Fragmentados, MAS y Unidos van por el control de la ALDT
La lucha por el poder se intensifica a dos semanas de la elección. La división del partido azul pasa factura y avizora dificultades para mantener el bloque mayoritario. Unidos busca sacar provecho de la situación
Faltan dos semanas para que el pleno de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija (ALDT) elija una nueva directiva. Las negociaciones están a flor de piel, pues las bancadas mayoritarias pugnan por el poder. Por un lado, el Movimiento al Socialismo (MAS) quiere mantener el control del ente legislativo, por el otro, Unidos tiene el objetivo de recuperar el mando. Ambas bancadas están fraccionadas, y ambas quieren sacar ventaja de aquello. En tanto las minorías, como los Indígenas y Comunidad de Todos se mantienen con bajo perfil.
Cabe recordar que la actual directiva de la ALDT ha sido elegida la noche del 1 de junio del 2023, su mandato está próximo a concluir, por lo que cinco días antes deberán reunirse para coordinar la fecha y hora de la sesión en donde deberá elegirse el nuevo directorio por el periodo 2024-2025.
Objetivo del MAS
La asambleísta del MAS, Juanita Miranda, actual vicepresidenta de la ALDT, señaló que su bancada se ha reunido para analizar lo que será la elección de la nueva directiva, pero que no han participado todos los legisladores.
Adelantó que la intención es dar continuidad al bloque que se tiene, pero ajustando algunos temas, como una mejor gestión, más apertura y coordinación con el Gobierno nacional, Gobernación y municipios, por el hecho que existen proyectos de ley que deben ser abordados.
“Evidentemente en otros lugares se ha sentido la fisura interna dentro de las bancadas con las diferentes alas (arcistas y evistas), sin embargo, creo que en el departamento de Tarija no está marcado. Creo que lo más sano sería poder continuar con el bloque dentro de lo que viene el planteamiento de un trabajo de coordinación institucional”, dijo.
Alianza Unidos ha confirmado que actualmente ha logrado convenir con legisladores de Comunidad de Todos, el MAS y un Indígena
Miranda reconoció que han estado en conversaciones permanentes con el actual bloque mayoritario, tanto con los cinco disidentes de Unidos como los asambleístas indígenas, para mantener vigente la alianza. Sin embargo, reconoció que por parte del Ejecutivo Departamental existe un “coqueteo” no solamente a los disidentes de Unidos, sino también a legisladores del MAS y representantes indígenas.
“Están coqueteando y buscando por todo lado romper este bloque mayoritario y poder nuevamente tener el control de manera plena el Ejecutivo”, afirmó.
Consultada si el MAS irá por la presidencia de la ALDT, Miranda explicó que en el marco del análisis interno han advertido que no corresponde a que el partido azul se cierre a buscar la cabeza del ente legislativo, ya que esto sería darle al gobernador, Oscar Montes, el argumento para justificar la “mala gestión” que viene llevando.
Objetivo de Unidos
La bancada de Unidos, afín al gobernador Montes, ha dejado ver que el objetivo es retomar el control del ente legislativo. El asambleísta, Mauricio Lea Plaza, a tiempo de cuestionar el bajo rendimiento de la actual directiva de la ALDT, señaló que el reto que tendrá el nuevo directorio será coadyuvar a gestionar la crisis que actualmente atraviesa la Asamblea, mejorar la imagen institucional del ente legislativo, además de reducir el aparato estatal.
“Nosotros como bancada hemos estado estos días justamente trabajando en esa perspectiva, y obviamente que hemos convenido dentro del bloque político que tenemos con Comunidad de Todos, algunos asambleístas del MAS y un asambleísta indígena, en la necesidad de trabajar en la perspectiva de generar acuerdos que permitan una especie de reposicionamiento de la Asamblea de manera institucional”, afirmó.
Lea Plaza mencionó que el conflicto en la ALDT no solo radica en bandos o grupos, sino que esto afecta a la institucionalidad en su conjunto de la Asamblea, por lo que ahora se debe realizar una gestión institucional que recupere la imagen de la institución y dé a la gente resultados efectivos.
“Son 12 asambleístas que están articulados, y obviamente lo que estamos haciendo es tratar de sumar esfuerzos con otros asambleístas que estén con esta misma idea, con esta misma decisión de realizar cambios importantes en la Asamblea”, apuntó.
El legislador de Unidos se refirió a la ruptura que tiene el MAS a nivel nacional y la metástasis que ha hecho en el nivel departamental. Vaticinó que en esta gestión será difícil que la bancada azul pueda alinear a los 11 legisladores para poder mantener su bloque mayoritario, ya que arcistas y evistas son políticamente incompatibles.
Ferreira, el indígena aliado de Unidos
El asambleísta departamental representante del pueblo Tapiete, José Luis Ferreira, reconoció que desde la gestión pasada que la bancada Indígena se ha fragmentado, pues tanto los representantes guaraníes y weenhayekes son parte del bloque mayoritario del MAS, y que solamente su persona está con Unidos, con quien reafirmó su alianza.
Ferreira mencionó que no hubo ninguna coordinación como bancada Indígena, por lo que cada uno está actuando de manera aislada.