Montes y la importancia de perder primero

El manejo mediático de Óscar Montes roza la perfección, también el de Johnny Torres, y no se quedan atrás Víctor Hugo Zamora ni Rodrigo Paz. En esta elección han sumado a un controvertido Gustavo Rodríguez (con una particular historia con la OAS) y otros voceros experimentados. Montes y su coro han repetido, desde el día de la elección, que han ganado Cercado y desde que los datos se dieron la vuelta: que está manipulado. Hoy el alcalde Óscar Montes ya ha hablado abiertamente de “fraude”. Montes ha perdido la Circunscripción 40, la que reúne a los distritos más tradicionales de Tarija junto a las tierras de Méndez (donde por cierto no llegó a tener delegados en todas las mesas).

Tantas veces lo ha repetido, que la sensación general es que Montes ha ganado, o al menos ha salido segundo gracias a la “viveza criolla” del MAS, que decía aquel y sobre todo, gracias al calculado silencio de Unidad Demócrata, o lo que queda de esa alianza.

Cuando Montes salió ayer en la tarde al balcón para saludar a sus hordas, que se retiraban del pulso con el MAS por la circunscripción 40 a las puertas del Tribunal Electoral Departamental el cántico fue unánime. “!Gobernador, gobernador!”, y es que de eso se trataba. Una campaña anclada en las viejas prácticas, con muchas banderas, spots ramplones, muchos funcionarios y alejados de las redes sociales no ha sumado mucho, o casi nada. Al menos menos que lo que suma el coro mediático del PDC (más bien UNIR y MNR).

En esta campaña Montes ha decidido romper cualquier esperanza de reconciliación con el MAS. Apoyar a Tuto ya era una afrenta, los incidentes de los últimos días son el colofón. Ahora le toca sentarse a negociar su propio frente amplio, el que quiere liderar pese a haber perdido la 40 y haber salido tercero en el departamento. El análisis es preliminar, pero UNIR y MNR han sumado más votos que Tuto amén de aquello del voto cruzado, pero también “un jaila de Las Panosas le ha ganado a un paicheño en Méndez” que decía el otro de más allá.

De toda la pléyade de grupúsculos opositores que quedan en Tarija, el de Montes parece el más grande a este lado del Aguaragüe, al otro está claro que no hay más aparato que Wilman y el voto cruzado de Rengifo. Camino al Cambio llega con la lengua fuera tras cuatro años sin poder, el MNR tendrá que sentarse primero en mesa aparte, Unidad Nacional no existe y Demócratas tampoco. El FRI estará con quien gane… ¿Y Oliva? Vanguardia quiere ser un hueso por roer, de momento no pasa de bebé.

Las cuentas salen, dicen unos. Las cuentas se hacen el día después de las elecciones, dicen los otros.