Acto de la Gobernación Departamental de Tarija. Ojo de Agua, Barrio La Pampa - Tarija, 14 de junio de 2024
CONMEMORACIÓN DEL ANIVERSARIO DE LA FIRMA DEL TRATADO DE PAZ DE LA GUERRA DEL CHACO 1932-1935



En este solemne acto, me corresponde agradecer por la honrosa invitación de que fui objeto de parte de la Dirección de Cultura y Patrimonio de la Secretaría Departamental de Desarrollo Humano de nuestra Gobernación Autónoma Departamental de Tarija, para ofrecer unas palabras alusivas a la CONMEMORACIÓN DE LA FIRMA DEL TRATADO DE PAZ DE LA GUERRA DEL CHACO.
Este luctuoso episodio de nuestra historia republicana, nos lleva a reflexionar sobre lo que fue la más cruenta guerra del S. XX en América, producida entre dos países hermanos, impelidos por intereses ajenos (Petroleras de EE.UU: Standard Oil y anglo-holandesa: Rojal Dutch Shell-Unión Oil Co.) teniendo que someter a su ciudadanía a semejante holocausto en la zona más abandonada, tórrida y hostil de ambos países involucrados.
Ahora, más que recordar las intrincadas acciones castrenses y de sacrificio de los actores en esta larga y cruenta conflagración, nos corresponde referirnos más que a los resultados y pormenores de lo que ha sido el difícil camino para lograr la paz entre ambas naciones.
En marzo de 1931, los paraguayos ocuparon la laguna Pitiantuta (Chuquisaca luego para los bolivianos), un importante reservorio de agua.
El 15 de junio de 1932, el My. Oscar Moscoso con su destacamento tomaron el Fortín López que controlaba la laguna Pitiantuta, lo que dio lugar al casus belli (pretexto) para los paraguayos para iniciar la guerra.
Entre el 15 y 16 de julio de 1932, los paraguayos retomaron la laguna desalojando al My. López, con lo que se desencadenó la conflagración.
En 1934, los diplomáticos bolivianos Enrique Finot, Casto Rojas,Alberto Ostria y David Alvestegui, lograron el éxito diplomático de revertir el imaginario internacional de que Bolivia fue la nación agresora, convenciendo a la comunidad internacional de naciones, que Paraguay fue el primer agresor.
En 1935, se intensificaron las negociaciones de paz, bajo la influencia y presión del canciller argentino Carlos Saavedra Lamas, que se mantuvo favorable a los intereses del Paraguay.
El 12 de junio de 1935 se firmó, con esa presión de argentina, el PROTOCOLO DE PAZ entre los cancilleres Tomás Elío por Bolivia y Luis Riart de Paraguay, fecha que conmemoran los hermanos paraguayos.
El 14 de junio de 1935 a las 12 del mediodía concluyó efectivamente la guerra y esta fecha que se recuerda y conmemora en Bolivia.
Entre 1935 y 1938 se procedió a las arduas negociaciones para definir:
1. Los nuevos límites,
2. La devolución de prisioneros y
3. QUE SE LE OTORGUE A BOLIVIA UNA SALIDA SOBERANA SOBRE EL RÍO PARAGUAY, aspecto en definitiva negado a Bolivia.
El 21 de julio de 1938 se firmó en Buenos Aires el TRATADO DE PAZ, AMISTAD Y LÍMITES, suscrito por los representantes de Bolivia Enrique Finot y Eduardo Diez de Medina y por Paraguay José Félix Estigarribia y Cecilio Baez
El espantoso saldo que dejó la guerra:
PARA BOLIVIA PARA PARAGUAY
Movilizados 200.000 soldados 150.000 soldados
Muertos 50.000 soldados 40.000 soldados
Prisioneros 20.000 soldados 2.500 soldados
Costo 228 millones de dólares 128 millones de dólares*
*Datos y apreciación: “Historia de Bolivia” José de Mesa, Teresa Gisbert y Carlos D. Meza Gisbert, Novena Edición Actualizada y Aumentada pp. 498-499 – Editorial Gisbert y Cia. S.A. La Paz 2016.
Argentina, no solo estuvo en contra de Bolivia en esta conflagración, intervino de manera decisiva en el campo diplomático y militar a favor del Paraguay.
Si bien Bolivia logró defender y mantener para sí la zona petrolera que fue objeto de la disputa, el aspecto radicalmente negativo para nuestro país es no haber logrado en las negociaciones diplomáticas mantener el acceso de Bolivia al Río Paraguay dentro del territorio de Tarija, teniendo presente nuestra mediterraneidad a la que nos condenó Chile desde el aciago año de 1879 hasta nuestros días.
