Izquierda española confía en pacto de Gobierno con PSOE
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, confió este martes en poder alcanzar un acuerdo con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) que garantice un futuro Gobierno progresista en este país europeo. Iglesias se pronunció en esos términos tras reunirse este martes durante más de dos...



El líder de Podemos, Pablo Iglesias, confió este martes en poder alcanzar un acuerdo con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) que garantice un futuro Gobierno progresista en este país europeo.
Iglesias se pronunció en esos términos tras reunirse este martes durante más de dos horas con el líder del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuya formación resultó la más votada en las elecciones generales del pasado 28 de abril.
Con 123 representantes en el Congreso de los Diputados, la centenaria agrupación socialdemócrata quedó, sin embargo, lejos de la mayoría absoluta para gobernar en solitario, fijada en 176 de los 350 escaños de la estratégica Cámara baja.
En una comparecencia en el gubernamental Palacio de la Moncloa, el secretario general del partido izquierdista Podemos subrayó su voluntad y la de Sánchez de llegar a un pacto que facilite la investidura de este último.
Iglesias admitió salir satisfecho de esta primera toma de contacto y resaltó la coincidencia tanto de él como de su interlocutor en que es una demanda social que haya un entendimiento entre las fuerzas progresistas para afrontar el futuro de España.
No obstante, reconoció que las posiciones de partida son distintas, pues mientras él aboga por un Gobierno de coalición con el PSOE, Sánchez parece decantarse por un gabinete monocolor, con algunas figuras independientes y acuerdos programáticos con Podemos.
'Las posiciones son conocidas', remarcó el líder de la formación antiausteridad, quien en ningún momento mencionó de manera explícita su demanda de incorporarse a un hipotético equipo encabezado por Sánchez.
En su lugar pidió paciencia, pues auguró que la conformación del próximo Gobierno español será un trabajo largo y requerirá de 'discreción, prudencia y buena voluntad por ambas partes', enfatizó tras declararse optimista.
Destacó que en estos meses de colaboración fue capaz de construir una relación de confianza con el mandatario, que ahora -aseguró- les permite tratarse con franqueza y empatía.
Ahora corresponde hablar en 'una nueva época', en la que el diálogo sustituya a la sobreactuación, manifestó.
Iglesias se pronunció en esos términos tras reunirse este martes durante más de dos horas con el líder del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuya formación resultó la más votada en las elecciones generales del pasado 28 de abril.
Con 123 representantes en el Congreso de los Diputados, la centenaria agrupación socialdemócrata quedó, sin embargo, lejos de la mayoría absoluta para gobernar en solitario, fijada en 176 de los 350 escaños de la estratégica Cámara baja.
En una comparecencia en el gubernamental Palacio de la Moncloa, el secretario general del partido izquierdista Podemos subrayó su voluntad y la de Sánchez de llegar a un pacto que facilite la investidura de este último.
Iglesias admitió salir satisfecho de esta primera toma de contacto y resaltó la coincidencia tanto de él como de su interlocutor en que es una demanda social que haya un entendimiento entre las fuerzas progresistas para afrontar el futuro de España.
No obstante, reconoció que las posiciones de partida son distintas, pues mientras él aboga por un Gobierno de coalición con el PSOE, Sánchez parece decantarse por un gabinete monocolor, con algunas figuras independientes y acuerdos programáticos con Podemos.
'Las posiciones son conocidas', remarcó el líder de la formación antiausteridad, quien en ningún momento mencionó de manera explícita su demanda de incorporarse a un hipotético equipo encabezado por Sánchez.
En su lugar pidió paciencia, pues auguró que la conformación del próximo Gobierno español será un trabajo largo y requerirá de 'discreción, prudencia y buena voluntad por ambas partes', enfatizó tras declararse optimista.
Destacó que en estos meses de colaboración fue capaz de construir una relación de confianza con el mandatario, que ahora -aseguró- les permite tratarse con franqueza y empatía.
Ahora corresponde hablar en 'una nueva época', en la que el diálogo sustituya a la sobreactuación, manifestó.