Crónica política de la semana
De la citación de Camacho y la “agenda” de Paz al timing chaqueño
Los temas nacionales marcan el acontecer político: mientras se amortiza la polémica indígena y de la wiphala arrecia el debate sobre el enriquecimiento ilícito y solo uno pide diálogo: Rodrigo Paz



Semana política claramente marcada por el acontecer nacional en los pulsos abiertos: wiphala, indígenas, etc., pero que va derivando hacia uno solo: el rechazo de los políticos de oposición a la Ley contra el Enriquecimiento ilícito.
En Tarija la agenda la ha vuelto a marcar el Chaco y su demanda del 45%, que ha escenificado su reclamo en la capital para acabar retirándose a la Región con un convencimiento claro: no hay nada que negociar en Cercado. Y vaya que no lo hay. El Gobernador Óscar Montes está dispuesto a cargar cadáveres ajenos y ha afirmado vehementemente que no hay un solo boliviano por transferir. La cosa parece entonces elevarse al siguiente nivel. Sin proyectos de los que hablar y sin más agenda que culminar el traspaso de las entidades de servicio que aun se administran desde Tarija, lo siguiente será discutir probablemente la presencia de asambleístas chaqueños en la Legislativa Departamental, o fiscalizar determinadas inversiones que se hacen con el 55% en el territorio del 45%. El timing lo marcan sin embargo los actores del Chaco.
El foco en el Chaco le sirvió al alcalde Johnny Torres para avanzar en algunos de los proyectos de gestión que sin duda lo dejan mejor parado a la vista de los votantes. Torres cargó en los cinco años de subgobernación con el debe de la Canasta Alimentaria para los Adultos Mayores, muerto que por cierto sigue sin solución en el escritorio de la Gobernación habiendo empezado octubre. Esta semana se anotó en tiempo récord el tanto del puente de Tomatitas y a la vez solucionó y posicionó otros asuntos, como la licitación de los puentes que se vienen.
Mientras Torres se consolida, la Asamblea Legislativa se pone de perfil. Pasan los meses y más allá del POA, no ha habido otra iniciativa de fondo y tampoco se ha involucrado en los problemas del momento. Tampoco en el asunto del 45% pese a que el Presidente, Nicolás Montero, es chaqueño, con un papel tan difícil como el de la Vicegobernadora Maya Soruco.
La esfera nacional
La semana acabó con dinamitazo: después de dar muchas vueltas, la Fiscalía convocaba a declarar a Luis Fernando Camacho, Gobernador de Santa Cruz, por el caso del presunto Golpe de Estado de 2019 por el que se mantiene presa a la expresidenta Jeanine Áñez, que en todo caso sería beneficiaria, mientras que se toman todo el tiempo del mundo para citar al resto de actores.
El asunto estaba descontado, más después de que el propio Camacho le “pidiera” al Vicepresidente David Choquehuanca su citación en la efeméride cruceña, advirtiendo que no se iba a escapar. La cuestión será cómo se hará y dónde, pues en principio los abogados de Camacho están pidiendo que sea el 7 de octubre en Santa Cruz y no así en La Paz.
Este tema junto a la convocatoria de un paro nacional el 11 de octubre – sí, el día de la Mujer Boliviana que no tiene casi nada que reivindicar – por la Ley contra el Enriquecimiento Ilícito han acabado por apartar un poco los temas arrastrados desde la efeméride cruceña con la wiphala y la marcha indígena, que llegó a su fin sin tener muy claro cuál era el objetivo realmente buscado más allá de encontrar la solidaridad interesada de la Gobernación cruceña.
Esta semana los cívicos tratarán de meter mucho miedo sobre el tema de la Investigación de Fortunas para tratar de movilizar a las clases bajas, comerciantes y demás “defraudadores corrientes”, al otro lado les recuerdan que en realidad los grandes beneficiados del sistema opaco son otros.