Según el Gobierno, el incremento es para el sector salud, la Policía y el área de Defensa
Aumento salarial: Piden excluir a los funcionarios y autoridades
Advierten que el incremento solamente beneficia al 20% de la fuerza laboral del país, lo que se traduce en 1,5 millones de trabajadores, la mayoría de ellos funcionarios públicos



El anuncio del incremento salarial realizado por el presidente Luis Arce, junto a los dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB), ha generado una oleada de críticas y preocupación en diversos sectores sociales y económicos del país. El aumento del 10% al salario mínimo nacional —que pasa de 2.500 a 2.750 bolivianos— y del 5% al haber básico, ha sido calificado como una medida “fuera de contexto” y sin criterio técnico, especialmente en un momento en que la economía boliviana enfrenta presiones inflacionarias, escasez de dólares y pérdida del poder adquisitivo.
El Gobierno ha intentado presentar este ajuste como un acto de justicia social y redistribución económica, pero surgen cuestionamientos sobre su alcance limitado y advierten las consecuencias colaterales que podría generar. En ese marco, plantean excluir a los funcionarios públicos y autoridades, para evitar una mayor presión sobre las arcas estatales.
Un beneficio limitado
El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, explica que este tipo de incrementos beneficia únicamente al 20% de la fuerza laboral del país, es decir, aproximadamente a 1,5 millones de trabajadores que se encuentran dentro del sistema formal. Mientras que la mayoría —que forma parte del empleo informal o por cuenta propia— queda fuera del alcance de esta política salarial.
“A cuatro sectores les corresponde un aumento de hasta el 5%, que son los maestros, el sector salud, la Policía y el área de Defensa” Edgar Montaño MINISTRO
Mencionó que el salario nominal sube, pero el salario real disminuye. Explicó que la gente tiene más billetes, pero compra menos en este escenario de inflación no reconocida oficialmente y una devaluación encubierta del boliviano.
Para graficarlo, Romero indica que en 2022 el salario mínimo de 2.250 bolivianos equivalía a 328 dólares al tipo de cambio oficial (cuando no había escasez de divisas); ahora, con 2.750 bolivianos y el tipo de cambio paralelo bordeando los 14.72 por dólar, el ingreso mínimo apenas representa 187 dólares.
¿Favorece a autoridades?
Desde los barrios también se han hecho escuchar voces de molestia. Rodrigo Castillo, dirigente vecinal del barrio San Marcos de Tarija, cuestiona la medida, al considerar que no responde a la realidad que viven millones de bolivianos.
“Todos los productos de la canasta familiar han subido un doble o triple, un ejemplo claro es el aceite que hoy vale 100 bolivianos, lo que antes costaba 35 bolivianos los 5 litros, la carne puchero que antes valía 12 bolivianos, hoy vale 24 bolivianos”, indicó.
Castillo adelantó que con este incremento salarial, los comerciantes nuevamente van a especular con los precios de la canasta básica familiar, subiendo los costos de productos como el arroz, fideo, pan, e incluso dará argumentos al transporte para que pida un nuevo incremento de tarifas.
Castillo señaló que con el incremento del 10% al salario mínimo nacional, éste sube a 2.750 bolivianos, pero, también, aumenta el 5% al haber básico de autoridades como diputados, senadores, ministros y viceministros. Es decir, que si un asambleísta departamental ya percibe un salario de 13.000 bolivianos, con el incremento recibirá 13.650 bolivianos.
El ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, aseguró que el salario de las autoridades no subirá, ya que el incremento supuestamente no beneficiará al Presidente del Estado, al Vicepresidente, ministros ni legisladores.
“El incremento del 10% no corresponde al Ministro, al Viceministro ni a ningún funcionario público. A cuatro sectores les corresponde un aumento de hasta el 5%, que son los maestros, el sector salud, la Policía y el área de Defensa”, puntualizó.
La COD en silencio
Cabe recordar que en la gestión 2024 se había advertido que la dieta de la cúpula dirigencial de la Central Obrera Boliviana (COB) superaba los 15.000 bolivianos, además se había confirmado que su máximo dirigente Juan Carlos Huarachi cobraba 15.450 bolivianos. Considerando el 5% de incremento de este año, su salario subirá a 16.222,5 bolivianos.
Sobre este tema, El País intentó contactar al dirigente de la Central Obrera Departamental (COD), Roberto León, para conocer sus impresiones sobre este incremento y la propuesta de excluir a funcionarios públicos, sin embargo, no se pudo establecer comunicación.
Temen más inflación con el aumento salarial
El alcalde de Tarija, Johnny Torres, a tiempo de cuestionar la decisión del Gobierno y la COB, advirtió que este incremento salarial abre una espiral inflacionaria, ya que diferentes sectores sentirán el derecho de subir el precio de bienes, servicios e incluso la canasta básica familiar. “Esto va a tener muchas consecuencias sobre la economía del país”, adelantó.
“Este tipo de acciones que toma el Gobierno, son acciones irreflexivas, no se piensa en cómo le va a ir al país, yo creo que el Gobierno está extraviando el camino o ya está extraviado por completo. La COB le dice suba el 10% más el 5% y el Gobierno lo hace creyendo que eso lo va a caer bien al país, y le va a caer muy mal”, advirtió.