Navidad de bombardeos
Sin tregua, redoblan los tambores de guerra en Gaza
La OMS afirma que todos los centros sanitarios han dejado de funcionar. La tensión en el norte de Israel con Hizbolah y en los Altos del Golán con Siria es continua y paralela a la guerra de Gaza
En las calles de Tel Aviv se respira tensión. Los jóvenes son mayoría. Muchos visten con uniforme militar. Muchos van armados con fusiles. Las fachadas se iluminan por la noche con los colores de la bandera de Israel. Y todos parecen esperar cuál es el siguiente paso que toca dar.
En las calles del norte de Gaza, en cambio, y según ha dicho este jueves la Organización Mundial de la Salud (OMS), el problema es ya que no hay ningún hospital funcionando debido a la falta de combustible, personal y suministros. “En realidad no quedan hospitales funcionales en el norte”, ha expresado desde Jerusalén Richard Peeperkorn, representante del organismo en la franja. “[El hospital] Al Ahli era el último, pero ahora apenas es mínimamente funcional”. La mitad de la población de Gaza ya moría de hambre según el Programa Mundial de Alimentos.
Las presiones para una tregua suben con ello un nuevo peldaño.
Y también la presión sobre el primer ministro israelí Beniamín Netanyahu con el fin de que un nuevo alto el fuego ayude en la liberación de rehenes. El líder de Hamas, Ismail Haniyeh, se ha desplazado a Egipto para discutirlo. El presidente de EE.UU., Joe Biden, presiona a favor de operaciones más quirúrgicas pero lanza que el pacto no es inminente. Mientras, se redoblan los tambores de guerra. En Gaza. En la frontera norte con Líbano. También al este con Siria. Incluso al sur por la amenaza de los hutíes de Yemen.
Porque la guerra continúa sin tregua. En Gaza los muertos superan ya los 20.000 –incluidos más de 8.000 niños–, según informa el gobierno del enclave. El bloqueo sigue siendo total. Israel aseguró este miércoles haber descubierto una vasta red subterránea utilizada por Hamas para mover armas, militantes y suministros por toda la franja. Este jueves el ejército israelí ha ordenado además evacuar una parte de Jan Yunis, la principal urbe del sur de Gaza y zona hasta ahora tildada como “segura” por el propio ejército, según la ONU.
Tras dos meses de ofensiva las espadas siguen en alto y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha vuelto a retrasar la votación de una resolución sobre la ayuda a Gaza con el fin de evitar el veto de Estados Unidos.
Y en paralelo crece la tensión en la región. El miércoles Israel atacó posiciones de Hizbolah en Líbano tras denunciar el lanzamiento de misiles tierra-aire desde la frontera. Continúa este jueves. También el miércoles la prensa israelí alertaba del ataque de su ejército a puestos sirios “en respuesta a proyectiles disparados desde los Altos del Golán”. El gobierno israelí comunica así mismo que no tolerará ataques ni amenazas de los hutíes de Yemen sobre Eilat, principal ciudad en su extremo sur y que asoma al mar Rojo.
Y es en Eilat donde viven, hoy desplazados, parte de los habitantes de las poblaciones limítrofes con la franja de Gaza que fueron atacadas por Hamas el pasado 7 de octubre.
Así es que en las calles de Tel Aviv el ajetreo de uniformados –al menos uno en todo grupo de amigos o familia– no para. El verde oliva es moda. Y pasear al perro con un fusil colgado del hombro se torna normal. Se aprovecha cada momento de tranquilidad a la espera de cambios.
Parte oficial de bajas
El Ministerio de Salud de Gaza informó este sábado que desde el comienzo de la agresión de las fuerzas de ocupación de Israel a la población civil de la Franja de Gaza el 7 de octubre pasado han sido asesinados 20.258 palestinos y otros 53.688 resultaron heridos.
De acuerdo en el ente, el en las últimas 24 horas se reportaron 201 muertos y 368 heridos en la Franja de Gaza.
En este sentido, autoridades palestinas denunciaron que en esta jornada después de un ataque de la aviación israelí en el campo de refugiados de al-Bureij, en el centro de Gaza murieron al menos 18 personas entre ellos una niña y varias resultaron heridas.