¿Se debe segregar a la población que no está vacunada de la que sí lo está?
Pasaporte Covid: debate candente en tiempos de vacunación
Europa se prepara para emitir los pasaportes Covid, una medida que añade una nueva dimensión a la crisis sanitara provocada por el coronavirus. Bolivia enfrentará este debate en unos meses



Muchos hablan de una nueva forma de segregación social: los que han sido vacunados contra la Covid-19, por un lado, y los que no, por el otro. Es una discusión que tiene muchas aristas sociales, económicas y éticas, pero que debe ser asumida porque comienza a ser una realidad en varios países en los que la vacunación ha avanzado de manera considerable.
Los defensores de un certificado que avale que su poseedor ha sido inoculado con alguna de las vacunas –lo que le permitiría acceder a varios servicios–, fundamentan su postura en un argumento económico: no se puede esperar a que la pandemia concluya para reiniciar las actividades económicas, es necesario volver a una normalidad gradual con las personas vacunadas.
En el caso de Europa, sin embargo, se ha desatado una gran discusión debido a que un pasaporte de este tipo violentaría algunos derechos de los ciudadanos, como la libre circulación. Además, se abre la discusión ética sobre quienes se verán privados de libertades que otros tendrán a su disposición, más aún si es que hay personas que no desean vacunarse de manera voluntaria.
El Pase Verde Digital
La discusión sobre el Pasaporte Covid ha tomado fuerza en las últimas semanas, dado que la Comisión Europea está avanzando en este sentido. Según la presidenta de esta institución, Ursula von der Leyen, este pasaporte, denominado como Pase Verde Digital, detallará si la persona ha recibido la vacuna y si la misma ya ha pasado por la enfermedad del coronavirus, así como los resultados de cualquier prueba que se realice.
Este documento servirá para viajar entre los países de Europa y quienes no lo tengan se encontrarán con una serie de restricciones. Sin embargo, la Comisión Europea espera que a partir de este sistema se pueda controlar el avance del virus y reactivar la economía.
Este pasaporte no es excluyente a las decisiones que cada uno de los países europeos pueda tomar a nivel interno, en los que ya comienzan a solicitarse certificados de vacunación para acceder a muchos servicios y actividades. Como ejemplo, algunas aerolíneas ya han comenzado a solicitar un certificado de vacunación a sus pasajeros.
La oposición de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha manifestado su rechazo a este tipo de medidas. “Las vacunas no pueden ser un requisito para viajar, puesto que no se conocen sus efectos en la reducción de contagios ni la duración de la inmunidad”, además que se considera una medida prematura, ya que podría incentivar desplazamientos –entre quienes sí fueron vacunados–, acrecentando el riesgo de un nuevo rebrote.
Un problema que deberá enfrentar Bolivia
Aunque Bolivia todavía no ha vacunado ni siquiera al 2% de su población, lo más probable es que en los siguientes meses la discusión sobre un certificado de vacunación para tener mayores libertades y acceso a servicios, estará presente, como ya lo está en varios países. Un tema como este, sin embargo, requiere contar con información pública, procedimientos precisos y consensuados, además de instituciones confiables.