La tradicional sopa de maní, el “plato bandera de Bolivia”
La sopa de maní es una delicia que ha trascendido fronteras, pues son muchos los extranjeros que se han llevado su delicioso recuerdo. En Tarija este plato se lo encuentra en casi todos los restaurantes que ofrecen un menú tradicional o gourmet. Aunque en muchos departamentos se la prepara...



La sopa de maní es una delicia que ha trascendido fronteras, pues son muchos los extranjeros que se han llevado su delicioso recuerdo. En Tarija este plato se lo encuentra en casi todos los restaurantes que ofrecen un menú tradicional o gourmet.
Aunque en muchos departamentos se la prepara muy bien, en Tarija encontramos las mejores ofertas de este plato en el mercado Central, pero también en restaurantes puntuales como El Rincón Criollo, la Cabaña de Pedro y por supuesto en el campo.
Con fideo, arroz o simplemente con papas fritas; con carne de res, de pollo o de llama, así es como se prepara en diferentes regiones del país. Más aún, en Tarija se prepara con carne de res, a veces de pollo, pero siempre con papa frita.
Mabel Suárez afirma que ya lleva años cocinando sopa de maní para venderla en el mercado Bolívar, asegura que hace una de las mejores sopas y se anima a darnos su receta.
Comienza diciendo que en una olla se hace hervir la carne, la cebolla, el apio y el perejil para hacer un caldo. Afirma que cuando ya esté listo se agrega las zanahorias y las arvejas. Se deja hervir unos minutos y se agrega el fideo.
“Luego se debe añadir el maní molido y se deja que hierba a fuego medio hasta que espese, posteriormente se retira del fuego y se le hecha oreganito encima” dice y agrega que se deja reposar cinco minutos y se sirve con perejil espolvoreado y papa frita que se echa encima de la sopa.
Más aún nos revela uno de sus secretos. “Es más riquita cuando se la acompaña con mote cocido a leña y llajua”, dice y asegura que éste es uno de los aspectos que aprecian sus clientes.
Su sopa cuesta ocho bolivianos la normal y la sencilla seis. Cuenta que la tiene lista desde las diez de la mañana y se termina a la una de la tarde.
El gusto por la sopa
El País realizó un sondeo a 50 personas y se les preguntó ¿cuál es su sopa favorita? 40 de los consultados aseguraron que la sopa de maní, los otros hicieron alusión a la sopa de arroz con papa frita.
Clara Guerrero vive por el barrio Senac, más aún, asegura que una de las mejores sopas que ha probado es de doña Nico, quien vende sus deliciosos platos en el tradicional mercado Central. De esta manera revela que al menos tres veces por semana se da una escapada de sus labores cotidianas para ir a disfrutar la deliciosa sopa.
“No he probado otra mejor. En otros lugares la hacen muy chua, con poco maní o sin papa frita, para mí el que sea espesita con sabor a maní y tenga papa frita es muy importante”, asegura.
Según Julio López, tarijeño de pura cepa -como él dice- creció tomando sopa de maní. “Mi abuelita era cocinera, ella tenía un restaurante tradicional en la calle Cochabamba y nosotros íbamos todos los días a almorzar ahí. No había día que yo no me pida la sopita de maní y hasta ahora me encanta, aunque no he probado otra mejor que la de mi abuela que en paz descanse”, cuenta.
Logros obtenidos por la sopa de maní
La tradicional sopa de maní con papa frita que forma parte de la gastronomía tarijeña, resultó ganadora con el tercer lugar en el primer festival regional de comidas típicas y de las sopas que se desarrolló en Amberes- capital del municipio de Brasschaat- Bélgica el 22 de agosto de 2009.
Frank Mortelmans, miembro de los bomberos de Amberes, a través de un contacto telefónico con la coordinación del hermanamiento Tarija- Brasschaat, dio a conocer el logro y destacó la participación de los residentes bolivianos en el concurso.
Pero éste no fue el único logro de esta delicia. En 2014 Elba Rodríguez, una joven concursante de 23 años presentó en el concurso internacional de Master chef la sopa de maní, que con su sabor fascinó a los jurados del primer reality de cocina realizado en Argentina.
