El Rey SOL y/o el acrónimo desafortunado

Hasta ahora, nada hace indicar que la figura del siglo XVII haya tenido una influencia para bien o para mal sobre el alcalde paceño, pero este Luis ha elegido, ni más ni menos, que SOL como su paradigma, y ya sabemos todos que los juegos de palabras y los sumatorios conceptuales juegan en política desde que la política es política. ADN, PODEMOS, MAS, UNIR por hablar sólo de las más recientes juegan a eso.

Luis ha dado el paso una semana después de que el líder de su hasta entonces partido, Juan del Granado, anunciara su jubilación y un par de días después de que el TSE certificara la defunción del aparato. Todo parecía preparado, más o menos al detalle, así que parece que la fotografía de Luis SOL bajo el paraguas masista a la salida de su reunión ministerial no ha tenido influencia aunque nadie se atrevería a jugarse una mano.

Luis ha prescindido de las figuras del Movimiento Sin Miedo y se ve con fuerzas de iluminarlo todo con su SOL naciente. El amanecer llega a su hora, todos los días, pero no es hasta que avanza la jornada cuando empiezan los juicios de valor. De momento, el primer paso parece coincidir con el menos poético y más épico Movimiento Sin Miedo, que decidió atrincherarse en la Hoyada para fenecer superado incluso por el partido Verde, que jugaba fuera de casa.

Luis, el SOL, quiere hacerse fuerte allí siendo consciente que muchos lo señalan para liderar el post – evismo. De momento, su sigla parece anunciar el lugar que pretende ocupar en cualquier aventura política en el futuro. El SOL, el centro, también parece anunciar una especie de migración ideológica hacia unas posturas menos “radicales” que las de Juan del Granado. Radicales más en lo eufemístico que en lo real después de escuchar los varios debates en los que prometió no subir impuestos y respetar las reglas del sistema, con EEUU incluido. Quizá las fuerzas opositoras actuales estén más cerca del SOL ahora de lo que lo estaban del MSM.

Ahora bien, el SOL evoca mucho, pero parte de un error que puede traer consecuencias en el futuro. Soberanía y Libertad es una perfecta declaración copulativa que quedaría perfecta como SYL. SOL es una disyuntiva que evoca los peores fantasmas. ¿Alguien puede elegir?

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