Nations League
Sufrida victoria de España para seguir en la lucha
Los de Luis Enrique suman su primer triunfo en la Nations League ante Suiza gracias a un tempranero gol de Sarabia
Tres puntos de oro para la selección española, que ganó su primer partido de esta Nations League por la mínima (0-1) ante Suiza. Los de Luis Enrique volvieron a dominar al rival, especialmente en el primer tiempo, pero no supieron sentenciar tras el tanto inicial de Sarabia y acabaron sufriendo. Victoria trabajada para seguir dependiendo de sí mismos.
Los últimos partidos contra los helvéticos habían sido encuentros con pocos goles. A España, que ya de por sí le cuesta ver portería, se le acostumbraba a atragantar el cuadro suizo. De hecho, el balance de goles en los últimos cuatro precedentes era de 4-3 con solo un triunfo español por la mínima.
En Ginebra, en el tercer partido de esta Nations League y con la obligación de ganar para seguir dependiendo de sí misma, la Roja vivió un 'deja vu'. El guión de partido fue parecido al de los precedentes. Un rival rocoso, más aún con una alineación plantando cinco defensas, que dejó muy pocos espacios. Suiza, que llegaba de perder los dos primeros encuentros, no generó demasiado, pero tampoco dejó que España intimidara demasiado a Sommer, que ayer recuperó la portería suiza.
España dominó siempre, de principio a fin, y mordió arriba, tal y como pide su seleccionador. Los delanteros, Sarabia, Morata y Ferran, fueron el primer defensor y en una buena presión del delantero del Barça llegó el primer tanto de la selección española. Recuperación de Marcos Llorente, que levantó la cabeza y se la puso para Sarabia que entró con todo para empujar el balón al fondo de las mallas.
España siguió dominando pero el entramado defensivo helvética se convirtió en un nudo. Un bosque de piernas que siempre acababan de escupir el balón. Sarabia tuvo la segunda opción a la media hora, pero su remate, cuando tenía la opción de la pared con Jordi Alba, se fue desviado.
Suiza, por su parte, buscó hacer daño a balón parado. Los de Murat Yakin tiraron de estrategia y tuvieron un par de opciones. La primera fue un remate de Embolo tras un buen centro de Shaquiri. El delantero del Borussia Monchengladbach ganó la posición en el segundo palo, pero cabeceó al lateral de la red. Y antes del descanso, otro cabezazo, esta vez de Comert. El central quiso cruzar demasiado el balón, que se marchó fuera, sin más consecuencias.
En la reanudación, Suiza salió más valiente, desacomplejada y España se notó más incomoda, incluso los locales lograron encerrar a los de Luis Enrique en su propio durante el inicio de la segunda parte. Shaqiri probó a Unai con un disparo desde la frontal, un zurdazo centrado que blocó el meta bien colocado. También se atrevió Zuber, llegando desde la segunda línea, pero su chutó mal y desviado.
España necesitaba reaccionar y como mínimo volver a avisar a Suiza, cada vez más crecida. Tras una buena recuperación de Gavi y un control acrobático de Dani Olmo, que fue el primer cambio de Luis Enrique, Marcos Llorente cargó la pierna desde la frontal pero su tiro no encontró portería. También acabó en nada una gran acción de Morata, que cabalgó solo después de un buen control orientado con el pecho y un buen regate entre dos defensores. Su centro lo acabó sacando la zaga helvética que como mínimo ya volvió a ponerse en alerta ante las dos llegadas españolas.
A España le siguió faltando claridad en los últimos metros. Más dinamismo, más precisión. A los de Luis Enrique le pesan ya demasiado las piernas a estas alturas de temporada. Y eso que el seleccionador está repartiendo minutos. Ayer volvió el carrusel de cambios en la segunda parte.
Con el partido abierto, los suizos tuvieron el arreón final. Un error de Unai Simón, que se precipitó en una salida, acabó con un tiro a puerta vacía de Embolo, que de lejos no dirigió su tiro a puerta por fortuna española. Poco después, antes de llegar al 90, Seferovic dispuso de la suya, pero Azpilicueta blocó su disparo de manera providencial.
España, incapaz de sentenciar, acabó sufriendo, pero sumó tres puntos de oro antes de viajar a Málaga, la última parada de esta concentración, para enfrentarse a la República Checa, que cayó ante Portugal, líder en solitario del grupo A2 con 7 puntos, dos más que los españoles.