Las variantes VOC que circulan en Tarija fueron catalogadas de "preocupación" por la OMS



Desde el Servicio Departamental de Salud (Sedes) confirmaron este martes la presencia de las variantes del coronavirus VOC en el departamento de Tarija, consideradas de "preocupación" por la Organización Mundial de la Salud (OMS) debido a su transmisibilidad.
Las variantes que se clasifican VOC son las que se denominan alfa, beta, gamma y delta, sin embargo, de acuerdo al Sedes, el Centro de Enfermedades Tropicales (Cenetrop) en Bolivia no tiene capacidad para la detección de esta última mutación (delta).
La OMS advirtió que estas variantes, consideradas de preocupación, están asociadas con el "aumento de la transmisibilidad o cambio perjudicial en la epidemiología de la Covid-19, aumento de la virulencia o cambio en la presentación clínica de la enfermedad; o disminución de la efectividad de las medidas sociales y de salud pública o de los diagnósticos disponibles, vacunas, terapéutica", según cita la Agencia Anadolu.
Cepa Alfa: La cepa B.1.1.7, detectada en el Reino Unido en septiembre de 2020 por primera vez y luego denominada alfa, fue la primera mutación de Covid-19 que la OMS definió como una variante preocupante.
En un estudio realizado por el Centro de Modelado Matemático de Enfermedades Infecciosas de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres (LSHTM, por sus siglas en inglés), se descubrió que la variante era entre un 43% y un 90% más contagiosa que el tipo nativo (fenotipo natural) de Covid-19 en las muestras examinadas en el Reino Unido.
Se observó un aumento similar en el rasgo de contagio en estudios realizados en Dinamarca, Suiza y Estados Unidos.
Sin embargo, también surgieron diferentes hallazgos en cuanto a la variante que revelaron una mayor tasa de mortalidad. La variante alfa causó 71% más muertes según LSHTM, 70% según la Universidad de Exeter, 65% según Servicio de Salud Pública de Inglaterra y 36% según Imperial College London, en comparación con cepas de COVID-19 anteriores observadas en el Reino Unido.
Cepa beta: B.1.351, o variante beta, se detectó por primera vez en Sudáfrica en octubre de 2020, en un asentamiento cerca de la bahía de Nelson Mandela.
Se estima que la variante beta, que se cree que mutó en mayo de 2020, es la primera mutación de Covid-19 que ha surgido entre las cepas definidas como variantes de preocupación por la OMS.
Se observó que la variante era más común entre individuos jóvenes sin antecedentes de enfermedades agudas y presentaba un mayor riesgo de enfermedad grave en el grupo de edad en comparación con el tipo nativo de Covid-19.
Se cree que la propagación de la variante ha contribuido al aumento de casos en Sudáfrica desde el otoño de 2020, hasta principios de 2021.
Cepa gamma: La variante P.1, detectada por primera vez en Japón en pasajeros que viajaban desde Brasil en enero de 2020 y luego denominada "gamma", también se encontraba entre las mutaciones de Covid-19 descritas por la OMS como una variante preocupante.
Se sabe que la variante causa 17 cambios en los aminoácidos del virus. Diez de estos afectan la proteína de pico, que permite que el virus se adhiera al cuerpo humano.
Se estima que la cepa fue responsable en el repentino aumento de casos en la ciudad de Manaos, la capital del estado brasileño de Amazonas, a principios de 2021.
Cepa delta: Detectada por primera vez en la India en octubre de 2020 y llamada doble mutante, la 1.617.2 fue la última mutación de Covid-19 descrita por la OMS como una variante preocupante.
Se estima que la variante Delta del virus, que causa mutaciones en la proteína de pico que pueden afectar la infecciosidad y la resistencia a los anticuerpos, fue responsable de la segunda ola de la pandemia, que comenzó en marzo en India y aumentó el número diario de casos, hasta 400.000.
El Servicio de Salud Pública de Inglaterra advirtió, después de una evaluación en mayo, que la tasa de propagación de la variante delta es de un 51% a 67% más alta que la variante alfa.