Arrojaron de una carreta cadáver de joven acuchillado
La localidad bonaerense de Rafael Castillo, en el partido de La Matanza (Argentina), se convirtió en escenario de un tremendo suceso, ya que un humilde joven, de 20 años, fue salvajemente asesinado a cuchilladas y después los criminales arrojaron su cadáver a la vía pública, desde un carro...



La localidad bonaerense de Rafael Castillo, en el partido de La Matanza (Argentina), se convirtió en escenario de un tremendo suceso, ya que un humilde joven, de 20 años, fue salvajemente asesinado a cuchilladas y después los criminales arrojaron su cadáver a la vía pública, desde un carro tirado caballos. Pesquisas policiales lograron detener por el caso a 2 individuos.
Voceros de los tribunales de La Matanza revelaron a cronica.com.ar que la infortunada víctima fue identificada como Brian Agustín Frechero, de 20 años.
Trascendió que el hecho se produjo días pasados, aunque se conoció en las últimas horas, se descubrió cuando los integrantes del Comando Patrulla (C.P.) de La Matanza, a raíz de un llamado al número telefónico de emergencias 911, localizaron el cuerpo sin vida y ensangrentado del muchacho en el cruce de Méndez de Andes y Varela.
Habitantes del vecindario aseguraron que el cadáver había sido arrojado de un carro que era tirado por equinos.
De acuerdo a lo manifestado por los informantes, el occiso presentaba heridas de arma blanca en la región torácica.
Gracias a los distintos datos que fueron aportados por la gente del barrio, los servidores públicos de la comisaría de Rafael Castillo (3ª Oeste de La Matanza) realizaron varios procedimientos y de esta manera apresaron, por el ilícito, a 2 sujetos, de 24 y 27 años, quienes habrían agredido a la víctima como saldo de una violenta discusión.
Intervino en la causa el doctor Claudio Fornaro, fiscal de la Unidad Temática de Homicidios del departamento judicial de La Matanza.
Otro caso
La autopsia realizada al cadáver del empresario español de 83 años que fue hallado asesinado el martes en el barrio porteño de Barracas confirmó el miércoles que fue asfixiado con una toalla y que tenía golpes en la cabeza, informaron fuentes policiales.
La necropsia a Felipe Alonso Fernández (83) se realizó en el Cuerpo Médico Forense de la Capital Federal y arrojó que la mecánica de la muerte fue “asfixia mecánica por sofocación”, ya que a la víctima le colocaron una toalla en la boca y cinta aisladora en el cuello.
La autopsia también confirmó lo que el médico legista había advertido en la escena del crimen: que el empresario había sufrido golpes en la cabeza y que la data de muerte era de alrededor de 24 horas antes del hallazgo, es decir que lo mataron el domingo.
Este último dato coincide con lo manifestado por un vecino llamado Rubén, quien en diálogo con la prensa recordó que la última vez que vio a Fernández fue el domingo al mediodía, entre las 12 y 13, cuando se saludaron “con la mano de vereda a vereda”.
El hombre, quien vive en la cuadra de Anchoris al 300 y que el pasado martes fue testigo de procedimiento cuando la Policía revisó la escena del crimen, contó que el cadáver del español “estaba atado de pies y manos”.
El vecino dijo que “había indicios de sangre” en varios ambientes, que “estaba toda revuelta la casa” y que allí “hicieron peritajes”.
“Era una persona muy reservada, no te puedo decir si se llevaron algo, si hubo plata”, dijo Rubén sobre su vecino y aclaró que los policías revisaron “todo, y dinero no encontraron”.
“Tengo entendido que ya le habían robado, pero no te daba detalles, era una persona muy dura”, agregó el vecino, que remarcó que Fernández estaba “siempre activo” y “cruzaba de vereda a vereda y arreglaba los camiones”. En tanto, fuentes de la investigación indicaron que por orden del fiscal de la causa, Marcelo Roma, detectives de la División Homicidios de la Policía Federal (PFA) realizaban una nueva inspección en la casa y en los galpones aledaños en busca de nuevas pruebas.