otro grupo de bolivianos espera en Iquique poder ocupar su lugar a partir del lunes próximo.
“En virtud del derecho internacional, toda persona tiene derecho a regresar a su país de origen, incluso durante una pandemia. Cuando los migrantes desean regresar voluntariamente a sus hogares, los gobiernos tienen la obligación de recibirlos y de velar por que tengan acceso a la atención sanitaria y a otros derechos”, indicó Bachellet en una nota de prensa del sitio web de este organismo.
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos @mbachelet hace un llamado a los Estados de América Latina a permitir el retorno de sus nacionales y refiere la situación en la frontera entre #Bolivia y #Chile ante #COVIDー19.
Lee el comunicado? https://t.co/n9c46a8NG9. pic.twitter.com/OgZnA1A64g
— OACNUDH Bolivia (@Oacnudh_BO) April 15, 2020
Si bien Bachelet, elogió la cooperación y las medidas adoptadas por Chile y Bolivia para solucionar el impasse de los ciudadanos varados en la frontera, dijo que “eso no tenía por qué haber ocurrido”.
Según la Alta Comisionada, unos 1.300 bolivianos incluyendo ancianos, niños y mujeres embarazadas quedaron varados, de los cuales cientos tuvieron que dormir a la intemperie, con poca agua y comida, y con temperaturas inferiores a cero grados centígrados.