En 2018 alrededor de este plato también se hizo una iniciativa importante, pues mediante la página de Facebook del Viceministerio de Turismo, se motivó una votación para que los bolivianos pudieran votar por el plato con el que más se sintieran representados. Las opciones, además de la sopa de maní, fueron: picante mixto, majao y pique macho.
El 31 de julio, después de casi un mes de lanzado el concurso, se cerró la votación. El plato ganador se dio a conocer cerca del 6 de agosto, como una de las actividades del aniversario patrio. La sopa de maní se coronó como el plato bandera de Bolivia.
El proyecto de ley
A raíz de toda la aceptación en Bolivia sobre este plato, en noviembre del pasado año se presentó un proyecto de ley que busca que la sopa de maní sea declarada “plato bandera de Bolivia”.
El acto se realizó en la Casa del Artista del Ministerio de Culturas y Turismo, en La Paz, con la presencia de autoridades, chefs y personas ligadas a la gastronomía boliviana.
“Con esto empezamos la defensa del patrimonio cultural de la gastronomía boliviana. Entregamos este proyecto para que la sopa de maní sea el plato bandera de todos los bolivianos. Luego seguiremos trabajando con los otros platos, porque tenemos más de 500 platos típicos originarios que no se conocen”, expresó el chef Juan Chacolla, secretario general de la Federación Sindical Mixta de Trabajadores Gastronómicos y Hoteleros de Bolivia.
Las variaciones de la sopa de maní en Bolivia
La sopa de maní tiene variaciones en su preparación según la zona donde se la cocine, tras consultas con habitantes de diferentes regiones se conoció que en los llanos se suele servir con arroz, yuca y plátano de freír.
En algunas zonas de los valles incorporan ají colorado, caldo de chivo o res, y papa. En el altiplano es conocida por llevar cordero y papitas fritas.
De acuerdo a la historiadora Beatriz Rossells no hay un registro del origen específico de la sopa de maní, “aunque se sabe que el maní es originario de Bolivia sus ingredientes la muestran mestiza: papa y maní prehispánico, zanahoria, arroz y fideo europeos”, explica.
Los ingredientes
según la zona
En los llanos
La sopa de maní en los llanos se suele servir con arroz, yuca e incluso nunca puede faltar el plátano de freír.
En los valles
En algunas zonas de los valles a la sopa de maní incorporan el ají colorado molido en piedra, caldo de chivo o res, y papa.
En el altiplano
En el altiplano la sopa de maní es muy conocida por llevar en su preparación cordero y papitas fritas.
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Aunque en muchos departamentos se la prepara muy bien, en Tarija encontramos las mejores ofertas de este plato en el mercado Central, pero también en restaurantes puntuales como El Rincón Criollo, la Cabaña de Pedro y por supuesto en el campo.
Con fideo, arroz o simplemente con papas fritas; con carne de res, de pollo o de llama, así es como se prepara en diferentes regiones del país. Más aún, en Tarija se prepara con carne de res, a veces de pollo, pero siempre con papa frita.
Mabel Suárez afirma que ya lleva años cocinando sopa de maní para venderla en el mercado Bolívar, asegura que hace una de las mejores sopas y se anima a darnos su receta.
Comienza diciendo que en una olla se hace hervir la carne, la cebolla, el apio y el perejil para hacer un caldo. Afirma que cuando ya esté listo se agrega las zanahorias y las arvejas. Se deja hervir unos minutos y se agrega el fideo.
“Luego se debe añadir el maní molido y se deja que hierba a fuego medio hasta que espese, posteriormente se retira del fuego y se le hecha oreganito encima” dice y agrega que se deja reposar cinco minutos y se sirve con perejil espolvoreado y papa frita que se echa encima de la sopa.
Más aún nos revela uno de sus secretos. “Es más riquita cuando se la acompaña con mote cocido a leña y llajua”, dice y asegura que éste es uno de los aspectos que aprecian sus clientes.
Su sopa cuesta ocho bolivianos la normal y la sencilla seis. Cuenta que la tiene lista desde las diez de la mañana y se termina a la una de la tarde.
El gusto por la sopa
El País realizó un sondeo a 50 personas y se les preguntó ¿cuál es su sopa favorita? 40 de los consultados aseguraron que la sopa de maní, los otros hicieron alusión a la sopa de arroz con papa frita.
