Loteadores provocan movimientos de tierra que afectan al lago
San Jacinto, amenazado por el sedimento y la contaminación
Las autoridades reconocen que no existe presupuesto para realizar un dragado a la represa, lo poco que hay lo destinan a trabajos de contención, en su mayoría paliativos



El sedimento y la contaminación amenazan a la represa de San Jacinto. Las esperanzas de realizar un mantenimiento a este proyecto, que tiene más de 30 años de vida, están lejanas, pues la situación económica del departamento apenas prevé recursos para realizar trabajos paliativos de prevención.
Un artículo elaborado por el diario El País, advertía que la represa de San Jacinto perdió un 24 por ciento de su capacidad de embalse de agua, esto debido a la sedimentación acumulada durante años. El ahora director del Proyecto Múltiple San Jacinto, José Valdez, ratifica la información, señalando que la sedimentación bordea el 30%.
El embalse fue construido para un volumen de agua de 62,9 hectómetros cúbicos, pero según el estudio de batimetría, la sedimentación alcanza a 15 hectómetros cúbicos, equivalente al 24% de la capacidad.
Valdez reconoce que, durante la vida útil del lago, no se hizo la limpieza de la sedimentación, incluso por una ocasión que se sacó unos 1.500 metros cúbicos de limo. Cuando anualmente se estima que el lago recibe unos 500 metros cúbicos de sedimento.
Movimientos ilegales de tierra
Valdez explica que la sedimentación no es tanto por el arrastre de los ríos que alimentan a la represa, sino por el movimiento ilegal de tierra que realizan algunos loteadores por las cabeceras del lago.
“Hay algunas urbanizaciones clandestinas que no cuentan con una ficha ambiental para contrarrestar o llevar adelante un trabajo de mitigación del arrastre de la sedimentación del lago. Ese movimiento de tierra hace que las lluvias arrastren esta tierra al lago, y este es el principal problema en cuanto a la sedimentación”, afirmó.
La autoridad anunció que para esta gestión se prevén asumir acciones legales en contra de las personas que están urbanizando en las cabeceras. Refirió que de acuerdo al Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), las parcelas están clasificados como terrenos agrícolas.
No hay recursos
Valdez detalló que no existen los recursos económicos para realizar un trabajo de limpieza general al lago, remarcó que lo poco que se tiene, se lo destina para tratar de conservar este afluente.
“Para sacar el limo, somos sinceros, no hay presupuesto. Hablaban en anteriores gestiones de un dragado, y es un presupuesto muy alto”, apuntó Valdez, a tiempo de advertir que se buscarán los mecanismos de gestión ante alguna organización no gubernamental que pueda ayudar a salvar el lago.
La invasión del Jacinto y la basura
Sumado al problema de la sedimentación, se tiene la presencia del jacinto de agua, una voraz planta invasora, que se ha propagado por los márgenes de la represa, asimismo, la presencia de la basura que generan las personas, es otro de los factores que afean al lago San Jacinto.
Las autoridades reconocen que existe una iniciativa en el marco del proyecto Gestión del Agua, el cual plantea establecer una alianza público privada, para que en el marco de este convenio el empresariado privado pueda aprovechar la sedimentación, que puede ser usado como fertilizante en los cultivos.
En este contexto, la concejal municipal de Cercado, Marcela Guerrero, también menciona que existe la iniciativa de poder aprovechar los jacintos, para convertirlo en abono.
En cuanto a la contaminación por basura que dejan las personas en los márgenes de la represa, Guerrero explica que desde las comunidades de la subcentral de Tolomosa han estado contantemente trabajando con colectivos, para realizar una limpieza, aunque reconoce que esto no dura mucho tiempo.
“Es un problema integral que tiene la represa, que se suma la congestión vehicular, que no exista un sistema de alcantarillado. El año pasado ya nos hemos reunido con instituciones como Cosaalt, la OTN, entonces el mayor problema que se tiene en todas las instituciones es el presupuesto, entonces estamos viendo como unir esfuerzos”, apuntó.
Guerrero resaltó la importancia de poder hacer un mantenimiento a la represa, puesto que si se continúa descuidando muchas familias campesinas se verán afectadas, además que el lugar no servirá para hacer turismo.