Un disparo accidental del exministro brasileño de Educación en el aeropuerto de Brasilia deja a una mujer herida leve (y varias interrogantes)
Milton Ribeiro dijo que intentó quitar la munición del arma desde dentro de su maletín para no exponerla públicamente, lo que dificultó la maniobra.



El ministro de Educación de Brasil y pastor evangélico Milton Ribeiro estaba la tarde del lunes en el aeropuerto de Brasilia dispuesto a coger un vuelo a Sao Paulo cuando disparó de manera accidental el arma que llevaba en su maletín e hirió levemente a una mujer.
Un hecho que ha generado grandes críticas y muchas preguntas. "¿Qué hace un pastor evangélico, exministro de Educación armado por ahí y hasta en aeropuertos? ¿Y si ese disparo accidental de Milton Ribeiro en un lugar público hubiese matado a alguien? ¡Qué locura!", se preguntaba la periodista Eliane Cantanhêde.
La historia no fue a más porque la funcionara de la compañía aérea GOL alcanzada por los fragmentos de bala ni siquiera llegó a ser traslada al hospital y se encuentra bien.
Durante su declaración en comisaría, Ribeiro –que dimitió en marzo tras verse envuelto en un escándalo de tráfico de influencias investigado actualmente por la Policía– relató que el disparo se produjo cuando se encontraba en el mostrador de la aerolínea Latam.
Explicó que como ya había realizado la declaración del arma por internet, se fue directo al mostrador y al abrir su maletín tomó su arma para separarla del cargador, siempre sin sacarla del maletín, y ahí fue cuando se disparó.
"Prevaleció el entendimiento"
El pastor dijo que intentó quitar la munición sin exponer el arma públicamente, pero había más objetos dentro del maletín y poco espacio, por lo que la maniobra de complicó. El disparo atravesó la funda del arma y del maletín y los fragmentos se esparcieron alcanzando así a la funcionaria.
La defensa del exministro informó en una nota, recogida por los medios, que la Policía ya le devolvió el arma. "Prevaleció el entendimiento de que todo no fue más que un accidente provocado por el excesivo cuidado de no sacar el arma del maletín en público (...) y del celo de no circular con el arma cargada", reza el texto.
Los abogados añadieron que "se trata de un incidente que ya pasó, no afectó a nadie y que ocurrió cuando [Ribeiro] dejaba su apartamento en Brasilia para mudarse a Sao Paulo" tras abandonar su cargo como ministro.
Sin embargo, el hecho de que Ribeiro llevase un arma encima ha abierto todo un debate sobre si podía o no transportarla.
Según G1, las reglas de la Agencia Nacional de Aviación Civil determinan que la maniobra de retirar el cargador de la pistola debe ocurrir en un lugar específico. Concretamente, la legislación apunta que "el pasajero es responsable de la descarga de las armas de fuego facturadas y debe ocurrir antes de la llegada al aeródromo o en el aeródromo, en un lugar proporcionado por el operador del aeródromo".
"El pueblo armado jamás será esclavizado"
Desde que llegó al poder, el presidente Jair Bolsonaro ha firmado más de 30 resoluciones destinadas a facilitar la adquisición o porte de armas, aunque muchas han sido bloqueadas después por la Justicia.
Bolsonaro, excapitán del Ejército, defiende a ultranza el acceso a las armas para que la población se proteja de la criminalidad. El lunes, durante un evento, volvió a repetir uno de sus lemas: "El pueblo armado jamás será esclavizado".
"Tenemos aproximadamente 600.000 Craf [certificado de registro de armas de fuego] en Brasil (...) quiero este año por lo menos 100.000 Craf en el país", comentó.
Y continuó: "El hombre o la mujer del campo pasaron a tener posesión de un arma de fuego no solo dentro de su propiedad, sino en todo el perímetro de la misma. Esto obviamente desestimula las invasiones (...) Si el fusil está en manos del vagabundo, ¿por qué prohibírnoslo a nosotros, ciudadanos de bien?".
Según el Anuario Brasileño de Seguridad Pública, el número de armas en manos de civiles se duplicó en solo tres años, pasando de 637.972 en 2017 a 1.279.491 en 2020.