Desde el inicio de las negociaciones, correspondía la aplicación del UTI POSSIDETIS JURIS DE 1810 (Principio de Derecho Internacional por convención americanista en el Congreso Anfictiónico de Panamá, fórmula de negociación que concedía derecho territorial a las emergentes naciones sobre los territorios que venían ocupando en la llamada época colonial, por cuanto desde épocas coloniales Tarija había ocupado el territorio chaqueño, llegando hasta el propio Río Paraguay.
A este efecto, la posición boliviana de tratar de probar sus derechos sobre el Chaco, en base a los límites de la Real Audiencia de Charcas, no fue una posición jurídica idónea, ni práctica ni suficiente.
El Paraguay sostenía que el Acta de Independencia del Alto Perú, no contemplaba los territorios del Chaco Boreal como parte de la nueva república; evidentemente, porque Tarija no pertenecía todavía al Alto Perú, luego Bolivia,
Conforme invoca el jurista e historiador don Luis Pizarro Arce, el error de la diplomacia boliviana ha sido no consultar, obviar y descartar la participación de la intelectualidad tarijeña que conocía perfectamente los derechos de Tarija sobre el Chaco, en tanto la Villa de Tarija durante la Colonia, luego Provincia y finalmente territorio que se declaró libre, para finalmente constituirse en Departamento de Bolivia (época republicana), TUVO COMO MISIÓN PERMANENTE el controlar, conquistar, reducir, poseer y cristianizar el Chaco Boreal y Central, por tanto correspondía en las negociaciones diplomáticas invocar los derechos de Tarija sobre el territorio en disputa y el hecho fáctico de su posesión hasta el Río Paraguay y al pasar Tarija a formar parte de la nueva República de Bolivia, lo hizo con todo su territorio, incluido el Chaco.
Por lo que corresponde afirmar, sin lugar a equivocarnos, que Bolivia si ha tenido derecho al territorio chaqueño, fue por el derecho y obligación adquiridos por Tarija, en mérito a su Misión permanente de siglos de existencia de cumplir, primero, por encargo del Rey de España, y posteriormente por encomienda de la República de Bolivia; lo que equivale a decir que Bolivia sin Tarija, no hubiese tenido título idóneo para reclamar derecho sobre el Chaco.
El Departamento de Tarija ha sido el más afectado con los resultados de estas negociaciones de paz, fruto de la cesión del territorio, ha sido el que más extensión ha perdido (MÁS DE 300.000 Km2.), reducido al 10 % de su extensión geográfica original, dejando en el olvido tanto esfuerzo de siglos de incursión y conquista del Chaco, como fue su permanente misión como vanguardia militar desde la colonia y en la época republicana.
Desde la firma de la “PAZ DEL CHACO”, nos correspondió mantener una actitud de vocación resiliente y de resignación americanista, sin embargo ahora no escatimamos mantener una actitud de respeto y admiración a nuestros combatientes, héroes y ciudadanía afectada, tanto de nuestro país como de nuestros hermanos guaraníes, TENIENDO PRESENTE QUE RECIENTEMENTE HABÍAN SUFRIDO EL HOLOCAUSTO DE LA GUERRA DE LA TRIPLE ALIANZA, entre tanto, mantenemos la esperanza de lograr algún día la unión de nuestros países en torno a la grandiosa Cuenca del Río de La Plata.
Finalmente, permítanme esta disquisición, indicar que en nuestro país esta enorme conflagración, ha dado lugar a impresionantes expresiones del espíritu poético artístico nacional como es el imponente Bolero de Caballería Militar: “DESPEDIDA DE TARIJA” o la cueca “INFIERNO VERDE”, que nos transportan vívidamente a los momentos en que desde aquí, “EL OJO DE AGUA” del Barrio de la Pampa de Tarija, ahora Barrio Papa Juan XXIII, se despedía a los soldados que marchaban al Chaco a defender nuestro territorio, sin descuidar nombrar una “MADRINA DE GUERRA”, que quedaba con el sublime encargo de comunicarse con el ahijado mediante cartas, así como orar y encomendar al Altísimo para que el soldado-ahijado, vuelva sano y salvo de la contienda.
INFIERNO VERDE (Cueca)
(Autor letra y música: Alberto Ruíz Lavadenz 1898-1949)
Si aún queda llanto en tus ojos
Para llorar mi partida
No llores mientras la vida
Ceda un minuto al amor
Ese minuto de vida
A la orilla de la muerte
Tiene el encanto de verte
Resignada ante el dolor
Llorarás cuando mañana
Ya nadie de mí se acuerde
Porque del “Infierno Verde”
Solo Dios se acordará.
Gracias…
Ojo de Agua - Tarija, 14 de junio de 2024
Hugo R. Suárez Calbimonte