Copa América
Brasil reacciona de la mano de Vinicius y golea a Paraguay
La Verdeamarela se impuso con autoridad en Las Vegas gracias a los goles de Vinicius, Savinho y Lucas Paquetá, de penal. El equipo de Daniel Garnero quedó eliminado del certamen
Brasil venció a Paraguay (1-4) aupada por un gran Vinicius para dejar atrás las malas sensaciones del empate inicial contra Costa Rica. El extremo del Madrid se echó a su selección a la espalda y firmó un doblete en un final de primera parte loco (0-3) para encarrilar un triunfo que le deja virtualmente en cuartos de final de la Copa América. El conjunto guaraní selló su eliminación con su segunda derrota seguida.
El de Sao Gonçalo volvió a ser protagonista tanto por su fútbol incontenible como por sus provocaciones a los rivales. Savinho, novedad en el once por Raphinha, hizo el 0-2 y cuajó una buena actuación. Brasil se jugaba mucho y respondió a las críticas con una actuación efectiva que no despeja del todo las dudas que le rodean.
El seleccionador Dorival Junior apostó de inicio por Savinho en lugar de Raphinha para dar continuidad a los buenos minutos que ofreció el todavía jugador del Girona contra Costa Rica. La gran novedad en el once aportó fluidez, simetría y desborde al ataque de Brasil, con Vinicius más liberado y Rodrygo teniendo más peso en el juego entre líneas.
En el arranque del choque emergió una Brasil intensa en la presión y vertical en ataque, con sus puñales en las bandas como principales amenazas pero sin llegar a generar ocasiones claras de gol sobre la portería de Morínigo. Vinicius, extramotivado, cargaba la banda izquierda y empujaba a su afición a seguir apretando desde la grada.
La ocasión más clara, eso sí, la tuvo Paraguay. Bobadilla conectó un buen disparo desde la frontal que cogió vuelo al rozar en un defensa y obligó a Alisson a una intervención espectacular para evitar el 1-0. El susto tuvo un efecto negativo en Brasil, que extravió el hilo del partido ante una Paraguay que fue creciendo a partir de entonces, apoyada también en su agresividad en los duelos.
Pasada la media hora de choque, cuando más encallada estaba la canarinha, el colegiado señaló penalti por mano de Cubas. Lucas Paquetá asumió la responsabilidad pero envió el lanzamiento fuera, nuevo síntoma del bajo nivel de confianza que atraviesa el jugador del West Ham.
Sin embargo, el error desde los once metros espoleó a Brasil y también a Paquetá, que cinco minutos después filtró un gran pase para que Vinicius, tras sortear a Morínigo, marcara el 0-1 en el minuto 35’. Cansado de intentarlo pegado a la cal, el madridista se animó a pisar zonas interiores y demostró que ahí es cada vez más decisivo.
A partir del tanto de Vini el partido se volvió totalmente loco. Guimaraes estrelló un trallazo en el larguero y en la continuación de la jugada, un disparo de Rodrygo rechazado por Morínigo rebotó en un defensa y cayó en los pies de Savinho para el 0-2 en el 43’. El encuentro se encanalló en los compases finales del primer tiempo, con Vinicius en medio de todas las refriegas. Para lo bueno y para lo malo, sigue siendo el mismo. Al filo del descanso, una buena presión del madridista a Alderete propició el mal despeje del central paraguayo, que regaló el 0-3 en el gol tonto del día para el doblete de Vinicus (50’).
Parecía que los tres sopapos cerraban el telón del partido, pero en la reanudación Alderete corrigió su error anterior con un zurdazo desde fuera del área imposible para Alisson (49’) que metió a Paraguay de nuevo en la pelea. La empanada de Brasil duró varios minutos y enciso obligó a Alisson a otro paradón en el minuto 51’ a disparo de Enciso, el mejor de los guaraníes. El cuadro de Dorival se echó atrás y cedió la iniciativa a Paraguay en busca de las contras de Vinicius, Savinho y Rodrygo.
La batalla se libraba metro a metro con mucha dureza en los duelos permitida por el colegiado chileno Piero Maza, cuyo peculiar criterio en las faltas descolocó a partes iguales a brasileños y paraguayos. Jugaba con fuego la canarinha pero de nuevo una mano infantil de Villasanti a disparo de Savinho fue sancionada como penalti.
Paquetá reclamó el balón de nuevo para quitarse los fantasmas y esta vez no perdonó a Morínigo para hacer el 1-4 (65’). El tanto fue una liberación para el centrocampista y para su equipo, que empezó a vivir más cómodamente especulando con el resultado en un encuentro que ya dieron por finiquitado ambas selecciones. El carrusel de cambios en ambos combinados cortó de raíz el ritmo de partido y lo más destacable fue la roja a Cubas por soltar una patada sin balón a Douglas Luiz.
Brasil acabó sellando un triunfo cocinado en el primer tiempo por un gran Vinicius, de nuevo Dr Jekyll y Mister Hyde. Colombia y la canarinha se jugarán la primera plaza del Grupo D en la última jornada.