Medidas clave para fomentar la empresa

Las pequeñas y medianas empresas son claves en la economía nacional, pero enfrentar numerosos problemas sin soporte público

El pasado jueves se celebró a nivel mundial el Día del emprendedor y en Bolivia, las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) representan un pilar fundamental de la economía, generando empleo y dinamismo en diversas regiones del país. Sin embargo, a pesar de su importancia, enfrenta múltiples desafíos que limitan su crecimiento y sostenibilidad.

En este contexto, es crucial implementar medidas efectivas que fortalezcan a las PyMEs y promuevan un entorno favorable para su desarrollo como por ejemplo el acceso a financiamiento, ya que una de las principales barreras para las PyMEs es el acceso limitado al financiamiento. Los bancos tradicionales suelen estar dispuestos a otorgar préstamos a pequeñas empresas debido a la percepción de alto riesgo. Para abordar este problema, el gobierno podría establecer fondos de garantía que reduzcan el riesgo para los prestamistas. Además, la promoción de cooperativas de crédito y microfinancieras podría ofrecer alternativas accesibles y adaptadas a las necesidades de las PyMEs.

También es importante apoyar la formación y el desarrollo de habilidades empresariales son esenciales para el éxito de las PyMEs. Implementar programas de capacitación que aborden áreas como gestión financiera, marketing digital y estrategias de negocios puede ayudar a los emprendedores a manejar sus empresas de manera más efectiva. El Establecimiento de centros de asesoramiento empresarial en diferentes regiones del país ofrecería apoyo continuo y personalizado.

En la medida de lo posible, es urgente simplificar trámites administrativos. La burocracia y la complejidad de los trámites administrativos son obstáculos significativos para las PyMEs. Simplificaría los procesos de registro y operación de las empresas, así como reduciría los costos asociados, incentivaría la formalización de negocios y facilitaría su crecimiento. La digitalización de trámites también puede contribuir a agilizar estos procesos y reducir la carga administrativa.

Una propuesta sugerida siempre desde el gremio es la de otorgar Incentivos Fiscales, es decir, implementar incentivos, como exenciones tributarias o reducciones de impuestos para las PyMEs en sus primeros años de operación, podría aliviar la carga financiera y permitirles reinvertir en sus negocios. Estos incentivos deberían estar condicionados a la creación de empleo y al cumplimiento de buenas prácticas empresariales, asegurando así un impacto positivo en la economía local.

En el sector también se valora el apoyo público para colaborar en la promoción del Comercio y Exportaciones, pues es vital para su crecimiento y además, proporcionar apoyo técnico y logístico para la exportación de productos ayudaría a las pequeñas empresas a expandir su alcance global. Además también se buscan fórmulas para mejorar el acceso a la tecnología y la innovación, pues es crucial para la competitividad de las PyMEs. Facilitar el acceso a herramientas tecnológicas, así como fomentar la adopción de nuevas tecnologías a través de subsidios y programas de innovación, permitiría a las empresas mejorar su productividad y eficiencia. La creación de incubadoras y aceleradoras de empresas tecnológicas también podría ser una vía para impulsar el desarrollo de startups innovadoras.

El fortalecimiento de las PyMEs en Bolivia requiere una estrategia integral que aborde sus múltiples desafíos y potencie sus capacidades. A través de medidas como el acceso a financiamiento, capacitación, simplificación administrativa, incentivos fiscales, promoción comercial e innovación, se puede crear un entorno propicio para el crecimiento y la sostenibilidad de estas empresas. Así, no sólo se fortalecerá la economía nacional, sino que también se generarán oportunidades de desarrollo para miles de bolivianos. 


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