Clara Guerrero vive por el barrio Senac, más aún, asegura que una de las mejores sopas que ha probado es de doña Nico, quien vende sus deliciosos platos en el tradicional mercado Central. De esta manera revela que al menos tres veces por semana se da una escapada de sus labores cotidianas para ir a disfrutar la deliciosa sopa.
“No he probado otra mejor. En otros lugares la hacen muy chua, con poco maní o sin papa frita, para mí el que sea espesita con sabor a maní y tenga papa frita es muy importante”, asegura.
Según Julio López, tarijeño de pura cepa -como él dice- creció tomando sopa de maní. “Mi abuelita era cocinera, ella tenía un restaurante tradicional en la calle Cochabamba y nosotros íbamos todos los días a almorzar ahí. No había día que yo no me pida la sopita de maní y hasta ahora me encanta, aunque no he probado otra mejor que la de mi abuela que en paz descanse”, cuenta.
Logros obtenidos por la sopa de maní
La tradicional sopa de maní con papa frita que forma parte de la gastronomía tarijeña, resultó ganadora con el tercer lugar en el primer festival regional de comidas típicas y de las sopas que se desarrolló en Amberes- capital del municipio de Brasschaat- Bélgica el 22 de agosto de 2009.
Frank Mortelmans, miembro de los bomberos de Amberes, a través de un contacto telefónico con la coordinación del hermanamiento Tarija- Brasschaat, dio a conocer el logro y destacó la participación de los residentes bolivianos en el concurso.
Pero éste no fue el único logro de esta delicia. En 2014 Elba Rodríguez, una joven concursante de 23 años presentó en el concurso internacional de Master chef la sopa de maní, que con su sabor fascinó a los jurados del primer reality de cocina realizado en Argentina.
En 2018 alrededor de este plato también se hizo una iniciativa importante, pues mediante la página de Facebook del Viceministerio de Turismo, se motivó una votación para que los bolivianos pudieran votar por el plato con el que más se sintieran representados. Las opciones, además de la sopa de maní, fueron: picante mixto, majao y pique macho.
El 31 de julio, después de casi un mes de lanzado el concurso, se cerró la votación. El plato ganador se dio a conocer cerca del 6 de agosto, como una de las actividades del aniversario patrio. La sopa de maní se coronó como el plato bandera de Bolivia.
El proyecto de ley
A raíz de toda la aceptación en Bolivia sobre este plato, en noviembre del pasado año se presentó un proyecto de ley que busca que la sopa de maní sea declarada “plato bandera de Bolivia”.
El acto se realizó en la Casa del Artista del Ministerio de Culturas y Turismo, en La Paz, con la presencia de autoridades, chefs y personas ligadas a la gastronomía boliviana.
“Con esto empezamos la defensa del patrimonio cultural de la gastronomía boliviana. Entregamos este proyecto para que la sopa de maní sea el plato bandera de todos los bolivianos. Luego seguiremos trabajando con los otros platos, porque tenemos más de 500 platos típicos originarios que no se conocen”, expresó el chef Juan Chacolla, secretario general de la Federación Sindical Mixta de Trabajadores Gastronómicos y Hoteleros de Bolivia.
Las variaciones de la sopa de maní en Bolivia
La sopa de maní tiene variaciones en su preparación según la zona donde se la cocine, tras consultas con habitantes de diferentes regiones se conoció que en los llanos se suele servir con arroz, yuca y plátano de freír.
En algunas zonas de los valles incorporan ají colorado, caldo de chivo o res, y papa. En el altiplano es conocida por llevar cordero y papitas fritas.
De acuerdo a la historiadora Beatriz Rossells no hay un registro del origen específico de la sopa de maní, “aunque se sabe que el maní es originario de Bolivia sus ingredientes la muestran mestiza: papa y maní prehispánico, zanahoria, arroz y fideo europeos”, explica.
Los ingredientes
según la zona
En los llanos
La sopa de maní en los llanos se suele servir con arroz, yuca e incluso nunca puede faltar el plátano de freír.
En los valles
En algunas zonas de los valles a la sopa de maní incorporan el ají colorado molido en piedra, caldo de chivo o res, y papa.
En el altiplano
En el altiplano la sopa de maní es muy conocida por llevar en su preparación cordero y papitas fritas.
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