Los retos digitales
En los últimos meses se ha visto la multiplicación de casos de estafa digitales y la más sonada de ellas es iShop, que en menos de tres meses estafó a más de 2.000 personas en el país.
La crisis económica en el país está golpeando fuerte a todos los sectores, cientos de personas han cambiado sus rubros y han buscado la manera de subsistir. Lamentablemente esa adaptación pasa en todo, incluso en el mundo del hampa.
En los últimos meses se ha visto la multiplicación de casos de estafa digitales y la más sonada de ellas es iShop, que en menos de tres meses estafó a más de 2.000 personas en el país.
¿Qué sucedió y qué políticas existen para enfrentar este tipo de crímenes? Según los expertos hay formas de rastrear estos delitos y combatirlos, pero Bolivia una vez más no tiene las condiciones.
Y lo más preocupante es que ésta no es la única estafa que circula en Bolivia, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) detectó al menos cuatro formas de estafas virtuales en varias regiones del país, mediante las cuales se pide a las víctimas una inversión de dinero con la promesa de ganancias elevadas por los intereses. No dieron detalles para no entorpecer las investigaciones.
De acuerdo al director de la Fundación Internet Bolivia.org, Cristian León, en el caso de las aplicaciones “se requiere menos esfuerzo por parte de los delincuentes, porque se puede crear fácilmente una pantalla que brinde confianza a la población y la gente puede pensar que son empresas serias, e incluso requiere menos mecanismos legales”.
Apuntó que este tipo de crímenes dejan huella en la red, el dinero sustraído se puede recuperar y las acciones pueden ser rastreadas con “un análisis forense digital, o de inteligencia de fuentes abiertas, esto podría permitir que las fuerzas del orden den con el rastro delos delincuentes”.
No obstante, Bolivia tiene capacidades limitadas en cuanto a investigación y requerimientos al exterior.
“A Bolivia le va a ser difícil solicitar un requerimiento, por ejemplo, a Google para ver quién registró esta aplicación. Además de la alta pericia técnica que se requiere para hacer la investigación”, apuntó León.
Todo esto nos deja lecciones claras, primero a no ser crédulos, a ser críticos y precavidos, y segundo a trabajar como país en el desarrollo tecnológico acorde a los nuevos tiempos digitales. Marco que brindará también a la policía mejores condiciones para investigar este tipo de delitos.
La pandemia por Covid-19 no solo nos ha traído luto si no también ha cambiado muchos esquemas y ha acelerado muchos procesos relacionados a lo digital, es urgente agarrar todas las correas y retos que nos dejan estos tiempos y trabajar en ellos.
