Hipertensión, un mal que desconoce tener la mayoría de los tarijeños
La “hipertensión arterial es un asesino silencioso” es la frase que se escucha a menudo, y es ésta la enfermedad con la que conviven día a día el 45% de los tarijeños. De éstos solo un cinco por ciento tiene la suerte de presentar señales y ser tratado a tiempo. El resto de las...



La “hipertensión arterial es un asesino silencioso” es la frase que se escucha a menudo, y es ésta la enfermedad con la que conviven día a día el 45% de los tarijeños. De éstos solo un cinco por ciento tiene la suerte de presentar señales y ser tratado a tiempo.
El resto de las personas no se dan cuenta de su caso hasta que su salud desencadena en embolias, derrames, neuropatías, retinopatías, infartos, etc. En Tarija, la hipertensión arterial afecta a un 40 a 45 por ciento de toda la población, el 30 por ciento no sabe que tiene presión alta, el 20 por ciento la tiene controlada y el resto no conoce la enfermedad.
A nivel nacional, uno de cada tres adultos bolivianos tiene hipertensión y poco más del 30% de éstos desconoce que sufre este mal.
Ciertamente, no nos resulta extraño hablar de “la tensión alta”, pero ¿sabemos realmente a lo que nos estamos refiriendo? De acuerdo a la médica Patricia Molina la hipertensión arterial es la elevación constante de la presión arterial por encima de los valores establecidos como estándar por la comunidad médica.
Estos valores normales se han fijado en 120- 129 mm Hg para la sistólica o máxima y 80-84 mm Hg para la diastólica o mínima, lo que nos sirve de referencia para calificarla como “alta” o “baja” de forma cotidiana.
“Cuando de manera constante sube la presión esto afecta al corazón y a las arterias. La situación provoca la aparición de enfermedades cardiacas, renales o problemas serios en las arterias del cerebro”, explica la experta.
En la mayoría de los casos, la hipertensión no responde a causas específicas, aunque se han detectado una serie de factores que aumentan considerablemente el riesgo de padecerla, como son la vida sedentaria, la obesidad, los antecedentes familiares, el consumo elevado de sal y alcohol, el tabaquismo y el estrés prolongado.
La mayoría de las personas hipertensas lo son por alguno o por la confluencia de varios de estos factores, aunque existen pacientes que desarrollan esta enfermedad a consecuencia de otros motivos como los trastornos renales o los relacionados con la ingesta de ciertos medicamentos.
El estrés y la mala alimentación
La buena salud del corazón es fundamental, sin embargo en Tarija muchas personas no tienen los cuidados para preservar esta salud. Por ello en los últimos años, en el departamento, se ha reportado el aumento de malos hábitos alimenticios, sedentarismo y estrés. Dicha situación ha aumentado los índices de hipertensión.
Molina asegura que el estrés es el desencadenante más frecuente de una patología cardiaca en pacientes, que ya tienen predisposición a esta enfermedad.
En la sala de espera del materno infantil del Hospital Obrero, María se encontraba en plena labor de parto, todo sucedió muy rápido por lo que apenas hubo oportunidad de avisar a la familia. La presencia de su madre le urgía pero ésta no aparecía e incluso después del nacimiento sus hermanos mantenían silencio sobre dónde estaba su mamá.
Elizabeth, hermana de María, nos cuenta que al enterarse de que su hermana estaba por dar a luz se dirigió al hospital a toda prisa acompañada de su madre, ambas muy emocionadas.
Apenas llegaron consultaron en el área de información sobre su hermana, pero de repente su madre se desplomó y sufrió un paro cardíaco fulminante. Murió en el acto, aún rodeada de médicos no se pudo hacer nada, luego no tuvieron valor para comunicarle esta pena a María que recibía con tanta alegría a su primera hija.
La muerte súbita por problemas cardíacos en nuestro medio se produce generalmente por dos causas, explica el médico cardiólogo, Ciro Figueroa, “una por arritmia que no presenta dolor en el pecho y la otra por un infarto, aunque a veces puede darse por ambas razones al mismo tiempo”.
