Rumbo al 3M: Bonos, créditos... y otros decretos "para creer”
El problema de generar mucha expectativa, es que a menudo, la realidad pincha el globo. Si a esto se suma que la presidenta Jeanine Áñez ya ha anunciado dos veces en una semana medidas que finalmente han sido corregidas en el decreto saliente del Consejo de Ministros, lo prudente era esperar...



El problema de generar mucha expectativa, es que a menudo, la realidad pincha el globo. Si a esto se suma que la presidenta Jeanine Áñez ya ha anunciado dos veces en una semana medidas que finalmente han sido corregidas en el decreto saliente del Consejo de Ministros, lo prudente era esperar antes de hacer valoraciones.
Con todo, las reacciones a las medidas económicas de apoyo “a los bolivianos” anunciadas en otro medido y dramático mensaje presidencial no se hicieron esperar. La general: “es política”, la siguiente: “no se entiende”. Claro que entre sus partidarios más acérrimos hubo “jallallas”, aunque también cierto descontento.
Primero porque el bono de 500 bolivianos para las familias con hijos estudiando en escuelas fiscales deja fuera a los que tienen niños más pequeños, a los que no estudian en colegios fiscales y a los que no tienen hijos. Entre ellos puede haber gente que “viva del día” o no; como también puede haber trabajadores informales en negocios establecidos cuyos servicios han sido cortados por la falta de demanda de estos días – profesoras de guardería, meseros, choferes a sueldo -, por lo que la medida generó la controversia esperada ya por los analistas del Gobierno.
En la Federación de Asociaciones Municipales (FAM) se generó otra intriga, por lo que instaron a esperar la letra muerta del decreto antes de entrar a valorar. En los mentideros de las redes sociales se especula con una suerte de adelanto del bono Juancito Pinto, ya en presupuesto, a lo que se sumaría el dinero del desayuno escolar de las Alcaldías – al que se refirió Ánez - para completar el bono. “Es una forma de hacer campaña, hay que esperar” señalaba una alta autoridad del organismo a quien le quería escuchar.
La segunda medida hace referencia al no pago del capital de las deudas por dos meses tanto de familias como de pequeñas empresas. Capital, no interés. “Cuidado que la deuda por mora del pago de interés sea mayor que el capital para aquellos que no se enteren bien de la medida” advierte un alto funcionario de un banco comercial, que también recomienda esperar el decreto antes de hacer valoraciones, y así aclarar si la medida también se aplica a las hipotecas domiciliarias.
La tercera hace referencia específicamente al pago del Impuesto de Utilidades, que se aplaza al mes de mayo en lugar de pagarlo en abril. Impuesto que hace referencia al complejo año 2019. De momento no hay nada respecto al IT y otros.
La cuarta es más sencilla de aplicar: Nadie puede cortar los servicios básicos de nadie (aunque no se citó internet), llegado el momento, habrá que pagar.
Reacciones
Mientras el Tribunal Supremo Electoral analiza la posibilidad de aplazar las elecciones del 3 de mayo, que tendría unas consecuencias sociales indefinidas, y los analistas de cada uno de los partidos tratan de consensuar si eso les resultaría bueno o malo para sus intereses, la presidenta Jeanine Áñez copa los medios de comunicación con las medidas ante la crisis sanitaria.
Los estrategas del MAS y de Comunidad Ciudadana señalan “lo fácil que es hacer política con la Gaceta Oficial del Estado”, una fórmula que agotó Evo Morales y que no parece haber cambiado demasiado.
Con todo, las medidas parecen insuficientes para una economía nacional con el 80 por ciento en la informalidad según el Fondo Monetario Internacional, y que se debería preparar para sentir los efectos de la caída del petróleo en el corto plazo – sigue por debajo de 30 dólares -.
El candidato Carlos Mesa optó por el silencio mientras sigue difundiendo videos con recomendaciones sobre el coronavirus, y Luis Fernando Camacho tampoco hizo referencias: sigue visitando mercados y otros. Ni siquiera Tuto Quiroga entró a valorar las medidas.
También guardó silencio Luis Arce Catacora, aunque se espera una valoración concreta, al tratarse del exministro de Economía y de su supuesto fuerte en la campaña. Lo normal sería que diera pautas y no se contentara con callar, aunque sus analistas todavía lo piensan.
