Congreso polémico en Cercado
“Desahucian” a Acosta y arropan a Lizárraga en el MAS Cercado
Los movimientos sociales denuncian que el presidente del MAS no respetó los Estatutos y busca controlar las Regionales para reelegirse
Enésimo lío dentro de la estructura orgánica del Movimiento Al Socialismo (MAS) Regional Tarija, o en realidad Regional Cercado, aunque no, porque los dedos de las organizaciones señalan de nuevo a Carlos Acosta, el presidente de la Departamental y que parece haberse “especializado” en imponer sus candidatos en cualquier pugna y después presentarlos rápidamente como oficiales.
Así pasó el fin de semana en un Congreso que empezó a sillazos y acabó dividido en dos, por un lado, las organizaciones más cercanas a Carlos Acosta, fundamentalmente funcionarios y cargos electos que eligieron a una dirigente barrial como Sandra Baldivieso para presidir la Regional de Cercado; y por el otro, la vieja guardia de los Eulalio Sánchez, Paulino Cari, Abel Aguilar y otros, que reconocieron a Pilar Lizárraga para esa misma función.
Acosta convocó a conferencia de prensa el domingo y presentó a Baldivieso como asunto cerrado, y asegura que tiene el apoyo del MAS nacional – Evo Morales – y del Gobierno – Luis Arce -.
Al otro lado señalan que el Congreso que siguió el procedimiento en el nombramiento de la mesa y en la posesión fue el que ungió a Pilar Lizárraga, y que en todo caso, será la nacional la que acabe por definir, una vez más, sobre lo sucedido. “Pero los delegados nacionales presentes no avalaron a Acosta” señala una fuente que no quiere ser identificada.
El secretario de Coordinación con Sectores Sociales del MAS en Tarija, Juvenal Marín, aseguró que Lizárraga fue elegida con el apoyo de 31 organizaciones de las 34 afiliadas al partido, mientras que Baldivieso recibió el apoyo también de otros sectores sociales, sin embargo no fue elegida en base a una convocatoria como establece el Estatuto Orgánico del partido.
Un pulso repetido
Carlos Acosta es de base campesina de la provincia de Uriondo, la misma que el hoy viceministro Álvaro Ruíz, que es su padrino político y quien lo ayudó en 2018 a llegar al cargo con el apoyo del resto de munícipes. Asumió entonces la vocería de un partido que venía tocado.
Unos años más tarde, Acosta fue quien acabó definiendo el candidato del MAS a la Gobernación de Tarija luego de que la nacional levantara las manos en el pulso que mantenían el propio Ruíz y el ejecutivo de O´Connor, Walter Ferrufino. En una operación similar a la del fin de semana, Acosta se rodeó de algunos líderes – que luego fueron candidatos en franja de seguridad – y presentó a Ruiz como el candidato orgánico en la misma sede de la Central Obrera.
Resolución La Dirección Nacional tendrá que definir sobre la legitimidad de las dirigentes ungidas
Una de las “víctimas” de aquel apoyo fue Pilar Lizárraga, que había sido electa por la Regional de Cercado como primera asambleísta, pero fue relegada a la cuarta fila, lo cual la dejó sin curul.
Lizárraga es socióloga, investigadora y militante del MAS incluso antes de que el MAS llegara a Tarija, pues forma parte del núcleo ideológico nacional popular más duro y cercano a Evo Morales y Álvaro García Linera.
Después de los hechos de 2019, el MAS busca un partido fuerte capaz de funcionar orgánicamente y marcar línea al Gobierno, y no al revés. En ese sentido, se buscan liderazgos fuertes en las regiones que sean capaces de articular la oposición y ejercer vocerías consecuentes. En esas, Pilar Lizárraga ha estado desde el principio en los sondeos junto a otros líderes como Walter Ferrufino o José Yucra.
Se espera una definición del Congreso en esta semana, recordando que todavía queda la departamental por renovar.