Siguen las protestas
Critican ampliación de estado de emergencia en Perú
La región de Puno está paralizada desde el 4 de enero y es la que ha sufrido la mayoría de las 47 muertes registradas desde el inicio de las protestas



Dos gobernadores y parlamentarios de oposición peruanos manifestaron este lunes su desacuerdo ante la decisión gubernamental de decretar estado de emergencia en siete regiones, ante las protestas populares opositoras iniciadas hace casi dos meses.
El decreto entró en vigencia hoy en las regiones sureñas de Cusco, Puno, Apurímac, Arequipa, Madre de Dios, Moquegua y Tacna, por un periodo de 60 días, y suspende los derechos de reunión y libre tránsito, entre otros, y permite registros y capturas a discreción.
La medida recibió críticas de los gobernadores de Puno, Richard Hancco, y Moquegua, Gilia Gutiérrez, así como de los parlamentarios de izquierda Roberto Sánchez y Jaime Quito.
Hancco criticó que se deje en manos de las Fuerzas Armadas con apoyo policial el control del orden en Puno, mientras en las demás regiones en las que se aplica la medida, la principal responsabilidad es policial, con apoyo militar.
“Esperamos que no haya consecuencias cuando empiecen a actuar los miembros del Ejército”, sentenció.
La región de Puno está paralizada desde el 4 de enero y es la que ha sufrido la mayoría de las 47 muertes registradas desde el inicio de las protestas.
Hancco hizo notar que en los últimos días no se han registrado alteraciones violentas del orden público que justifique la medida.
Advirtió que, con el estado de emergencia, el Gobierno se aleja de la posibilidad de un diálogo, en lugar de acercarse a la población.
Coincidió con la gobernadora de Moquegua, Gilia Gutiérrez, en que el Gobierno no le consultó ni informó de la medida decretada y ella recordó que la Asamblea Nacional de Gobernadores Regionales (ANGR) recientemente pidió al Gobierno que coordine sus decisiones con la autoridad regional concernida.