El jueves 11 de julio, comunarios se reunirán otra vez con YPFB Chaco y Petrobras
Referéndum Domo Oso: “La respuesta es no” dice la resistencia comunal
Un nutrido grupo de los comunarios del cantón de Chiquiacá descartan un referéndum que defina el futuro de la Reserva. “Hay muchas conciencias compradas. Preferimos defender a nuestra manera”, recalca Nelly Coca
El jueves 11 de julio, en el cantón de Chiquiacá, en la provincia O’Connor, nuevamente se reunirán los comunarios de la zona con los ejecutivos de Petrobras e YPFB Chaco para retomar el diálogo en torno al proyecto Domo Oso X3, que, insisten las petroleras, está fuera del corazón de la Reserva Natural de Flora y Fauna Tariquía.
Tanto Petrobras como YPFB Chaco han indicado que agotarán hasta el último recurso para obtener la venia de las comunidades que están en la zona de intervención. Para buena parte de los comunarios del cantón de Chiquiacá no hay nada que pensar, “la respuesta es no”. Así de clara fue Nelly Coca Flores, miembro del Comité de Defensa de la Reserva de Tariquía.
“La respuesta a YPFB y Petrobras ya la hemos dado hace meses atrás. Chiquiacá y las comunidades del cantón en general rechazamos el ingreso de las petroleras. Yo no sé qué parte de lo que decimos los comunarios no entienden, nosotros no estamos dispuestos a negociar nuestra Reserva, nuestra vida, nuestra agua no tiene precio”, recalcó.
Coca aseguró que desde la última reunión, que se realizó el 7 de junio, personal de YPFB y Petrobras siguieron realizando una especie de “trabajo hormiga” para convencer personalmente a los dirigentes de las comunidades.
“Nosotros no estamos dispuestos a negociar nuestra Reserva, nuestra vida, nuestra agua no tiene precio” Nelly Coca COMUNARIA
“Ellos no han cesado, siguen comprando conciencia”, dijo, a tiempo de detallar que incluso se hacen presentes durante la presentación de proyectos de son de interés de las comunidades.
“Vienen camuflados en los proyectos. Entran a decir que los proyectos van a traer progreso, pero si dejamos entrar a las petroleras a nuestra zona”, detalló y apuntó complicidad de organizaciones, como la Federación de Mujeres Campesinas “Bartolina Sisa”.
Aunque la postura de este bloque no ha cambiado, los comunarios del cantón de Chiquiacá asistirán a la reunión programada para el 11 de julio y ahora esperan que las petroleras respeten su decisión.
Cabe recordar que el director presidente de Petrobras Bolivia, André Bitar, en su última visita a Tarija, justamente para explicar el proyecto Domo Oso X3, dijo que harán todo lo que esté a su alcance para concretar la exploración con la autorización de los habitantes de la zona.
Sin embargo, si el proyecto no avanza, Petrobras priorizará otros que tiene en otras regiones.
Bitar afirmó que es fundamental avanzar en la exploración del pozo, donde estiman un potencial de 2.7 trillones de pies cúbicos (TCF) y la posibilidad de generar 6.000 millones de dólares en divisas para el país.
YPFB
Wilman Yabeta, vicepresidente de Administración de Contratos y Fiscalización (VPACF) de YPFB, recalcó que la estatal petrolera, en su proceso de socialización, garantiza que el pozo no tocará el corazón de Tariquía.
“Está fuera de la Reserva. El 11 de julio tenemos una reunión programada con las comunidades para definir el tema del ingreso. YPFB garantiza que no se va a tocar el área de Tariquía”, reiteró Yabeta en una entrevista cuando se conmemoró los 100 años de la industria petrolera en Bolivia.
El ejecutivo de la estatal petrolera hizo énfasis en la necesidad de invertir y explorar el Domo Oso X3, pues las expectativas que hay en torno al proyecto son altas.
“Del pozo Domo Oso se espera una producción 6 millones de metros cúbicos diario, entonces, es una inversión necesaria, que ayudará al crecimiento del país”, recalcó, a tiempo de calificar el área como un megacampo, considerando que se proyectan 2.7 TCF.
Comunarios descartan referéndum por Tariquía
Hace un par de meses, los comunarios de Tariquía tenían la idea de gestionar una consulta popular que defina el futuro de la Reserva Nacional de Tariquía, con la esperanza de que el resultado sea similar al del Parque Nacional Yasuní, en Ecuador, donde sus habitantes frenaron la actividad petrolera.
Hoy esto queda descartado. Nelly Coca Flores, miembro del Comité de Defensa de la Reserva, dice que no hay confianza en ese proceso. “Sabiendo cómo está el país, de contaminado con la corrupción, hay muchas conciencias compradas. Preferimos defender a nuestra manera”.