Independentismo catalán lanza nuevo movimiento político
Coincidiendo con el primer aniversario de su fallido intento de convertir a la región española de Cataluña en un estado soberano, el separatista Carles Puigdemont lanzó un nuevo movimiento político que procurará materializar esa aspiración. Un año después de proclamar unilateralmente...



Coincidiendo con el primer aniversario de su fallido intento de convertir a la región española de Cataluña en un estado soberano, el separatista Carles Puigdemont lanzó un nuevo movimiento político que procurará materializar esa aspiración.
Un año después de proclamar unilateralmente la independencia de la rica comunidad autónoma nororiental, aprobada el 27 de octubre de 2017 por el parlamento regional, Puigdemont anunció este sábado la creación de la Crida Nacional per la República.
Exilio
El ex presidente catalán -destituido hace un año por el entonces gobierno español de Mariano Rajoy- lleva meses desde su exilio en Bélgica articulando la Crida (Llamamiento) como una estructura transversal de partidarios de la secesión.
Con la nueva organización, Puigdemont pretende reunificar el independentismo, dividido entre quienes siguen apostando por la vía unilateral para alcanzar la ruptura con España y los que buscan arrebatar a Madrid el derecho de autodeterminación.
‘No hablamos de un sueño, hablamos de una realidad, hablamos de la República catalana’, reza un anuncio de la Crida Nacional, que celebró ayer en Manresa, su convención fundacional.
Además de Puigdemont, quien participó a través de videoconferencia, asistió a la presentación el actual presidente de Cataluña, Quim Torra.
También se tuvo la intervención del diputado Jordi Sánchez, quien lo hizo mediante un mensaje al estar encarcelado desde hace un año junto a otros ocho líderes secesionistas por su papel en el proceso soberanista.
Anunciado a mediados de julio con la aspiración de convertirse en una plataforma que aglutinara a todas las fuerzas partidarias de un Estado catalán, el proyecto del defenestrado gobernante levantó suspicacias.
Incluso dentro de su propia agrupación, el Partido Demócrata Europeo Catalán, cuyo actual líder, David Bonvehí, se cuestionó el nacimiento de la Crida como un partido normal cuando ese espacio -reivindicó- ya lo ocupa esa formación conservadora.
La segunda fuerza separatista más votada en las elecciones regionales del pasado diciembre, Esquerra Republicana, adelantó que no se integrará en el nuevo movimiento, una decisión imitada por la izquierdista Candidatura de Unidad Popular.
No obstante, sus promotores anunciaron que el hecho de que se constituyan en partido no debe impedir que en él participen personas vinculadas a otras corrientes del secesionismo.
Su intención no es funcionar como un partido clásico, sino como un instrumento político para sumar fuerzas por la ‘República’, con el compromiso de disolverse una vez se consiga este objetivo, aclararon.
Un año después de la declaración unilateral de independencia, que quedó en un gesto meramente simbólico, el independentismo continúa explorando una estrategia común para hacer realidad la República catalana.
Un año después de proclamar unilateralmente la independencia de la rica comunidad autónoma nororiental, aprobada el 27 de octubre de 2017 por el parlamento regional, Puigdemont anunció este sábado la creación de la Crida Nacional per la República.
Exilio
El ex presidente catalán -destituido hace un año por el entonces gobierno español de Mariano Rajoy- lleva meses desde su exilio en Bélgica articulando la Crida (Llamamiento) como una estructura transversal de partidarios de la secesión.
Con la nueva organización, Puigdemont pretende reunificar el independentismo, dividido entre quienes siguen apostando por la vía unilateral para alcanzar la ruptura con España y los que buscan arrebatar a Madrid el derecho de autodeterminación.
‘No hablamos de un sueño, hablamos de una realidad, hablamos de la República catalana’, reza un anuncio de la Crida Nacional, que celebró ayer en Manresa, su convención fundacional.
Además de Puigdemont, quien participó a través de videoconferencia, asistió a la presentación el actual presidente de Cataluña, Quim Torra.
También se tuvo la intervención del diputado Jordi Sánchez, quien lo hizo mediante un mensaje al estar encarcelado desde hace un año junto a otros ocho líderes secesionistas por su papel en el proceso soberanista.
Anunciado a mediados de julio con la aspiración de convertirse en una plataforma que aglutinara a todas las fuerzas partidarias de un Estado catalán, el proyecto del defenestrado gobernante levantó suspicacias.
Incluso dentro de su propia agrupación, el Partido Demócrata Europeo Catalán, cuyo actual líder, David Bonvehí, se cuestionó el nacimiento de la Crida como un partido normal cuando ese espacio -reivindicó- ya lo ocupa esa formación conservadora.
La segunda fuerza separatista más votada en las elecciones regionales del pasado diciembre, Esquerra Republicana, adelantó que no se integrará en el nuevo movimiento, una decisión imitada por la izquierdista Candidatura de Unidad Popular.
No obstante, sus promotores anunciaron que el hecho de que se constituyan en partido no debe impedir que en él participen personas vinculadas a otras corrientes del secesionismo.
Su intención no es funcionar como un partido clásico, sino como un instrumento político para sumar fuerzas por la ‘República’, con el compromiso de disolverse una vez se consiga este objetivo, aclararon.
Un año después de la declaración unilateral de independencia, que quedó en un gesto meramente simbólico, el independentismo continúa explorando una estrategia común para hacer realidad la República catalana.