La fiesta de la Virgen de Guadalupe reunió a cuatro generaciones de la familia Albornoz Yelma



La comunidad de Rancho Norte, en la provincia Méndez, fue el escenario donde se celebró la festividad de la Virgen de Guadalupe, una herencia que dejaron Teodoro Albornoz y Alcira Yelma, y que perdura por más de 100 años.
Y ése fue el motivo que reunió a cuatro generaciones, hijos, nietos, bisnietos y tataranieto, quienes tratan de mantener viva esta festividad religiosa, con el apoyo de hijos políticos, amigos de la familia y comunarios de Rancho Norte.
La familia llegó de diversos lugares, Jujuy (Argentina), Madrid (España), Yacuiba, Villa Montes y comunidades aledañas, para celebrar a la Virgen de Guadalupe, reunirse después de cinco años y, así, recordar a quienes fueron la base de esta festividad religiosa.