Reescribiendo el futuro de Tarija con un “Ecolápiz”
Triple impacto: un “Ecolápiz” se hace con papel reciclado, contiene información ambiental importante, y trae semillas que pueden ser plantadas al finalizar su uso.
Cinthia Fabiola Reynoso Cabezas es psicóloga, profesión que le permitió trabajar sobre derechos urbanos y medioambientales de las poblaciones vulnerables. Conocer los barrios periurbanos y entender la inconciencia de la población general en cuanto a la gestión de residuos le mostró la contundencia de la realidad. “Creí que ayudaba y mejoraba el futuro de muchos, hasta que conocí el relleno sanitario de Tarija y las consecuencias que nuestros hábitos diarios tienen en la naturaleza, en nuestro presente y nuestro futuro”.
La creadora de “Ecolápiz” tiene muy claro que Tarija ocupa el quinto puesto departamental en generación de basura, aunque la población no es ni la cuarta parte de la del primer lugar, Santa Cruz. A esto se suma una planificación urbana caótica que permite loteos indiscriminados por encima de quebradas y zonas de recarga acuífera, lo que aumentará la generación de residuos y la demanda de servicios, trayendo en poco tiempo una crisis urbana-ambiental de proporción y escala considerables. “No estamos pensando, y menos actuando con responsabilidad y sostenibilidad”.
“Creí que ayudaba y mejoraba el futuro de muchos, hasta que conocí el relleno sanitario de Tarija y las consecuencias que nuestros hábitos diarios tienen en la naturaleza, en nuestro presente y nuestro futuro”
“Ecolápiz” fue inspirado por la realidad de las familias que viven alrededor del relleno sanitario. “Ellos han desarrollado sistemas para separar, reutilizar y aprovechar los residuos. Por ejemplo, desde hace dos años la gente del barrio Nuevo Amanecer determinó que serían un eco-barrio, y hoy solo dejan 20% de la basura que generaban. Conocer esto me ha llevado a cambiar mi manera de vivir. En medio de toda esa basura, existe materia prima que puede tener un segundo ciclo de vida”.
Aunque en Tarija no es fácil emprender en la elaboración de productos a base de residuos, Cinthia ha mantenido su voluntad gracias al ejemplo de sus padres. Desde niña, la llevaron a ferias y exposiciones, mostrándole que la solidez económica se logra con esfuerzo y que a veces las cosas no salen bien a la primera. Así, “Ecolápiz” ha logrado la representación del Fondo Mundial para la Naturaleza WWF Bolivia, la presencia en eventos y ferias como Innova Women y Green Heart, tres puntos de venta oficial en Tarija (Librería Amelie, tienda de regalos Wonderland y Fiory), y ya exporta a Perú.
Cinthia tiene claro que su misión es promover el consumo consciente en la ciudadanía tarijeña, mostrando que es posible generar ingresos a través de la transformación de los residuos. “Tengo la dicha de contar con el apoyo incondicional de mi familia, que desde un inicio ha entendido el compromiso social que tengo con mi Tarija y me ha acompañado durante todos los momentos de mi vida”.
Si en Suiza o Suecia pueden reciclar más del 90% de residuos, ¿por qué en Tarija no?