Sí apoyó Samuel Doria Medina, el candidato a la Vicepresidencia que acompaña a Áñez en la fórmula y al que supuestamente se le ha depositado la confianza para conducir las finanzas del país. Había pedido medidas, su mensaje fue algo más frío: “La Presidenta tomó decisiones rápidas y bien pensadas, para sobrellevar los problemas económicos a raíz de la crisis sanitaria del #coronavirus en #Bolivia. Es hora de apoyar y poner de nuestra parte para superar esta difícil etapa”.
Veremos que dice el decreto.
Con todo, las reacciones a las medidas económicas de apoyo “a los bolivianos” anunciadas en otro medido y dramático mensaje presidencial no se hicieron esperar. La general: “es política”, la siguiente: “no se entiende”. Claro que entre sus partidarios más acérrimos hubo “jallallas”, aunque también cierto descontento.
Primero porque el bono de 500 bolivianos para las familias con hijos estudiando en escuelas fiscales deja fuera a los que tienen niños más pequeños, a los que no estudian en colegios fiscales y a los que no tienen hijos. Entre ellos puede haber gente que “viva del día” o no; como también puede haber trabajadores informales en negocios establecidos cuyos servicios han sido cortados por la falta de demanda de estos días – profesoras de guardería, meseros, choferes a sueldo -, por lo que la medida generó la controversia esperada ya por los analistas del Gobierno.
En la Federación de Asociaciones Municipales (FAM) se generó otra intriga, por lo que instaron a esperar la letra muerta del decreto antes de entrar a valorar. En los mentideros de las redes sociales se especula con una suerte de adelanto del bono Juancito Pinto, ya en presupuesto, a lo que se sumaría el dinero del desayuno escolar de las Alcaldías – al que se refirió Ánez - para completar el bono. “Es una forma de hacer campaña, hay que esperar” señalaba una alta autoridad del organismo a quien le quería escuchar.
La segunda medida hace referencia al no pago del capital de las deudas por dos meses tanto de familias como de pequeñas empresas. Capital, no interés. “Cuidado que la deuda por mora del pago de interés sea mayor que el capital para aquellos que no se enteren bien de la medida” advierte un alto funcionario de un banco comercial, que también recomienda esperar el decreto antes de hacer valoraciones, y así aclarar si la medida también se aplica a las hipotecas domiciliarias.
La tercera hace referencia específicamente al pago del Impuesto de Utilidades, que se aplaza al mes de mayo en lugar de pagarlo en abril. Impuesto que hace referencia al complejo año 2019. De momento no hay nada respecto al IT y otros.
La cuarta es más sencilla de aplicar: Nadie puede cortar los servicios básicos de nadie (aunque no se citó internet), llegado el momento, habrá que pagar.
Reacciones
Mientras el Tribunal Supremo Electoral analiza la posibilidad de aplazar las elecciones del 3 de mayo, que tendría unas consecuencias sociales indefinidas, y los analistas de cada uno de los partidos tratan de consensuar si eso les resultaría bueno o malo para sus intereses, la presidenta Jeanine Áñez copa los medios de comunicación con las medidas ante la crisis sanitaria.
Los estrategas del MAS y de Comunidad Ciudadana señalan “lo fácil que es hacer política con la Gaceta Oficial del Estado”, una fórmula que agotó Evo Morales y que no parece haber cambiado demasiado.
Con todo, las medidas parecen insuficientes para una economía nacional con el 80 por ciento en la informalidad según el Fondo Monetario Internacional, y que se debería preparar para sentir los efectos de la caída del petróleo en el corto plazo – sigue por debajo de 30 dólares -.
El candidato Carlos Mesa optó por el silencio mientras sigue difundiendo videos con recomendaciones sobre el coronavirus, y Luis Fernando Camacho tampoco hizo referencias: sigue visitando mercados y otros. Ni siquiera Tuto Quiroga entró a valorar las medidas.
También guardó silencio Luis Arce Catacora, aunque se espera una valoración concreta, al tratarse del exministro de Economía y de su supuesto fuerte en la campaña. Lo normal sería que diera pautas y no se contentara con callar, aunque sus analistas todavía lo piensan.
Sí apoyó Samuel Doria Medina, el candidato a la Vicepresidencia que acompaña a Áñez en la fórmula y al que supuestamente se le ha depositado la confianza para conducir las finanzas del país. Había pedido medidas, su mensaje fue algo más frío: “La Presidenta tomó decisiones rápidas y bien pensadas, para sobrellevar los problemas económicos a raíz de la crisis sanitaria del #coronavirus en #Bolivia. Es hora de apoyar y poner de nuestra parte para superar esta difícil etapa”.
Veremos que dice el decreto.