España dispuesta a resolver conflicto con Cataluña
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, abogó ayer por superar años de desavenencias y avanzar hacia una solución del grave conflicto político con Cataluña, región que en 2017 protagonizó una fallida tentativa de secesión. Hoy (ayer) es un día muy importante para...



El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, abogó ayer por superar años de desavenencias y avanzar hacia una solución del grave conflicto político con Cataluña, región que en 2017 protagonizó una fallida tentativa de secesión.
Hoy (ayer) es un día muy importante para Cataluña y el conjunto de España, 'porque hoy comienza el diálogo para el reencuentro', subrayó Sánchez luego de reunirse en la ciudad de Barcelona con su par de la Generalitat (autogobierno catalán), Quim Torra.
Ambos acordaron poner en marcha este mes la mesa de negociación entre sus respectivos ejecutivos, un instrumento que, aclaró el mandatario español, no contemplará la figura de mediador reclamada por el líder independentista catalán.
'El mediador serán los 47 millones de españoles', quienes serán testigos de esas pláticas 'sinceras, francas y transparentes', enfatizó el político socialdemócrata tras el mediático encuentro mantenido con Torra.
En su comparecencia ante la prensa en la capital de la próspera comunidad autónoma (región) nororiental, Sánchez se congratuló del tono y la predisposición de su interlocutor para abrir un diálogo 'honesto, abierto y respetuoso'.
Aseguró que el nuevo Gobierno de coalición entre el PSOE y la alianza izquierdista Unidas Podemos se empeñará en el objetivo de mantener las vías de negociación abiertas.
Definió esta nueva etapa como la que debe poner fin a una lamentable década de desencuentros, en la cual nadie ha ganado y todos hemos perdido, enfatizó sobre el enquistado diferendo, considerado una de las peores crisis en 40 años de democracia.
Frente a las aspiraciones separatistas de una parte importante de la sociedad catalana, el gobernante afirmó ser un firme defensor del autogobierno integrador, porque, en su opinión, 'aglutina a más catalanes y representa mejor la pluralidad'.
En otro tramo de su intervención, el también secretario general del PSOE reconoció que este reencuentro será largo y complejo y apeló a la paciencia y generosidad de todas las partes, incluida la oposición de derecha, negada a conversar con los secesionistas.
Advirtió que los sectores contrarios al entendimiento con la Generalitat seguirán resistiéndose y defenderán 'la imposición' como única forma de resolver el conflicto territorial.
Durante una comparecencia posterior, Torra insistió en que la futura mesa de diálogo debe ocuparse de dos cuestiones que están en 'la raíz del conflicto político'.
Según su criterio, se trata del ejercicio del derecho a la autodeterminación, mediante la celebración de un referendo, y el 'fin de la represión' que, a su juicio, ejerce el Estado español contra el independentismo.
Además, exigió la amnistía para los políticos catalanes encarcelados y exiliados, en referencia a los condenados a prisión por su papel en el proceso secesionista de 2017.
Hoy (ayer) es un día muy importante para Cataluña y el conjunto de España, 'porque hoy comienza el diálogo para el reencuentro', subrayó Sánchez luego de reunirse en la ciudad de Barcelona con su par de la Generalitat (autogobierno catalán), Quim Torra.
Ambos acordaron poner en marcha este mes la mesa de negociación entre sus respectivos ejecutivos, un instrumento que, aclaró el mandatario español, no contemplará la figura de mediador reclamada por el líder independentista catalán.
'El mediador serán los 47 millones de españoles', quienes serán testigos de esas pláticas 'sinceras, francas y transparentes', enfatizó el político socialdemócrata tras el mediático encuentro mantenido con Torra.
En su comparecencia ante la prensa en la capital de la próspera comunidad autónoma (región) nororiental, Sánchez se congratuló del tono y la predisposición de su interlocutor para abrir un diálogo 'honesto, abierto y respetuoso'.
Aseguró que el nuevo Gobierno de coalición entre el PSOE y la alianza izquierdista Unidas Podemos se empeñará en el objetivo de mantener las vías de negociación abiertas.
Definió esta nueva etapa como la que debe poner fin a una lamentable década de desencuentros, en la cual nadie ha ganado y todos hemos perdido, enfatizó sobre el enquistado diferendo, considerado una de las peores crisis en 40 años de democracia.
Frente a las aspiraciones separatistas de una parte importante de la sociedad catalana, el gobernante afirmó ser un firme defensor del autogobierno integrador, porque, en su opinión, 'aglutina a más catalanes y representa mejor la pluralidad'.
En otro tramo de su intervención, el también secretario general del PSOE reconoció que este reencuentro será largo y complejo y apeló a la paciencia y generosidad de todas las partes, incluida la oposición de derecha, negada a conversar con los secesionistas.
Advirtió que los sectores contrarios al entendimiento con la Generalitat seguirán resistiéndose y defenderán 'la imposición' como única forma de resolver el conflicto territorial.
Durante una comparecencia posterior, Torra insistió en que la futura mesa de diálogo debe ocuparse de dos cuestiones que están en 'la raíz del conflicto político'.
Según su criterio, se trata del ejercicio del derecho a la autodeterminación, mediante la celebración de un referendo, y el 'fin de la represión' que, a su juicio, ejerce el Estado español contra el independentismo.
Además, exigió la amnistía para los políticos catalanes encarcelados y exiliados, en referencia a los condenados a prisión por su papel en el proceso secesionista de 2017.