“Por lo general la muerte súbita ocurre sin previo aviso, sin embargo la persona puede haber estado ya enferma o no haber seguido un tratamiento. También es posible que no haya reparado en los síntomas que se anuncian con palpitaciones, mareos, dolor en el pecho, dificultad para trabajar, siempre hay un anuncio premonitorio que el paciente no toma en cuenta”, dijo.
La madre de Elizabeth y María, falleció a sus 58 años de edad, estaba diagnosticada con miocardiopatía chagásica, una inflamación en el músculo cardíaco causada por una infección provocada por el parásito Trypanosoma cruzi, que en nuestro medio es trasmitido por la vinchuca. Al estar ya condicionada a un problema en el corazón no pudo sobrellevar una emoción tan grande por lo que su estrés tuvo el resultado de muerte concluyente.
La sintomatología
A la falta de causas específicas se ha de sumar otro elemento que en muchos casos hace que la presión arterial elevada pase desapercibida y ésta es la ausencia de sintomatología.
De esta manera los expertos recomiendan la prevención y la vigilancia periódica, sumado a ello será importante llevar un estilo de vida activo, una alimentación sana y equilibrada, evitar el consumo excesivo de sal y alcohol, no fumar, revisar periódicamente los niveles de tensión arterial y, en caso de realizar un tratamiento médico, seguirlo rigurosamente.
Hablar del diagnóstico precoz de la hipertensión es, por tanto, hablar de una medida de prevención muy eficaz para evitar la aparición de enfermedades cardiovasculares (infarto, angina de pecho), renales (insuficiencia renal crónica) o accidentes cerebrovasculares (infarto, hemorragia cerebral).
Síntomas principales de la hipertensión
Síntomas
Náuseas, dolor de cabeza, somnolencia, zumbido en los oídos, pequeños puntos de sangre en los ojos, visión doble, dificultad para respirar y palpitaciones cardíacas.
Efectos
A pesar de que la hipertensión es una enfermedad silenciosa, puede provocar problemas de salud graves como por ejemplo causar una insuficiencia cardíaca, un ACV o pérdida de la visión
Prevención
Tomarse de manera regular la presión puede revelarnos la enfermedad y ayudar a prevenir mayores consecuencias.
El resto de las personas no se dan cuenta de su caso hasta que su salud desencadena en embolias, derrames, neuropatías, retinopatías, infartos, etc. En Tarija, la hipertensión arterial afecta a un 40 a 45 por ciento de toda la población, el 30 por ciento no sabe que tiene presión alta, el 20 por ciento la tiene controlada y el resto no conoce la enfermedad.
A nivel nacional, uno de cada tres adultos bolivianos tiene hipertensión y poco más del 30% de éstos desconoce que sufre este mal.
Ciertamente, no nos resulta extraño hablar de “la tensión alta”, pero ¿sabemos realmente a lo que nos estamos refiriendo? De acuerdo a la médica Patricia Molina la hipertensión arterial es la elevación constante de la presión arterial por encima de los valores establecidos como estándar por la comunidad médica.
Estos valores normales se han fijado en 120- 129 mm Hg para la sistólica o máxima y 80-84 mm Hg para la diastólica o mínima, lo que nos sirve de referencia para calificarla como “alta” o “baja” de forma cotidiana.
“Cuando de manera constante sube la presión esto afecta al corazón y a las arterias. La situación provoca la aparición de enfermedades cardiacas, renales o problemas serios en las arterias del cerebro”, explica la experta.
En la mayoría de los casos, la hipertensión no responde a causas específicas, aunque se han detectado una serie de factores que aumentan considerablemente el riesgo de padecerla, como son la vida sedentaria, la obesidad, los antecedentes familiares, el consumo elevado de sal y alcohol, el tabaquismo y el estrés prolongado.
