Entrevista con el Encargado de Negocios interino de la Embajada de Estados Unidos
Hillsman: EEUU no siempre está de acuerdo con el Gobierno de Bolivia, pero hablamos
El Encargado de Negocios interino de la Embajada de Estados Unidos arribó a la ciudad de Tarija, se reunió con las autoridades y el sector privado. Se quiere establecer nexos comerciales
Jarahn Hillsman, Encargado de Negocios interino de la Embajada de Estados Unidos, visitó la capital chapaca por segunda vez, aunque en esta ocasión sin la carga del barbijo. Su primera visita fue cuando la pandemia del Covid-19 estaba latente.
En esta ocasión ha podido disfrutar de los viñedos, de la picardía de las comadres, de la particularidad de las comidas.
También ha podido conocer más de cerca al empresario tarijeño, conocer qué produce y qué le puede ofrecer al mercado norteamericano.
El País (EP): ¿Cuánto tiempo lleva en Bolivia como Encargado de Negocios interino de la Embajada de Estados Unidos?
Jarahn Hillsman (JH): Desde octubre de 2022, pero llevo dos años y medio en el país, antes era el Ministro Consejero de la Embajada. He llegado en julio de 2020, y junto a Charisse Phillips, que era la Encargada de Negocios entonces, nos hemos enfocado en ver dónde y cómo podemos trabajar con Bolivia para enfrentar lo que era la pandemia, porque era una crisis global.
Cuando llegamos era la época de Jeanine Áñez, y sabíamos que era una situación difícil. Buscamos la manera de trabajar para enfrentar esta pandemia que era sin precedentes, cómo ayudar con información, insumos de bioseguridad, para compartir con el pueblo boliviano. Así también hemos donado tanques de oxígeno y ventiladores.
Después, hemos logrado la entrega de 5 millones de vacunas completamente gratis, sin condiciones, vacunas de alta calidad, y esa era una prioridad, ver qué podíamos hacer para enfrentar esta crisis.
Después de la pandemia, pensamos en cómo empujar el crecimiento económico. Entonces, nos hemos enfocado más en esas áreas durante nuestro tiempo aquí en Bolivia, salud y economía, porque era necesario.
EP: ¿Y ha sido difícil restablecer la relación con el gobierno de Luis Arce?
JH: Tenemos una relación cordial. Hablamos con el Gobierno y no siempre estamos de acuerdo, pero hablamos. No voy a decir que ha sido difícil o no, porque hablamos y hemos tenido relación.
No tenemos embajadores, pero tenemos Encargado de Negocios, tenemos Embajada, Bolivia tiene Embajada y consulados en los Estados Unidos, entonces, tenemos una relación cordial. Y eso es importante, lo que tenemos que hacer es buscar oportunidades y líneas de interés mutuo, que haya oportunidades de trabajar. Y en esa vía hemos ido, salud, economía, empleo y oportunidades, es otra forma de política.
EP: Cómo toma las insinuaciones que hace el expresidente Evo Morales, en sentido de que hay un plan en su contra, que se siente perseguido. Y siempre está la figura de Estados Unidos detrás
JH: Estamos más enfocados en la relación con el gobierno de Bolivia, primero, a dónde vamos, dónde queremos ir y también los nexos directamente con el pueblo boliviano. Estamos enfocados en eso, en los programas que tenemos con mujeres, emprendedores, estudiantes, tenemos mucha cooperación en el área cultural y de educación.
Estamos enfocados en lo positivo, con las puertas abiertas al gobierno de Bolivia para ver de qué quiere hablar, qué quiere hacer con nosotros en este contexto bilateral.
Preferimos enfocarnos en esto, lo otro es política doméstica.
EP: Estados Unidos tiene 3.000 productos bolivianos en el sistema de preferencias arancelarias, pero se exporta menos del 5% de esa lista, ¿a qué cree que se debe? ¿desinterés del empresariado o falta de información?
JH: En realidad son muchas cosas que los bolivianos pueden vendernos, tienen buenos productos, y lo hemos hablado aquí en Tarija, hemos visto una variedad de productos que están buscando mercado, no solamente el singani.
Hemos hablado con los representantes del sector privado sobre cómo pueden aprender y entender un poco más sobre lo que es el mercado de los Estados Unidos. Estamos viendo eso ahora, qué información necesitan, qué tenemos que hacer para poner esa información en la mesa, para ellos, la información sobre el acceso y los reglamentos para comida, bebidas, para que ello sepan cómo funciona y a partir de ello generar oportunidades nuevas.
EP: ¿Qué productos tiene Bolivia que, tal vez, no está sabiendo explotar en el mercado norteamericano?
JH: Eso estoy tratando de entender mejor, por eso mi interés de reunirme en Tarija, para saber qué son, me hablaron de manzanilla, orégano, nueces, que tiene un sabor especial, ajo y arándanos, son ejemplos.
Estamos viendo eso, qué información necesitan, qué falta para construir esos nexos comerciales. Puede ser difícil de entender sin la ayuda de nuestra Embajada y para eso estamos.
El Presidente quiere empujar la economía, pues veamos cómo podemos ayudar en esa decisión, vemos cómo podemos generar oportunidades, empleos. (…) Queremos ayudar en ese proceso, no importa la línea, la política que tiene, si hay oportunidades de colaborar. No tenemos que estar de acuerdo siempre al cien por ciento.
EP: ¿Y qué le interesa a Estados Unidos de Bolivia?
JH: Un buen socio. Somos vecinos, entonces, es importante que los vecinos entendamos qué está pasando en cada uno de los países, que trabajemos juntos para construir un hemisferio más seguro, donde haya oportunidades para la gente. Queremos un hemisferio más próspero y democrático, que funcione bien.
EP: ¿Cómo ha sido su visita a Tarija?, ¿qué interés le ha despertado Tarija?
JH: Hemos recibido una recepción excepcional. Y hemos venido por tres motivos, primero, para celebrar con Tarija el reconocimiento del singani como producto distintivo de Bolivia, eso es algo que no podemos tomar nosotros el crédito, un equipo ha trabajado en esto por años, desde nuestra embajada aquí y la embajada de Bolivia en los Estados Unidos.
También, para sentarnos con el sector privado de Tarija, para entender un poco más no solo cómo se hace el singani, el sector de los viñedos y todo eso, si no, qué otras oportunidades hay, en qué áreas podemos ayudar, cooperar.
Y, finalmente, estamos como turistas. Yo, personalmente, puedo ver cómo es Tarija y las posibilidades que ya existen en esa área de turismo. Tiene un buen clima, gente muy amable, muy buena comida y esa infraestructura del vino y el singani, son impresionantes. Entonces, queremos también pensar en esa área, qué podemos hacer para construir esos nexos.
Pero, sobre todo, estoy aquí para escuchar y entender un poco mejor a Tarija.