Medidas preventivas contra el Covid-19
Chile acorta el toque de queda en una hora
La medida fue justificada desde el principio por las autoridades para reducir la movilidad y ayudar a contener la pandemia de Covid-19, pero su permanencia ha sido cuestionada por expertos



El gobierno de Chile anunció ayer la reducción en una hora el toque de queda impuesto a nivel nacional hace casi un año, tras recientes cuestionamientos sobre la permanencia de esa medida.
La subsecretaria de Prevención del Delito del Ministerio del Interior, Katherine Martorell, informó que a partir del próximo jueves el toque de queda se retrasará 60 minutos y comenzará a partir de las 23:00, hora local, y finalizará a las 05:00 del día siguiente.
Esa medida fue justificada desde el principio por las autoridades para reducir la movilidad y ayudar a contener la pandemia de Covid-19, pero su permanencia ha sido cuestionada por expertos, quienes alegan inconvenientes de prolongarla excesivamente.
Al respecto el académico Alberto Larraín señaló que el toque de queda genera un estrés adicional por restringir la libertad de las personas, y consideró que, con las medidas de reducción del confinamiento aplicadas, queda ya fuera de contexto.
Abundó que fue positiva al instaurar en la población la percepción de riesgo sobre la pandemia, pero ese efecto ya pasó.
Otros vinculan esa medida con el carácter represivo de su aplicación en otros momentos en Chile y en ese sentido el máster en Salud Pública Gonzalo Bagigalupe expresó recientemente, que pareciera más una manera de controlar el flujo y las libertades de las personas.
Según el experto, la población percibe que el toque de queda busca controlar la actividad social o política, y eso genera mucha desconfianza.
Analistas prevén que el tema generará controversias, pues para prolongar el toque de queda más allá de marzo, el presidente de la nación, Sebastián Piñera, deberá pedir autorización al Congreso, y en la oposición hay opiniones contrarias a extenderlo por más tiempo.