Maritza y Lindalba Bravo, las hermanas que emprenden juntas con accesorios
Con el apoyo de sus padres iniciaron su negocio en octubre de 2020.



El deseo de emprender se manifestó temprano en la vida de Maritza Rossemary Bravo Benítez, así como la oportunidad de lograr ese anhelo. A sus 14 años trabaja ya en un negocio junto a su hermana Lindalba Bravo Benítez, de 16 años. Se trata de Bella Turquesa, el emprendimiento en el que las hermanas venden sus joyas artesanales para el público tarijeño.
Maritza cuenta que esas ganas que “siempre” tuvo de emprender gozaron desde el inicio del apoyo de sus padres. Cuando ella les contó su intención, estos se dedicaron a apoyarla, recuerda Maritza: “Cuando le dije la idea, a mi papá le encantó que quiera emprender desde ahora”.
Como productos eligieron las joyas artesanales, dado que Maritza había aprendido en la materia de técnica vocacional a realizar accesorios de bisutería. Entonces le resultó relativamente sencillo arrancar el emprendimiento, ya que contaba con algo de material y conocimiento.
“Emprender siempre fue un deseo”.
Las hermanas lanzaron Bella Turquesa en octubre de 2020 y desde entonces que trabajan lado a lado. Ambas realizan las mismas tareas, ya sea crear los accesorios o administrar las redes sociales. Maritza explica que congenia muy bien con su hermana a la hora de trabajar, pues juntas definen las acciones y los diseños; ambas tienen que estar de acuerdo para aprobar una decisión. Sin embargo, eso no implica que algunas veces sus criterios discrepen. Aunque no siempre estén de acuerdo, intentan aplicar lo mejor de las ideas de cada una.
Uno de los desafíos que enfrenta Maritza es el de equilibrar su vida entre su emprendimiento y el colegio, pues una de las condiciones por las que su mamá aceptó el proyecto fue priorizar los estudios. Esa regla Maritza la tiene muy presente y siempre trabaja luego de terminar sus deberes, aunque algunas veces eso implique quedarse despierta hasta tarde. Cuando pasa eso, cuenta que siente una enorme satisfacción y orgullo de sí misma al cerrar la jornada con todo terminado.
Entre los productos que ofrecen se puede encontrar gargantillas, pulseas, collares y todo tipo de accesorios entre Bs 20 y Bs 25 y, si son de acero, alrededor de Bs 50. Para el futuro, Maritza y Lindalba tienen planeado ampliar el abanico de productos y lanzarse al mercado masculino. Como un sueño en el horizonte, piensan en algún día abrir una tienda en Tarija.