Los transportistas no han visto rentable las nuevas condiciones de trabajo
Solo 40% de los micreros en Tarija sigue trabajando, el resto se volcó al comercio
Quienes antes se dedicaban al transporte público, ahora han optado por la venta de pescado, de elementos de bioseguridad u otra actividad que le dé mayor rédito económico



Las condiciones interpuestas para que el transporte público vuelva a funcionar responden a características para evitar el contagio del coronavirus. El distanciamiento social, la esterilización y la limpieza, obligó a los conductores a tomar medidas, los que no lo pudieron cumplir con las exigencias por el costo económico o las condiciones sociales en las que viven, optaron por otros rubros que consideran más redituables.
Por ejemplo, el secretario ejecutivo del Sindicato de Micros “La Tablada”, Abraham Condori, recordó que antes de la pandemia del coronavirus por vuelta transportaban alrededor de 21 pasajeros, pero ahora no pasan de 10, a pesar de que el precio del pasaje se mantiene.
Ingresos
Según su criterio, los ingresos se redujeron casi “a nada”, porque el precio de pasaje se mantiene, a los niños, mujeres embarazadas y personas adultas de la tercera edad está prohibido cobrarles.
Aseguró que el Transporte trabaja a pérdida. Llevó notas a la Secretaría de Movilidad Urbana para pedir que se trabaje en reorganizar el costo del servicio del transporte, subir el 80 por ciento de los pasajeros, más la ampliación de los horarios, “apenas se aguanta la media mañana, apenas son dos o tres vueltas al día, con pocos pasajeros y sin elementos de bioseguridad, no es redituable”, reclamó.
“Muchos de nuestros socios afiliados no están trabajando, ahora se dedican a vender otras cosas, como pescado, conservas, elementos de bioseguridad porque sacan más réditos sin conducir y guardando la herramienta de trabajo, en el transporte estamos mal”, se quejó.
Recordó que propusieron una tarifa única para cualquier persona que utilice sus servicios, sea adulto mayor, discapacitado o embarazada, pero eso no es viable, otras propuestas es la ampliación de los horarios de circulación hasta las 18.30 horas.
A su turno, el secretario general del Sindicato de Taxistas “4 de Julio “, Tomás Pereira, recordó que la institución tiene más de 50 años de vida, cuenta con 400 afiliados, y pese a la crisis sanitaria siguen las solicitudes de ingreso.
“Por la pandemia vivimos en una incertidumbre, se trata de precautelar la salud y el trabajo, hicimos un análisis los dirigentes y es necesario tener las mamparas para poder evitar un foco de contagio, tanto para los clientes como para los que brindan servicios”, agregó.
Admitió que no trabajan al 100 por ciento porque tienen afiliados que son mayores de edad y otros con enfermedades de base, lo que significa que solo un 20 a 30 por ciento de sus afiliados se encuentran en las calles para brindar sus servicios.
Alcaldía vigila respeto de protocolos
El responsable de la Secretaría de Movilidad Urbana de la Alcaldía de Tarija, Horacio Calisaya, recordó que se elaboró de manera consensuada un protocolo de seguridad social para micros, trufis y taxis para prevenir el contagio del Covid-19 en un sector que se considera vulnerable.
Sostuvo que el miércoles realizó un operativo, junto a otras instituciones, para realizar el control de vehículos de transporte público a los cuales se les observó que no portaban ningún tipo de identificación, por lo que se los remitió a la entidad uniformada pertinente.
“Fueron unos 80 vehículos que prestaban servicios sin las debidas medidas de bioseguridad, lo que se pide es que guarden los cuidados respectivos para prevenir el contagio, que se mantenga el distanciamiento físico y las medidas de seguridad”, dijo Calisaya.
“También pudimos observar en los operativos que la gente tiene temor al contagio en los vehículos de transporte público, estamos en una época alta de contagio y las personas prefieren no estar en vehículos cerrados, no utilizan el transporte público, le tienen rechazo”, explicó.