Isabel Quiroga: la ecología y holística en “Gaia”
Una amplia gama de productos se gesta en “Gaia”, el negocio de Isabel.
Fue hace 6 años que María Isabel Quiroga sentó los cimientos de su emprendimiento “Gaia”, con el objetivo de promover una conciencia ecológica con accesorios amigables con el ambiente. Aunque Isabel se formó originalmente como administradora de empresas, sabía que aún no había encontrado su camino en la vida.
Con la intención de hacer algo diferente se inscribió a un taller de orfebrería. Si bien ahí aprendió a fabricar joyas en plata, Isabel empezó a experimentar con diferentes materiales, logrando unos accesorios con papel periódico como principal elemento, que luego pintaba a mano. Con ellos perseguía un doble objetivo: crear accesorios biodegradables, pero duraderos mientras se los use.
Sobre esa base se fue consolidando “Gaia”. Sin embargo, Isabel sabía que aún podía innovar más con sus joyas artesanales.
“‘Gaia’ pretende promover una consciencia ecológica”.
Un momento determinante en su vida fue cuando descubrió que en La Paz se creaba papel en base a fibra de totora. Eso la inspiró a probar esa nueva materia prima en sus joyas. Las totoras son extraídas directamente del lago Titicaca cuando alcanzan la adultez a los tres años. La primera mujer en convertirlas en materia prima lo hizo con la intención de evitar que estas se desperdicien en los chaqueos. El proceso se lleva a cabo de manera artesanal.
Entonces Isabel lanzó dos nuevas líneas con colecciones cada cierto tiempo. Las joyas con papel periódico fueron dejadas temporalmente de lado, y a las de fibra de totora fueron añadidas otras de plata.
Pero “Gaia” aún estaba lejos de transformarse en lo que es hoy, ya que no solo añadió nuevos tipos de joyas, sino nuevos productos en general. Unos de los primeros fueron los atrapasueños, que más que un enfoque ambiental, tienen uno holístico y espiritual. Al igual que las joyas, los atrapasueños son trabajados a mano y con partes de fibra de totora.
Aunque por mucho tiempo esa fue la principal gama de productos, la pandemia por covid-19 obligó a Isabel a realizar cambios en “Gaia”. El golpe del encierro frenó las ventas casi al completo, por lo que Isabel implementó un nuevo producto, esta vez con un enfoque más artístico. La línea de arte, entre postales y cuadros, brilló por realizar retratos de mascotas, cada uno pintado por ella. Los retratos prácticamente lograron salvar a la marca.
La línea de arte tiene precios desde los Bs. 50, mientras que las joyas de fibra de totora sobre pasan los 50 dólares y los atrapasueños pueden alcanzar los 500 dólares. Actualmente Isabel planea el lanzamiento de las nuevas colecciones para el 2022, con todas las ganas de seguir trabajando por difundir una conciencia ambiental.