La mayoría de las personas hipertensas lo son por alguno o por la confluencia de varios de estos factores, aunque existen pacientes que desarrollan esta enfermedad a consecuencia de otros motivos como los trastornos renales o los relacionados con la ingesta de ciertos medicamentos.
El estrés y la mala alimentación
La buena salud del corazón es fundamental, sin embargo en Tarija muchas personas no tienen los cuidados para preservar esta salud. Por ello en los últimos años, en el departamento, se ha reportado el aumento de malos hábitos alimenticios, sedentarismo y estrés. Dicha situación ha aumentado los índices de hipertensión.
Molina asegura que el estrés es el desencadenante más frecuente de una patología cardiaca en pacientes, que ya tienen predisposición a esta enfermedad.
En la sala de espera del materno infantil del Hospital Obrero, María se encontraba en plena labor de parto, todo sucedió muy rápido por lo que apenas hubo oportunidad de avisar a la familia. La presencia de su madre le urgía pero ésta no aparecía e incluso después del nacimiento sus hermanos mantenían silencio sobre dónde estaba su mamá.
Elizabeth, hermana de María, nos cuenta que al enterarse de que su hermana estaba por dar a luz se dirigió al hospital a toda prisa acompañada de su madre, ambas muy emocionadas.
Apenas llegaron consultaron en el área de información sobre su hermana, pero de repente su madre se desplomó y sufrió un paro cardíaco fulminante. Murió en el acto, aún rodeada de médicos no se pudo hacer nada, luego no tuvieron valor para comunicarle esta pena a María que recibía con tanta alegría a su primera hija.
La muerte súbita por problemas cardíacos en nuestro medio se produce generalmente por dos causas, explica el médico cardiólogo, Ciro Figueroa, “una por arritmia que no presenta dolor en el pecho y la otra por un infarto, aunque a veces puede darse por ambas razones al mismo tiempo”.
“Por lo general la muerte súbita ocurre sin previo aviso, sin embargo la persona puede haber estado ya enferma o no haber seguido un tratamiento. También es posible que no haya reparado en los síntomas que se anuncian con palpitaciones, mareos, dolor en el pecho, dificultad para trabajar, siempre hay un anuncio premonitorio que el paciente no toma en cuenta”, dijo.
La madre de Elizabeth y María, falleció a sus 58 años de edad, estaba diagnosticada con miocardiopatía chagásica, una inflamación en el músculo cardíaco causada por una infección provocada por el parásito Trypanosoma cruzi, que en nuestro medio es trasmitido por la vinchuca. Al estar ya condicionada a un problema en el corazón no pudo sobrellevar una emoción tan grande por lo que su estrés tuvo el resultado de muerte concluyente.
La sintomatología
A la falta de causas específicas se ha de sumar otro elemento que en muchos casos hace que la presión arterial elevada pase desapercibida y ésta es la ausencia de sintomatología.
De esta manera los expertos recomiendan la prevención y la vigilancia periódica, sumado a ello será importante llevar un estilo de vida activo, una alimentación sana y equilibrada, evitar el consumo excesivo de sal y alcohol, no fumar, revisar periódicamente los niveles de tensión arterial y, en caso de realizar un tratamiento médico, seguirlo rigurosamente.
Hablar del diagnóstico precoz de la hipertensión es, por tanto, hablar de una medida de prevención muy eficaz para evitar la aparición de enfermedades cardiovasculares (infarto, angina de pecho), renales (insuficiencia renal crónica) o accidentes cerebrovasculares (infarto, hemorragia cerebral).
Síntomas principales de la hipertensión
Síntomas
Náuseas, dolor de cabeza, somnolencia, zumbido en los oídos, pequeños puntos de sangre en los ojos, visión doble, dificultad para respirar y palpitaciones cardíacas.
Efectos
A pesar de que la hipertensión es una enfermedad silenciosa, puede provocar problemas de salud graves como por ejemplo causar una insuficiencia cardíaca, un ACV o pérdida de la visión
Prevención
Tomarse de manera regular la presión puede revelarnos la enfermedad y ayudar a prevenir mayores consecuencias.